capítulo 22 ¡no quiero!

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Soobin.

Cuando Hueningkai salió solo pude ver que me veía con una expresión de confusión por mi presencia.

—¿Soobin? ¿Qué estás haciendo aquí? Enserio debo mejorar la seguridad de mi casa.

—huening, por favor, lo siento, perdóname.

—oye... Soobin. No puedo-

—¡no! No me iré de aquí hasta que me perdones.

Me recosté en el suelo mostrando que no me iba a mover hasta escuchar que sí me va a perdonar.

Sí, es tonto, pero es lo que pasó.

—¿qué estás haciendo? ¡oye! El suelo está helado.

—no me importa, acepta mis disculpas.

—¡Soobin! Mi auto te va a atropellar, levántate.

—no me importa. Por favor, Hueningkai perdóname.

—¡está bien! Te perdono, pero salte del camino.

Me levanté rápidamente le di un abrazo fuerte a Hueningkai por la alegría que sentía.

—gracias.

—o-oye... estás sucio.

—Es mi venganza.

—no, esto es venganza.

Hueningkai se acerca a mi oído y sopla suavemente en el haciendo que me ruborice.

—Tengo que irme, hay trabajo que hacer. Te veo más tarde si no estás ocupado.

—siempre estoy dispuesto a estar para Hueningkai ¿a qué hora debemos vernos?

—¿qué te parece a las 6? Te espero en la torre nam San ¿sí?

—sí—sonreí.

Hueningkai entró a su auto y sonriente se despidió de mi.

Mi corazón nuevamente se sentía tranquilo y saltaba dentro de mi pecho al ver su sonrisa.

*****

Hueningkai

Tenía que arreglar algunas cosas antes de ir con Soobin, pero algo me dio escalofríos.

—padre...

Mi padre había llegado de su viaje, no le dije muchas cosas y por eso le tengo miedo.

—¡Hueningkai! Ven sientate estamos almorzando.

—¿con quién más?

Me asomé más y me di con la sorpresa que Eui soo está al lado de padre.

"¿Qué hace aquí?"

—Hueningkai, hay algo que quiero hablarte seriamente.

—¿qué es?

—quiero que te comprometas con Kim Eui soo.

—¡¿qué?! ¿Te volviste loco?

—¿cómo te atreves a hablarme así?

—no me casaré con este infeliz, su familia sólo se aprovecha de nosotros... ah... seguro no te dijo que terminamos por una infidelidad suya ¿no?—me acerco a Eui soo—No me voy a casar. Recuerdo que te dejé en claro Eui soo que terminamos.

—no hay nadie más, debes casarte—dijo mi padre.

—¡voy a ser heredero! ¿Eso no te basta? Ya soy prisionero ¿quieres que lo sea de alguien más?... voy a hacer que te arrepientas de mi compromiso con él, adiós.

—dios ¡Hueningkai!

Salí del hotel, pero Eui soo me estaba siguiendo y me detuvo del brazo.

—¡sueltame!

—¿por qué no aceptas que no te puedes librar de mí?—presionaba cada vez más mi brazo.

—¡¿qué tanto quieres de mi?! ¡me fuiste infiel! Ya ganaste ¿qué no estás feliz con eso? ¡puedes estar con quien te de la gana! ¡déjame vivir mi vida....!

Estaba haciendo todo un escándalo y Eui soo para calmarme me besó de repente. Abrí mis ojos como platos por lo sorprendido que estaba, todos nos sacaban fotos y nos miraban.

Yo solo quería que paren.

—¡que bien! La pareja se arregló, serán buenos ahora que están comprometidos.

Mi padre salió de repente y dijo esas palabras, todo el mundo estaba comentando.

Molestó, empujé a Eui soo y tomé un taxi del hotel, me fui a otro lugar lejos de aquí.

Su daño aún no para.

Soobin.

Estaba a punto de salir del trabajo, cuando escucho la conversación de unos colegas.

—¡omo! Es verdad, se van a casar.

—se ven adorables, mira cómo lo besó.

—¿de quien hablan?—me asomo a ellos.

—del heredero de empresas Kim y el heredero hotelero, se van a casar.

—¡¿qué?!

No... no es posible.

—mira—me entrega su celular mostrando la noticia—su padre lo anunció y se dieron un beso ¿no es romántico?

—no... Huening-ah...

𝘚𝘶𝘣𝘢𝘴𝘵𝘢 𝘥𝘦 𝘴𝘰𝘭𝘵𝘦𝘳𝘰𝘴 •𝘚𝘖𝘖𝘒𝘈𝘐•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora