—Estoy harta.
La rubia miró con cautela y diversión a la mujer que entró de golpe a la habitación farfullando suaves insultos para posteriormente arrojarse a la enorme y suave cama que allí había. Esta, al verificar que no había nadie por allí rondando en los pasillos y después de cerrar las puertas se acercó por uno de los bordes de la cama hasta quedar cerca de ella.
—¿Sucedió algo? -preguntó la rubia, luego escuchó un murmullo- Por favor, háblame bien, ya sabes que cuando te pones así no te entiendo nada.
Tzuyu se quejó y se posicionó de lado, mirando a la rubia que tenía una sonrisa divertida.
—El concejo Shu, ¿Que otra cosa podría ponerme de mal humor? -dijo esta- Otra vez es ese viejo de Wong -pronunció el nombre del sujeto casi con asco- Lleva meses insistiendo en que debo de casarme, prácticamente esta obsesionado, se ha llevado más de la mitad de la reunión del concejo para "tratar" de convencerme de que es una excelente idea que yo contraiga matrimonio con su hijo, ¿Por qué?
—¿Con Liu? -Shuhua preguntó, Tzuyu asintió- Es un buen tipo, un caballero y guapo -dijo- Pero claramente los penes no son tu cosa más favorita en el mundo.
—No digas eso -acusó la mayor ruborizada- Si, claramente los "hombres" no son lo mío en general.
—Bueno, ya dejaré de decir eso -agregó la menor- Respecto a tu anciano rebelde lo mejor será que te deshagas de él antes de que convenza a más concejales para hacerte un juicio y que te obliguen a abdicar solo por qué te niegas a cumplir sus caprichos.
—¿Pueden hacer eso?
—Por supuesto, con el abogado correcto y con el apoyo de unos cuantos concejales corruptos pueden llevarte a juicio. Yo de ti buscaría a alguien con más poder que ellos.
Con la conversación finalizada Shuhua se retiró hasta el sofá que había en el otro lado de la habitación y sacó su teléfono. Tzuyu en cambio quedó pensativa mientras miraba el techo de la habitación.
¿Alguien más poderoso que los ancianos?
Las únicas personas que ella conocía y que podrían catalogarse cómo "poderosos" eran amigos del extranjero y que solo por ser eso, extranjeros, no podían tener ni voz ni voto en los problemas nacionales. Tzuyu contaba con buenos amigos, solo uno de ellos era un general de cuatro estrellas proveniente de una nación vecina, pero solo era eso, un amigo.
Entonces Tzuyu se volvió a preguntar: ¿En dónde podría encontrar ella ayuda?
Nadie en el país ocupaba un cargo político importante, más allá de un gobernador provincial no había nada más importante, por obvias razones no había un primer ministro o un presidente, y a excepción de los concejales no había otro puesto de mayor importancia aparte del cargo de emperatriz.
Básicamente estaba jodida.
—¿No tienes algún amigo que sea presidente?
—Mis amigas son empresarias o secretarias, creo que varias de ellas son idols en Corea, pero no lo creo -respondió Tzuyu- ¿Y Soojin?
—¿Quién es Soojin? -evadió la pregunta.
Y mientras ella sufría en silencio una voz en un idioma que ella conocía muy bien resonó fuertemente por el eco de la habitación. Trato de ignorarlo ya que no era de su interés, pero cierta mención llamó su atención.
—¿Podrías retroceder el vídeo? -esta pidió sentándose en la cama, Shuhua la miró confundida pero acató el pedido- Justo antes de que se acabe.
—¿Por qué razón?
—Solo hazlo.
Shuhua seguidamente dió replay.
“Tras cuatro largos años de espera en los cuales el mega proyecto de ingeniería sufrió varios retrasos, por fin el día de hoy se ha inaugurado el proyecto que atrajo la atención de todo el país y de todo el mundo en general ” el periodista, el cual por su tono de voz Tzuyu supo que era mujer habló con emoción en su voz “Ahora mismo nos encontramos en la principal estación de trenes en la ciudad de Ushuaia, para poder estar aquí el día de hoy la emperatriz T/n ll tomó un vuelo que duró más de veinte horas desde la capital en Washington D.C hasta aqui, el punto más austral en la provincia Argentina, todo con el único propósito de inaugurar la primera estación ferroviaria del Transamericano. El proyecto fue ideado hacía más de veinte años por la entonces emperatriz Sakura lll, madre de la actual emperatriz como una especie de segunda opción ante los aún costosos boletos de avión, por razones que aún se desconocen el proyecto no avanzó más allá del papel, pero al asumir el trono hace aproximadamente ocho años la emperatriz dió luz verde para iniciarlo, habían los suficientes fondos y el apoyo del pueblo para hacerlo, hoy en día es una realidad" luego hubo un corto silencio "Las vías ferroviarias cuentan con diecisiete mil kilómetros de distancia que conectan a la ciudad de Ushuaia con otras ciudades a lo largo de su recorrido que finaliza en la ciudad de Alaska, y que además cuentan con otras líneas sub alternas que conectan a todo el continente, atravesandolo de norte a sur y de oriente a occidente, lo que nos daría un total de veinte mil kilómetros de redes y estaciones ferroviarias. Para concluir, la emperatriz T/n ll tomará el primer tren que se detendrá en Bogotá, capital de la provincia Neogranadina y posteriormente tomará un vuelo con destino a Washington D.C para continuar con sus obligaciones reales, hasta el momento no se ha logrado obtener más información, pero seguiremos informando. Para ustedes desde Ushuaia en el Imperio Americano es Kim Jennie para BBC América"
Luego, cuando el silencio nuevamente volvió a la habitación tanto Tzuyu cómo Shuhua compartieron una mirada que decía de todo.
Si había alguien más poderoso que los ancianos y que ella misma. La única persona capaz de poner a todo el mundo bajo sus pies.
Con solo un asentimiento Shuhua supo que hacer.
Solo había que hacer una llamada.
Una que iría hasta el otro lado del mundo.
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𝐄𝐌𝐏𝐈𝐑𝐄 | ᵀᶻᵘʸᵘ ʸ ᵗᵘ
Fiksi Penggemar[ ᴇ ᴍ ɪ ᴛ ɪ ᴇ ɴ ᴅ ᴏ ] Cuando su rol como la líder y monarca del imperio es terriblemente cuestionado, la emperatriz de China, Zhou Tzuyu, buscará ayuda para conservar su corona además de obtener consuelo para su atormentada alma en la persona que me...