Veintiuno

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La hermosa risa de aquel dulce universitario hacía eco en sus oídos mientras lo observaba; recostado en su regazo disfrutando de una de tantas películas románticas que ya habían visto, la mano del detective se deslizaba con cuidado por sus lacios cabellos mientras la mano distraída del más bajo acariciaba el brazo de este.

Los pensamientos traicioneros del rizado no le permitían estar tranquilo aún, a pesar de creer que por fin iba a tener una vida más relajada, las palabras de Zayn continuaban en su cabeza.

Apenas días atrás se compartieron por todo internet un par de carpetas con los nombres de las recientes víctimas, cada carpeta contenía los abusos y maltratos de aquellos hombres, dando inicio con Jason.

Jason Fisher.

Edad: 22 años

Jason abusaba de su posición como jugador de fútbol americano llegando a sodomisar a 4 chicas y 3 chicos en el periodo de universidad, siendo una de aquellas chicas menor de edad. Consumía Marihuana, cocaina, extasis y metanfetaminas ocasionalmente.

Su familia creía que era un chico aplicado yendo a la universidad y socializando, su madre sigue negándose a haber tenido un monstruo como hijo. Abusador muerto no vuelve a abusar.

Carl Jepsen.

Edad: 23 años

Al igual que Jason, Carl pertenecía al equipo de fútbol americano, el grupo de chicos suele reunirse para drogarse y perder la conciencia, abusando de las chicas que tuvieran a disposición. Carl fue el culpable de drogar a su novia para poder abusarla cuantas veces pudo, ella jamás fue consciente de lo que hacía.

Era un homosexual reprimido que se desquitaba con los chicos que podían ser libres sin miedo, golpeándolos, agrediéndolos verbalmente e incluso abusando a más de alguno. Abusador muerto no vuelve a abusar.

Richard Gómez.

Edad: 22 años

Nadador profesional de la universidad, nada diferente a los antes mencionados, siendo deportistas tenían bastantes cosas en común, compartían fiestas y drogas, Richard era asquerosamente obsceno con cualquiera.

Subía trabajadoras sexuales a su auto, las abusaba y las dejaba abandonadas en la carretera a su suerte, sin dinero ni cómo regresar. Abusador muerto no vuelve a abusar.

Gregor Tomlinson.

Edad: 65 años

Conoció a su esposa cuando ella tenía 13 años y el 18, la abusó y dejó embarazada, a su esposa la obligaron a casarse con él, tuvieron una hija que a los 12 años fue abusada por el hermano ebrio de Gregor.

Gregor perdonó inmediatamente a su hermano alegando que no sabía lo que hacía porque estaba ebrio, su hija quedó embarazada y la obligaron a tener al bebé porque Dios no perdonaría jamás que lo abortara. Abusador muerto no vuelve a abusar.

Tyler Henderson.

Edad: 20 años

Se interpuso en mis planes.

El morocho suspiró frustrado cerrando la laptop con molestia, frotó su rostro intentando controlar su temperamento ante la actitud del rizado aquel día.

— Joder Zayn, es que no entiendo que sigues buscando, el hacker ya nos dijo que la información provenía del computador de Joshua, era una publicación programada — Suspiró con frustración.

— Esto no me sabe bien — Negó con su cabeza.

— A mi tampoco, saber que se quitó la vida para que no lo atrapáramos — Se encogió de hombros.

— Algo me dice que no se trata de Joshua.

— ¿Una corazonada? ¿Una corazonada te hará seguir con el caso abierto? Es estupido, Zayn ¿Eres detective o no? — Rodó los ojos.

— ¿De verdad me haces esa pregunta a mi, cabron? — Habló exaltado. — ¡He estado haciendo tu puto trabajo de mierda todos estos días!

— Eso no es cierto — Negó con su cabeza frunciendo el ceño.

— ¡Seguí más pistas yo solo, porque estabas demasiado ocupado cogiendote al mocoso ese! — Lo acusó con molestia.

— No hables de Louis — Frunció el ceño.

— ¡Ni siquiera me has dejado hacer bien lo que debería ser tu trabajo, interfieres cuando quiero hablar con él, estás arruinando el caso!

— ¿Cual caso? ¡Eres un idiota el maldito caso está cerrado! — Habló el rizado con frustración.

— ¡Joshua no tenía los putos ojos azules! — Gritó el morocho.

— Fue una equivocación de Tyler y ya está, Zayn, nuestros testigos se equivocan todo el tiempo — Rodó los ojos.

— Estas jodidamente loco, ese mocoso te tiene mal de la cabeza — Dijo con fastidio.

— Solo no estoy volviéndome loco con todo esto — Gruñó con frustración.

— Louis no me parece confiable, Harry, entiéndelo — Cubrió su rostro. — ¡Además estoy harto de hacer tu puto trabajo y que sigas llevándote todo el crédito por tu estupido apellido de mierda!

— ¿Eso es todo? ¿Estás celoso? — Sonrió con incredulidad.

Zayn enfureció aún más tras aquella acusación, lanzó el primer golpe al rizado haciéndolo tambalear, el más alto endureció su semblante lanzando el próximo golpe.

Se había creado una pequeña pelea entre empujones y maldiciones, mientras el forense entraba al área de escritorios en busca de Zayn para ir a casa, ya era bastante tarde y no había muchos agentes trabajando, observó la escena con sorpresa y corrió hasta ambos amigos empujando a Zayn para que se alejara del rizado.

— ¡Basta! ¿Que creen que es esto? ¿La salida del colegio? — Habló Liam con molestia.

— El comenzó — Harry señaló a su compañero.

— ¡Los pueden suspender por esto, par de idiotas!

Zayn escupió la sangre que se había acumulado en su boca y soltó un suspiro de pesadez, tomó su chaqueta y luego la mano de Liam.

— Cuando ese chico te rompa el corazón, no habrá quien esté para ti, Harry, no pienso volver a trabajar contigo — Sentenció.

El rizado se quedó en silencio solo observando con enfado como ambos chicos se marchaban, sintiéndose impotente ¿que acababa de pasar?

***

Y ahora, observando la felicidad de su chico de ojos azules, su pecho brincaba de felicidad, enamorado de esa alma bondadosa, jamás se había sentido tan completo antes.

Las mañanas se llenaban de luz brillante con los buenos días de Louis, el departamento tenía más color desde su llegada, con melodía proviniendo de la cocina casi siempre, con postres dulces que resultaban un tanto quemados, así los amaba.

Con la noche más cálida envuelto en los brazos del universitario, quien se dejaba llenar de besos en la cama, quien lo amaba y estaba orgulloso de él, quien escuchaba con interés todas las platicas policiacas que tenía para contar, quien disfrutaba de las comedias románticas a su lado.

Así que al descubrir lo enamorado que se encontraba de Louis, pensar en si era o no el asesino no importaba, porque seguramente si lo fuese entonces Harry lo dejaría pasar.

Pero no lo era, dijo a su conciencia para calmarse a sí mismo.

Blue eyed killerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora