Velnte

1.4K 302 42
                                    

Los aplausos ya aturdían sus oídos, la gente a su alrededor no podía descifrar sus expresiones en ese momento, mientras que recapitulaba lo que había sucedido hasta llegar a este punto.

Dos semanas más tarde de encontrar los cuerpos en el asilo, se encontraban en una ceremonia en su honor, para agradecer al Detective Malik y a él por haber descubierto al Blue Eyed Killer.

Pero Harry sabía que no era cierto, que era una tremenda mentira, que no se esforzó ni mínimamente pues el hombre había acabado con su vida primero.

Suspiró con la mirada en un punto fijo de aquel suelo brilloso recordando lo que lo había traído hasta este punto; habían encontrado aquella nota donde el chico confesaba que era el asesino, también encontraron un cable delgado y una navaja ensangrentada en el casillero del asilo.

Zayn continuaba dudoso de toda la situación y hubo una acalorada discusión sobre aquello, una vez que el capitán les había dicho que lo mejor era dejar el caso como cerrado, el morocho estaba inconforme.

Cuando anunciaron su nombre a través del micrófono, sus pensamientos se dispersaron dejándolo avanzar con una sonrisa hasta el capitán, los aplausos a su alrededor quizá parecían excesivos.

Observó entre el público a unos preciosos ojos escondidos detrás de unas gafas, le veían con una sonrisa llena de orgullo y al parecer solo eso le importaba en aquel momento.

— Detective Styles ¿Quiere decir unas palabras? — Lo miró su jefe, Harry asintió tomando el reconocimiento.

— Bueno, solamente quiero decirles que estos días han sido difíciles para todos, buscamos hasta debajo de las rocas cualquier pista que nos ayudara a encontrar más rápido al culpable, lamentablemente las cosas no salieron tal como imaginábamos, pero ahora la ciudad puede dormir tranquila.

Los aplausos hicieron nuevamente que Harry sonriera y con un asentimiento más se apartó del micrófono tomando nuevamente su lugar, solo deseando que este circo acabara de una vez.

***

Con alivio bajó del escenario buscando entre aquel tumulto de personas moviéndose a la salida, el pequeño cuerpo de Louis se perdía fácilmente entre la gente, tras un par de minutos de búsqueda por fin lo encontró intentando no ser aplastado por la multitud queriendo marcharse del lugar, sonrió más tranquilo y caminó hasta él tomando su mano.

El castaño lo miró y sonrió con alivio llevando su manos a rodear sus hombros y en un atrevido movimiento de puntillas dejó un dulce beso en sus labios.

— Lo hiciste muy bien, estoy orgulloso —Asintió el castaño sin dejar de mirarlo.

— Gracias, gatito, vayamos a casa ya, quiero quitarme este incómodo uniforme de gala — Suspiró haciendo una ligera mueca.

— ¿No vas a despedirte de Zayn? — Ladeó su cabeza con confusión, el más alto soltó un suspiro de pesadez mientras negaba.

— Aún está enfadado, ya se le bajará — Murmuró dejando un beso en la frente del castaño.

Louis asintió apartándose algunos centímetros solo para poder tomar la mano de Harry y caminar hasta la salida, estaban tan sumergidos el uno en el otro con sonrisas y mejillas rojas que apenas notaron la presencia de un hombre alto, imponente y serio.

Harry lo observó por fin, intentando dejar a Louis tras él en un reflejo de protección mientras su padre les veía con seriedad, una mirada sin sentimientos.

— Buen día, señor — Dijo Harry con firmeza.

— ¿Crees que es un buen día, Harry? — Negó con su cabeza.

— Lo es, me dieron un reconocimiento — Su padre le interrumpió.

— ¿Debido a qué? tú no hiciste nada — Lo miró.

— Zayn y yo descubrimos quien era el asesino — Murmuró.

— El asesino tuvo que delatarse para que ustedes dos par de idiotas pudieran dar con él — Negó con su cabeza.

— Su hijo es un detective increíble — Lo defendió Louis. — Usted ni siquiera imaginaba que ese enfermero era el asesino, pero Harry ya lo sospechaba, ya lo estaba investigando así que ese chico solo se adelantó a lo inevitable, sabía que estaban por descubrirlo por eso cobardemente acabó con su vida — Dijo esta vez mostrándose más serio.

— ¿Y tú eres? — Lo miró de pies a cabeza.

— Mi novio — Murmuró el rizado apretando la mano de Louis.

Su padre soltó un suspiro quedándose en silencio tras las palabras del más bajo, asintió aún insatisfecho y tras palmear quizá demasiado fuerte el hombro de Harry se marchó.

El rizado se quedó estático por algunos segundos, cansado de los reproches de su padre, Louis se abrazó más a su brazo en un intento de reconfortarlo.

— ¿Quieres helado? ¿Qué te parece chispas de chocolate? ya podemos iniciar el maratón de comedias románticas ¿no? — Sonrió el castaño mirándolo.

— Si, si, solo nos dedicaremos a eso este día — Sonrió el rizado de vuelta.

Así mucho más tranquilos continuaron avanzando hasta la salida donde para sorpresa de nadie se encontraban los medios locales intentando hacer preguntas a los detectives.

— Detective Styles ¿Creen que vuelva a aparecer un nuevo justiciero? — Apuntó su micrófono hasta él.

— ¿Justiciero? — Harry frunció el ceño confundido.

— En las calles a ese enfermero le llaman justiciero, solo asesinaba abusadores ¿no es así?

— Bueno, según los patrones de sus víctimas si pero — Harry fue interrumpido.

— Entonces era un justiciero, la policía debería enfocarse más en casos de abuso ¿no cree? — Insistió la mujer.

— Era un criminal, no era ningún juez — Negó con su cabeza. — Existen leyes que deben respetarse por seguridad de todos, incluso de él mismo.

— ¿A qué se refiere?

— No voy a dar más detalles — Negó con su cabeza el rizado.

Intentó avanzar tomando a Louis de la mano e ignorando todas aquellas preguntas, el menor solo observaba a su alrededor siguiendo a Harry, giró su rostro sobre su hombro y observó a Zayn en la entrada, mirándolos fijamente, sus ojos azules se achicaron en una sonrisa mientras levantaba su mano para despedirse.

El morocho asintió como simple gesto de cordialidad mientras los veía caminar hasta el auto del rizado. Louis por fin prestó atención a las personas detrás de la calle.

Había un tumulto de gente con carteles intentando protestar, Louis no entendía con exactitud de qué se trataba, el rizado abrió la puerta del auto para él dejando que entrara mientras las personas comenzaban a gritar.

— ¡Ese chico hacía justicia! ¡Mi hija fue abusada múltiples veces por uno de esos cabrones! — Gritó con furia.

— ¡No dejaremos que lo dejen mal parado, Ese muchacho era un héroe!

El corazón de Louis se aceleró con fuerza en un extraño sentimiento de satisfacción, sus crímenes al parecer eran defendidos por la gente, mientras Harry rodeaba el auto intentando ignorar los gritos, una sonrisa de orgullo se formó en el rostro del castaño.

Blue eyed killerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora