El destino está a mi favor
Nick hoy vino a mi casa para que lo acompañara a comprar un juguete para su hermanita, así que ahora estamos en la juguetería recorriendo los pasillos donde están las muñecas, mientras él miraba una muñeca con sus accesorios, yo miraba lo demás.
Me adelante al pasillo de a un lado que era donde estaban los juguetes de carritos y muñecos. Mientras lo recorría vi un carrito de los que coleccionaba y era el último.
Estuve buscándolo por varias jugueterías, en ninguna lo encontré y al fin está aquí. Hoy definitivamente sería un buen día.
Cuando estaba por tomarlo escuche un chillido a mi lado que me hizo exaltar haciéndome girar a ver quién era el que había hecho ese ruido.
Un niño de unos once años, tal vez. Me miraba como si quisiera asesinarme y con su pequeña mano señalo el carrito que yo estaba por coger.
—Yo lo vi primero.— Me dice.
—¡Ah no niño! Yo lo vi primero. —Él entrecierra los ojos tratando de intimidarme y hago lo mismo.
—¡Tú ya eres grande!— , se excusa.
—Mi edad no me impide comprar un juguete —le digo, muy digno.
—Ya eres un anciano.
¿Anciano? ¿Este pequeño demonio me ha dicho anciano?
—¡Y tú eres un bebé!
—¡Yo no soy un bebé! —Chilla el niño.
—Y yo no soy un anciano, para que sepas.
El mounstrito me saca la lengua acercándose al estante para agarrar el carrito que yo quería.
Me interpongo para que no lo pueda agarrar y empezamos una batalla por quien podía agarrar el carrito.
—¡Dámelo! —Pide, furioso.
—No —, le digo, alzando el carrito para que no lo pueda tomar.
Seguimos discutiendo, el niño seguía diciéndome que estaba mayor -anciano según él- para comprar el juguete y que por eso él tenía que llevárselo.
El pasillo estaba desolado, solo estábamos los dos y nadie podía ver nuestra pelea. Pero unos pasos apresurados y la voz de una chica nos hicieron detener.
—¡Por Dios, Luca! Pensé que te habías perdido.
La chica parecía preocupada cuando le hablo al mounstrito, la mire...
¿Estaba viendo bien? Esto no era un sueño ¿cierto?
La chica que había llegado hasta nosotros era la misma chica del festival, el dj.
Espera... ¿Le había hablado a ese pequeño demonio?
—Este viejo no me quiere dar el carrito —, se victimiza el niño.
—¿Viejo? ¡Ja! Niño tu...
—Hey, no le digas así a el chico. Discúlpate con él. — Me interrumpe ella
El mounstrito me vuelve a mirar como al principio con su mirada asesina, no puedo evitar soltar una sonrisa victoriosa cuando se acerca a mí.
—Lo siento... —dice entre dientes —anciano.
Y sale corriendo hacia una señora que estaba mirando al inicio del pasillo, pequeño mounstro.
¿Me ha dicho anciano otra vez?

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Aquel festival
Romansa[LIBRO 1 de AQUEL AMOR] Un festival. Una DJ y un baterista. Él se enamoró con tan solo mirarla. Ella no quería enamorarse. Él quería saber su nombre. Ella ya lo sabía. Dos personas totalmente distintas con un mismo escape de sus realidades. Ella...