"Tócame, déjate llevar por lo que sientes
¿Sabes lo divertido que es caer?
Solo tócame
Y haz que valga la pena ceder".
Jillian Martin, la influencer y youtuber que está en la boca de todos. Todo el país la conoce, más ahora que es amiga de la cantan...
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Capítulo 45
Jillian
Es la segunda vez que hago esto y no estoy tan nerviosa como la primera vez. No puedo decir que estoy tranquila y que no tengo miedo de decir una estupidez delante de tanta gente, por supuesto que sigo temerosa de equivocarme, pero no es igual que la primera vez. Es una suerte porque mi distracción aquel día fue Leo, que me ayudó mucho al distraerme, y hoy no está presente en este lugar.
Ni siquiera sé dónde está.
No pienses en eso ahora, Jill, me riño y sonrío una vez más.
Creo que Josh está más nervioso que yo y no entiendo el motivo. Tal vez sea porque es la primera vez que visita Nueva York o porque el teatro en el que se llevará a cabo el show es más grande que el lugar en el que estuve en Los Ángeles. No lo sé, Josh es un chico raro.
—Cinco minutos, Jill —avisa Colin desde la puerta de mi camerino, esbozando una sonrisa amigable.
Es bueno que las cosas entre nosotros no se hayan vuelto incómodas luego de que me confesara hace unos días que le gusto. No sabría cómo actuar con él si intentara hacer notar sus sentimientos delante de todo el mundo. Se le nota profesional y me agrada.
—Oh, Jill, ya te toca —farfulla Josh, haciendo evidente su estado de nerviosismo una vez más.
—¿Hay posibilidad de conseguir un té o algo que tranquilice a Josh? —pregunto a Colin—. Me va a poner más nerviosa y estoy intentando controlarme.
Colin hace una mueca.
—Un trago creo que lo ayudaría más.
—Lo que sea con tal de que deje de temblar en mi nombre.
Josh bufa desde el sofá en el que está tirado.
—Te estoy oyendo.
Lo ignoro y Colin interviene.
—Ven, Josh, vamos por un trago.
Mi amigo se levanta, refunfuñando algo inentendible. Se para a mi lado, su ceño fruncido.
—Voy porque quiero un trago, no porque esté nervioso.
—Lo que sea, ve con Colin y busca tu sitio.
—Malagradecida —murmura antes de salir con Colin riendo y negando detrás de él.
La puerta se cierra detrás de ellos y cierro los ojos, respirando profundo. Empiezo a murmurar palabras de ánimo, haciéndome sentir mejor y dándome valor. Gracias al cielo funciona y me siento mejor. Mi corazón aún está acelerado y mis manos tiemblan, pero sé que voy a hacerlo bien.
Tocan mi puerta y desde afuera me avisan que debo tomar mi lugar. Agarro la hoja en la que tengo mis anotaciones y repaso mientras camino fuera del camerino. Una vez estoy segura de que no voy a olvidar nada, me paro tras bambalinas y espero a que me den la señal. La chica encargada me hace una seña y asiento, tomando aire y botando por la boca.
