Daniela se despertó, se dió un baño, preparó sus cosas y desayunó como siempre para ir al Colegio, al salir de su casa tomó el taxi y al llegar al Colegio y entrar vio las luces encendidas de la sala de maestros, como era de suponer, Victoria era quien estaba ahí, Daniela se sentía molesta por los celos que sintió el día anterior al ver a Victoria con aquella mujer, siempre que llegaba al colegio saludaba a Victoria, pero su enojo lo impidió ésta vez, camino rápido por el pasillo sin siquiera voltear a ver hacia el ventanal enorme de la sala de maestros.
Victoria se despertó, desayunó, se dió un baño y arreglo todas sus cosas para ir a trabajar, siempre al llegar al Colegio sabía que Daniela era la primera en entrar y le gustaba saludarla, dió un vistazo a su reloj de mano y era la hora en la que siempre llegaba Daniela, acomodó sus cosas en el estante pegado a la ventana, que da vista al pasillo del colegio, justo donde pasaba Daniela, espero a que llegara para saludarla como de costumbre y Daniela pasó, pero a paso veloz y sin siquiera voltear a ver hacia donde estaba ella. Victoria se dirigió hacia la mesa central y tomó de sobre ella su cartera, sacó de ella las llaves de su automóvil y se dirigió a la salida para abrir su automóvil y sacar de él las tareas ya calificadas del día anterior, regreso a sala de maestros y ordenó un poco lo que llevaría al salón.
Daniela calmo sus pasos luego de pasar por el pasillo frente a sala de maestros, subió a su salón y tomó el asiento de siempre, sacó sus audífonos y comenzó a leer un libro en su celular. A lo lejos pudo divisar a Victoria, a quien apenas podía con todo lo que llevaba en sus manos, Daniela quiso ayudar, pero estaba tan molesta que ignoró que Victoria podría necesitar ayuda, pausó la música, dejo de leer pero aún mantenía la pantalla del celular encendida para simular que estaba leyendo; Victoria entró al salón:
- Buenos días, Dani.
- Buenos días. -respondió Daniela mirando con demasiada atención la pantalla de su celular.
Victoria colocó sus cosas sobre el escritorio. Daniela sacó de su mochila el folder, guardo su celular en una de las bolsas de su falda y se dirigió hacia el escritorio. Victoria al verla acercarse le sonrió y recibió el folder con su tarea. Daniela no podía resistirse a esa mirada y a esa sonrisa, correspondió las miradas y la sonrisa:
- Ya sé que tienes diez, pero revisemoslo de todos modos.
Daniela rió por lo que dijo Victoria.
Victoria calificó su tarea, la colocó en medio de los folders que tenía organizados y en su lista anotó la calificación:
- Gracias. -dijo Daniela mientras veía como Victoria anotaba la calificación de su tarea en la lista.
Victoria le sonrió y continuó ordenando sus cosas, Daniela regresó a su lugar y ambas esperaron a que llegaran todos al salón.
Durante la clase Daniela se dió cuenta que intentar tratar mal o ser indiferente a Victoria solo por estar celosa era completamente estúpido, su concepto de amor era tan transparente y sincero que no había lugar para hacerle mal a las personas que quería.
Al final de la clase Victoria se despidió de Daniela y salió del salón.
Al llegar la hora del receso Daniela comía sola, Verónica se la pasaba con Ana todo el tiempo, Victoria siempre iba a hacerle compañía a Daniela aunque a veces solo conversarán por unos cuantos minutos y el resto del tiempo se la pasaran calladas, y es que sentían amor la una por la otra pero demostrarlo no era lo que creían correcto. Victoria y Daniela no solo compartían ese sentimiento intrusivo de estar haciendo algo mal, también nunca antes habían experimentado enamorarse de una mujer.
