04/Octubre/2022
Con pereza fregaba el piso de los vestidores masculinos, aquel día en particular había demasiado silencio en la zona y eso en realidad le parecía agradable. Por un par de puntos extra el castaño de ojos azules había decidido ayudar con la limpieza de algunas áreas de la escuela, prefería eso a los talleres extracurriculares, no deseaba ver a sus compañeros más de lo debido.
Mientras observaba las hebras del trapeador arrastrándose por el sucio piso del lugar unos pasos comenzaron a sonar cercanos, giró su rostro de inmediato para ver la cínica sonrisa de Jason, uno de los estudiantes de administración, mejor conocido por ser un idiota que juega fútbol americano, solía siempre propasarse con todo el mundo.
Louis apretó el mango del trapeador y continuó con sus deberes intentando ignorar al chico caminando hacia él en un lugar tan solo como ese.
— Oye, te estoy hablando — Habló de mala gana el chico, Louis continuó ignorándolo. — Por favor ¿te harás del rogar?
El jugador de americano le arrebató el trapeador mirándolo de pies a cabeza, Louis comenzó a retroceder por inercia, ya parecía haber estado en situaciones así antes.
— Le dije a mis amigos que seguramente la chupabas de puta madre — Susurró con una sonrisa cínica.
Louis negó rápidamente ante aquello y el chico frunció el ceño por su acción, sujetó su quijada con fuerza antes de que el más bajo pudiese hacer algo.
— Vas a hacer lo que yo te diga, estupido ¿me oyes? — Habló amenazante.
Con un empujón lo lanzó al suelo, el fuerte dolor por el golpe en su cabeza sedó sus sentidos por unos instantes logrando que Jason hiciera su cometido.
Entre llanto silencioso y algunos quejidos el más bajo se quedó recostado en el suelo, con los pantalones en sus tobillos y las piernas temblorosas, mientras el monstruo con cabello negro abrochaba nuevamente su cinturón.
— Estuviste muy apretado, quizá la próxima vez te portes mejor — Dijo burlesco mientras pateaba sus costillas.
Y así con la risa burlona retumbando en los oídos del castaño, el jugador se marchó nuevamente, como si no hubiese cometido un atroz acto hacia apenas unos minutos.
Los ojos azules y llorosos miraron sus propias manos temblorosas, cansadas de situaciones cómo esta, confundido por no comprender ¿Por qué a él? volvió puño su mano mientras su expresión se volvía fría.
Prometiéndose a sí mismo que Jason jamás volvería a lastimarlo, ni a él ni a nadie más, suspiró más tranquilo al tener ahora una motivación para seguir de pie.
***
10/octubre/2022
Escondido en la oscuridad de la noche y observando como un gato entre los árboles, estaba esperando que Jason saliera de la fiesta donde se encontraba.
La música alta ya había enloquecido sus sentidos y el olor a marihuana lo tenía mareado, detestaba sin duda a la mayoría de los universitarios con los que compartía, teniendo tan exquisitas vidas a pesar de no esforzarse para ello, nadie de esos idiotas parecía haber sufrido lo que él.
Dejó sus pensamientos de lado cuando escuchó la voz de Jason, prestó más atención hacia la casa y lo observó salir junto a dos chicos mas, el jugador de americano se despidió y caminó hasta su auto.
Louis se adentró más a la oscuridad encaminándose a la carretera a un tramo donde no podían verlo, espero pacientemente por el auto de Jason hasta que este le iluminó el rostro con las luces delanteras.
El castaño hizo una ligera mueca intentando cubrir sus ojos cuando el auto se detuvo frente a él, Jason bajo la ventana y asomó su cabeza.
— ¿Tomlinson? ¿Que jodida cosa haces ahí? — Arqueó una ceja.
— Salí de la fiesta para tomar un poco de aire, voy drogadisimo — Rio como si estuviese desinteresado.
Jason sonrió sabiendo la oportunidad que se le presentaba, miró hacia atrás esperando que nadie pudiera verlo y bajó del auto tomando a Louis por la cintura, entre empujones y arrimando demasiado su entrepierna a él lo metió al auto.
— ¿Quieres más no es así? ¿No te fue suficiente, putita? — Mordió su labio mirando el estado en el que Louis parecía estar.
Cerró la puerta del copiloto y rodeó el auto subiendo al volante, durante el trayecto el castaño tuvo que aguantar los toqueteos del chico.
— El bosque suena un buen lugar para coger — Dijo el más bajo observando la mano de Jason en su muslo.
— ¿Lo ves? Es mejor si cooperas — Sonrió cínico.
Desvió su ruta hasta adentrarse al bosque que rodeaba una zona de la ciudad, detuvo el auto a la mitad de este y entonces miró al castaño quien sonreía bobamente.
— ¿Que porquería te metiste? — Arqueó una ceja con diversión.
El castaño mordió su labio y sacó de su bolsillo una pequeña bolsa con un polvo blanco, Jason soltó una carcajada arrebatándole la bolsa e inhalándolo por si solo, el castaño arqueó una ceja observándolo.
— Vamos, te cogere sobre el cofre — Abrió la puerta del auto.
Jason bajó del auto esnifando por el incómodo polvo que acaba de absorber, Louis abrió la puerta despacio y caminó con lentitud hasta el frente del auto junto al jugador.
Los ojos de Jason comenzaban a cerrarse involuntariamente haciéndolo gruñirse así mismo, se dió un par de bofetadas pero nada parecía hacerlo reaccionar.
Louis apretó el cable en su mano y en un movimiento rápido rodeó su cuello con este, con la fuerza de sus tristes recuerdos y su tormentoso pasado logró hacer que el chico cayera al suelo disfrutando ver como sus ojos asustados se apagaban poco a poco.
— Estuviste muy apretado, quizá la próxima vez te portes mejor — Repitió a Jason las palabras que él mismo le había dicho días antes, pero Jason ya no lo escuchaba.
Observó su cuerpo tenso en el suelo y suspiró cerrando sus ojos por algunos minutos, de su bolsillo sacó una pequeña navaja y bajó los pantalones de Jason.
Observó una última vez aquellos ojos del monstruo que lo había lastimado, al menos ya hay uno menos, pensó.
Lo arrastró todo lo que pudo hasta poder alejarlo del auto, una vez conforme con su trabajo comenzó a caminar por el bosque hasta volver a la carretera para ir a casa.
Cualquiera temería de la oscuridad de la noche pero Louis ya no le temía a nada, había experimentado los miedos más fuertes de cualquiera, un simple vacío de luz no era nada para él.
Tras bastante tiempo caminando por fin pudo llegar a su departamento, abrió con cuidado y se adentró suspirando más relajado, se sacó el abrigo que llevaba y lo colgó cerca de la puerta.
Caminó con calma hasta el lavabo y precedió a lavar sus manos y brazos quitando las manchas rojizas de estos, cuando estuvo bastante limpio caminó hasta la cocina encendiendo la tetera, luego de prepararse una taza de té caminó hasta su habitación para estudiar, a la mañana siguiente tenía un examen importante.
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Blue eyed killer
FanfictionEn 2022 en la ciudad de Londres han ocurrido una serie de asesinatos a jóvenes universitarios, la gente se pregunta que ser despiadado está cometiendo estos crímenes, mientras el Detective Harry Styles ha sido asignado al caso, Nadie tiene pistas co...