Blue eyed killer

Veinticuatro

"Esta noche haré una cena para tu hermano, asiste" leyó nuevamente el mensaje de texto, suspiró pesadamente y guardo el móvil cuando escuchó su nombre.

— ¿Está todo bien, Detective? — Murmuró el chico de ojos azules.

— Si, lo estoy, lo siento ¿En que estábamos? — Aclaró su garganta.

— Bueno estamos en la habitación de la víctima, con la víctima aún en la cama, muerta — Arqueó una ceja.

— ¿Hubo testigos? — Harry tomó el informe.

— Algunos vecinos dicen haberla visto llegar acompañada anoche, aún debemos interrogarlos.

— Bien, supongo que no habrá tiempo para almorzar — Suspiró sacando nuevamente su móvil.

El chico rubio soltó un ligero suspiro observando a la chica tendida en la cama entre manchas de color rojo, se sentía un tanto nervioso al no haber trabajado con Harry antes.

El rizado salió un momento al pasillo mientras mantenía su móvil en su oreja, esperando a que Louis pudiera responder y tras algunos segundos de la bocina sonando por fin respondió.

— Hola gatito ¿Que tal va todo? — Murmuró el rizado.

— Fue un día común, ya voy de camino al departamento, pienso preparar algo de pasta — Sonrió.

— Si sobre eso, cielo, estoy en un caso, no podré ir a almorzar — Dijo apenado.

— Oh, está bien, no hay problema — Murmuró. — Lo guardaré para la cena

— Bueno, eso — Soltó un suspiro. — iremos a cenar a casa de mi padre ¿está bien?

— ¿Quieres que te acompañe?

— Te lo agradecería, pero no estás obligado — Suspiró.

— Está bien, me prepararé y hablo mentalmente porque él es tan...arrogante — Murmuró.

— Si todo se sale de control solo nos iremos, tranquilo — Lo calmó.

— De acuerdo, confió en ti — Sonrió.

— Gracias, gatito, te quiero — Sonrió más relajado.

— Yo te quiero más — Aseguró con una sonrisa de vuelta.

— Debo volver al trabajo, cielo — Murmuró relamiendo sus labios.

— Atrapa a los tipos malos, amor — Murmuró con timidez ante el apodo.

Harry sonrió ampliamente ante la última palabra y suspiró asintiendo como si Louis pudiera oírlo, nunca lo había dicho antes y eso se sentía increíble. Se obligó a colgar y volvió a la escena del crimen.

— ¿Está todo bien? — Respondió su ahora compañero.

— Si, Niall, no te preocupes, continuemos buscando pruebas — Suspiró inclinándose hacia el cuerpo.

El rubio asintió nuevamente de vuelta a su trabajo, Harry era serio pero no intimidante, lo incluía en sus teorías para que lo ayudara, pero aún así él sabía que no tenían la misma química que tenía con su antiguo compañero.

***

Observó la puerta de madera soltando un suspiro, miró a su lado para recibir una reconfortante sonrisa por parte del castaño, Harry mordió su labio inseguro de tocar.

— ¿Nos vamos? — Murmuró el detective.

— Si así lo quieres — Se encogió de hombros.

— ¿No te parece que soy un cobarde?