Matrimonio

71 4 4
                                    

La noche era tempestuosa, una fuerte tormenta caía y parecía que Anastasia tenía pesadillas ya que estaba temblando y llorando dormida.

- Anya estás soñando - dijo Dimitri tratando de calmarla - tranquila

La pobre chica aún tenía pesadillas, solo que ahora no sabía con certeza de que trataban. Ni quienes eran las personas que ella soñaba eran asesinadas en sus sueños.

Primero chicas riendo, después llantos de amargura y desesperación y por último grupos de gente muerta inerte en el suelo.

Ese era el patrón que cada vez se repetía en sus sueños. Dimtri siempre estaba ahí para salvarla.

Anya despertó y se aferró a él con miedo.

- ¿Que fue está vez? - pregunto Dimitri acariciando su cabello -

- personas sufriendo - susurro Anya temblando - lo mismo de siempre... tengo miedo

- aquí estoy - respondió Dimitri - tranquila mi amor, volvamos a dormir

Asintió con la cabeza para besarlo. Se recostaron abrazados, el castaño dibujaba con sus dedos círculos en su brazo. Pero Anya se preguntó.

-¿Que vida tan terrible tuve para que cosas así no me dejen dormir por la noche? -

Los brazos de Dimitri para ella eran el lugar más seguro del mundo, pero no podían apartar sus pensamientos.

Siempre en la incertidumbre de no recordar su pasado...

Tenía un hombre que siempre la sostenía cuando lloraba, buenos amigos y muchos sueños por cumplir. Pero un pasado que no recordaba la atormentaba varias noches...y se pregunto si alguna vez terminarían.

2 años después
Estar tras bambalinas es el sentimiento más eufórico y apasionante del mundo. A pesar de que el papel que me tocaba esa noche no era mi favorito me estaba llena de emoción.

Dimitri y nuestros amigos esperaban en el público, cuando aparecí en escena como siempre solían hacer me aplaudieron de pie. La obra estuvo hermosa.

Llegué a camerino con mis amigas y como siempre unas flores me esperaban en mi tocador ( casi siempre de Dimitri) , pero está vez era diferente el ramo era tres veces más grande y ahora ese trataba de rosas rojas.

Normalmente optaba por narcisos, rosas rosas o tulipanes.

- creo que quiere una noche romántica - sugirió Emma -

- tal vez - respondí - pero, no se no creo que sea eso

- sea para lo que sea,que suerte de tener un hombre que te regale flores - dijo Ivonne - los hombres que he conocido solo me regalan dolores de cabeza

- no te proyectes - regaño Emma - ¡Rápido ve con el!

Termine de quitarme el vestuario y me apresure a salir, pero para mí sorpresa solo estaba Vladimir. Quien me dijo que me llevaría a casa por qué me aguardaba una sorpresa.

Risueña lo seguí, tratando de imaginar de que trataba hasta que paso algo muy extraño.

Un hombre me abrazo y grite a lo que Vladimir se abalanzó sobre el. Confundida lo mire y el comenzó a sollozar.

- perdóneme por favor - pidió - no pude hacer nada no pude...

Mi cuerpo comenzó a temblar pues su voz me parecía familiar. Aunque estaba ebrio sus palabras resonaron en mi. Oficiales llegaron y me fui con Vladimir a casa, todo el camino hablo de Dimitri y como se habían hecho amigos, aunque la plática era Interesante no dejaba de pensar en ese hombre y en porque me parecía familiar...

Cuando llegamos la casa estaba adornada con rosas y con velas, en la sala Dimitri me esperaba con su sonrisa seductora.

- ¿Que haces? - pregunté riendo -

El se puso de rodillas frente a mi y saco una caja pequeña de la bolsa de su saco. Me quedé paralizada.

- mi hermosa Anya, eres lo mejor que ha llegado a mi vida y no me imagino a alguien mas de mi compañera. Ya que no lo recuerdas te lo vuelvo a preguntar ¿Te casarías conmigo?

Yo obviamente acepte y aunque fue el momento más feliz de mi vida, pero no pude evitar recordar lo que había pasado con el hombre que me pedía perdón...

La última Romanov (Por Danny Flores) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora