Verónica y Daniela luego de comprar sus alimentos se dirigieron a los comedores del colegio para platicar mientras comían:
- ¡Ah!, ¿Terminaste la tabla que dejó de tarea la profesora Victoria? -preguntó Verónica a Daniela.
- Sí, estoy ansiosa por saber los resultados que dará la profesora en la próxima clase.
- Ajá, los resultados. Mejor dí que estas ansiosa por ver a la Profesora en la próxima clase.
Daniela con las mejillas rojizas y un poco apenada, bajo la mirada mientras apenas hacía notar una sonrisa de lado.
- Hablando de la Reina de Roma... -dijo Verónica mirando con detenimiento a la profesora Victoria quien estaba por sentarse a dos mesas detrás de ellas. - Voltea disimuladamente, Dani.
Daniela hizo caso a Verónica y efectivamente era la profesora Victoria, quien comía un cóctel de frutas.
- Se ve tan elegante comiendo. -dijo Daniela, finalizando con un suspiro.
- No solo comiendo, sus ropas parecen carísimas, su sueldo debe ser más alto de lo que dicen todos los profesores. Pero hasta sus movimientos parecen caros.
- JAJAJAJAJA. -soltó una carcajada Daniela.
- Sería la candidata perfecta para ser tu sugar mommy. Hoy por la mañana la vi bajando de su automóvil, es lindísimo.
- No me interesa su dinero. Me provoca algo que jamás antes había sentido.
- Estás enamorándote de la profesora, seguro que es eso. Y por lo poco o mucho que yo he visto ella te ha echado algunas miradillas. Ojalá ésta historia sea una de esas bonitas novelas de amor verdadero... -dijo Verónica con mucha ilusión, finalizando con un suspiro.
- No me da muchas señales que digamos, quizá solo le agrade y ya. -dijo Daniela con sentimiento de desánimo.
- ¡Entonces debes llamar su atención! -dijo Verónica con una mueca sobre su rostro demostrando buscar un plan.
Sonó el timbre para regresar a clases y todos se retiraban de los comedores. La profesora Victoria estaba delante de ellas usando su celular, parecía estar teniendo una conversación importante pues centraba toda su atención a ese aparato.
Verónica empujó a Daniela logrando que Daniela rozara con brusquedad a la profesora Victoria. Verónica también fingió haber sido empujada por alguien más.
- Pe... Pe... Perdón profesora. -dijo Daniela a la profesora Victoria con un sentimiento de arrepentimiento.
Victoria miró muy seria a Verónica y a Daniela mientras guardaba su celular en la bolsa de su pantalón, generando un silencio incómodo.
- No se preocupen chicas, ¿están bien?
- Sí. -respondieron a la par Verónica y Daniela.
- Nunca he entendido porque se apresuran en correr los alumnos si tienen 5 minutos de tolerancia para llegar al salón al sonar el timbre. -dijo la profesora Victoria mientras caminaba a la par con ella subiendo las escaleras.
- La presión del momento por no querer perder clases. -dijo Daniela.
- O quizá porque somos nuevos y no sabemos mucho aún, necesitamos que alguien nos enseñe... -dijo Verónica a la profesora Victoria con una sonrisa coqueta. Mientras jalaba a Daniela del brazo para alejarse de la profesora y digirse a su salón.
Mientras ellas se alejaban, Victoria sonrió de lado, levantando la ceja contraria al lado donde dirigió la sonrisa.
- Vero, ¿por qué le dijiste eso?
- Sonaste muy nerd, alguien debía darle intensidad a la plática.
Casi al terminar el horario de clases:
- Dani, intercambiemos celulares para registrar nuestros números en contactos. -dijo Verónica mientras le daba el suyo a Daniela y tomaba el de Daniela.
