𝐨𝐧𝐞 𝐬𝐡𝐨𝐭𝐬 ━━ 𝐭𝐨𝐤𝐲𝐨 𝐫𝐞𝐯𝐞𝐧𝐠𝐞𝐫𝐬

𝟢𝟥𝟪; shiba taiju.

━━━━━━━━ ★ ━━━━━━━━

Arrojé mi bolso en el sofá y me tiré en este, suspiré sonoramente mientras cerraba los ojos.

— ¿Quieres algo de tomar? — preguntó Mitsuya mientras se dirigía a la cocina en busca de algo para comer.

— ¿Tienes jugo? — alcé la voz para que me escuchara.

— Sí, pero es de Mana — habló de la misma manera que yo para que lo escuchara.

— No creo que se moleste si me das un poco, ella lo entenderá.. además me ama.

Takashi sólo respondió un "si tú lo dices" y me llevó un vaso con jugo de mango, le agradecí y lo tomé con calma, disfrutando del sabor que este dejaba en mi boca. Abrí los ojos y me acomodé mejor en el mullido sofá, miré directamente a Mitsuya.

— ¿Qué? — habló al sentir mi intensa mirada puesta en él.

— So — me carcajeé por el mal chiste que hice, recobré la respiración dejando de reír al notar como era la única que lo hacía, y volví a hablar ya más tranquila — dijiste que me ibas a presentar a alguien, ¿dónde está ese alguien?

Él solo se limitó a mover su mano en gesto de que esperara o me calmara, no lo sé. Lo miré nuevamente esperando a que me respondiera de una mejor manera la pregunta que le había hecho pero simplemente me ignoró; me iba a quejar cuando escuché el timbre de la casa, Mitsuya se levantó de golpe y fue con prisa hacia la puerta, ahí fue cuando empecé a escuchar voces acercándose a la sala. Se dejó ver Mitsuya con una sonrisa grande y a lado de él un chico de, podía jurar que tenía nuestra edad, estatura alta y una cicatriz.

Él chico no pareció percatarse de mi presencia hasta que carraspee y él dirigió su mirada a mi. Alcé la mano y con una sonrisa hablé.

— Qué tal.

Su rostro cambió drásticamente y la sonrisa que él tenía desapareció transformándose en un rostro serio, inclusive me pareció notar como trataba de esconderse detrás de Takashi. Me sentí mal un momento, creí que había sido muy informal en la manera de hablar así que estaba lista para pararme y dar una reverencia cuando Mitsuya sonrió divertido.

— No te preocupes _____, así se comporta Hakkai cuando está frente una chica, no fuiste grosera o algo así — parecía que había leído mi mente — él es a quien te quería presentar. _____ él es Hakkai, Hakkai ella es _____.

Nos presentó con emoción, yo solo me límite a sonreír.

Luego de unas horas conviviendo me di cuenta de que Hakkai realmente no era tímido, al menos conmigo se comportaba así pero cuando hablaba con Mitsuya se desenvolvía de una manera impresionante, tanto así que hasta me sentí mal tercio. Intenté acoplarme a la plática un par de veces y pese a que él no me respondía mal, sentía lo distante que era conmigo, aunque ni idea de porqué me quejaba si no llevábamos más de tres horas de conocernos, quizá yo tomaba confíanza demasiado rápido y eso le incomodaba.

— ¿Qué te pareció Hakkai? ¿te agradó? — me preguntó Mitsuya ya estando solos de nuevo, el peliazul se había ido hacia menos de cinco minutos.

— No lo sé, casi ni me dirigió la palabra — respondí tomando los vasos de la mesa llevándolos a la cocina —, pero supongo que si, creo que solo es cuestión de conocernos más y que haya más confianza.

— Si bueno, vas a ver qué pronto serán inseparables — alzó las cejas pícaramente a lo que yo solo le miré confundida.

No dije nada más y limpié lo que restaba, ya era de noche y debía irme cuánto más pronto fuese posible o mis padres me matarían. Aún así, sabía que Mitsuya me acompañaría, y no me equivoqué. Estábamos frente a mi casa despidiéndonos con un abrazo.