La última Romanov (Por Danny Flores)

Corazón

Cómo era de esperarse Anastasia no pudo ocultar su identidad por siempre le dijo a Dimitri quien era y el porque se sus asesinatos.

Para su suerte Dimitri había convivido muy de cerca con su familia ya que su padre había sido sirviente en el palacio.

Aun así no sabía mucho de su  familia, el cada vez tenía más curiosidad por su familia y su vida, Anastasia aprovechaba cuando comían para contarle.

- mi hermana Olga era un ángel, pero uno triste - explique - mi hermana Tatiana en cambio era nuestra protectora y era muy fuerte, lo raro es que eran demasiado cercanas

- los polos opuestos se atraen - comento Dimitri -

- así es, luego están mi hermana María y mi hermanito Alexei, mi hermana era una chica de romance. Su sueño era casarse y formar una familia mi hermano quería... Diseñar barcos.

Dimitri sabía que le costaba trabajo seguir hablando, tomo su mano y le sonrió.

- ahora solo tengo a mi abuela y a mi tía, son las únicas de las que tengo certeza de que sigan vivas fuera de ellas no tengo a nadie más en el mundo.

- tampoco  yo, bueno yo ni siquiera tengo tíos, pero te puedo prometer algo no volveremos a estar solos - respondió Dimitri - te lo prometo, ahora me tienes a mi

Sonreí al darme cuenta de que ahora tenía a alguien que apoyara, ya no estaría sola.

...

Las risas fueron algo que nunca faltó en mi familia desde que llegué yo me dedique a que mi familia nunca estuviera triste.

Llevábamos un mes en la casa ipatiev toda mi familia tenía el ánimo por los suelos. No había nada mejor para animar a mi familia que una de mis obras con las que solía arrancarles carcajadas. Después de convencer a María me dirijí a la habitación de mis padres para invitar a mi madre.

- majestad la invito a ver mi actuación en mi obra de hoy con su tercera hija María - anuncie haciendo una reverencia que le saco una sonrisa dándole una invitación que había hecho con una hoja de papel - llegué puntual por favor

- ahí estaré cariño - respondió mi madre -

Varias horas más tarde
Todos estaban sentados en una de las habitaciones de la casa. Con sillas que mi hermana y yo nos habíamos encargado de acomodar cómo si fuera un teatro. Mi padre en medio pues aunque ya no fuera Zar seguía siendo nuestro pilar.

Y seguía siendo como un roble al que podríamos abrazar cuando sentíamos debilidad. Aunque lo habíamos visto llorar mucho después de abdicar al trono, seguía sonriendo, seguía siendo el mismo Nicolás alegre al que todos querían.

Mi madre y Olga por otro lado parecían más débiles cada vez. Sus rostros habían adoptado madurez y a la vez más tristeza, sentía que cada problema las volvía más débiles.

Y aquí estábamos mi padre y yo intentando todo para volverlas a ver sonreír.

El amor en ese momento secreto de mi hermana estaba ahí junto con un amigo. De los pocos que nos trataban como personas aún y a los que podíamos tratar como amigos, a veces me llamaban "diablillo encantador" lo cual nos sacaba una risa.

- Nathisha tuvo una muy buena idea - comento Nicolás a Olga -

- si - respondió - siempre busca hacernos felices

Las luces de la habitación se apagaron, excepto la de la lámpara que utilizamos como reflector, bajo ella aparecio Alexei presentándonos:

- caballeros, madre y hermanas - exclamó - les presento a la actriz Anya!

Los aplausos sonaron y todos soltaron risas al mirar a Anastasia vestida de hombre. Era una obra bastante cómica, todos reían menos mi madre eso cambio hasta mi última escena.

- oh Dios mío! - exclamó María metida en su papel - dónde estará mi querido prometido?!

- aquí estoy mujer mía! - exclamó Anastasia entrando en escena con la ropa interior de su padre puesta sobre su ropa - no has hecho mi comida?!!

Las carcajadas de los presentes sonaron estruendosamente en el salón incluso la Zarina reía fascinada ante tal ocurrencia de la más pequeña de sus hijas.

Cuando la obra llegó a su fin todos se pusieron de pie y comenzaron a aplaudir mientras Anastasia y María hacían reverencias agradeciendo...
...

Paso aproximadamente una semana desde mi primer asesinato, no sentía culpa. Se que una cosa es la justicia y otra cosa es la venganza pero está era mi propia justicia.

- puedo averiguar la ubicación de tu abuela y tía si quieres reencontrarte con ella - me ofrecío Dimitri amablemente -

- gracias pero me iré con ella cuando todo esto termine - respondí - y quiero que tú vengas conmigo por favor

Me miró sorprendido mientras sonreía y sus hermosos ojos café caramelo se le iluminaban lo que aceleró a mi corazón.

- si eso quieres - dijo emocionado -

- Dimitri yo... quiero tenerte conmigo