𝘚𝘶𝘣𝘢𝘴𝘵𝘢 𝘥𝘦 𝘴𝘰𝘭𝘵𝘦𝘳𝘰𝘴 •𝘚𝘖𝘖𝘒𝘈𝘐•

capítulo 23 yo... 💓

Soobin.

Salí corriendo de mi trabajo para ir a la torre Nam San donde estaría Hueningkai esperándome. Lo vi apoyado en el barandal viendo la oscura noche. Lentamente me fui acercando a él seguro de preguntarle si es cierto o no.

—¿es verdad que te vas a casar?

—yo no lo decidí...

—¿qué vas a hacer?

Él no contestaba para nada y yo ya tenía mi ira al límite.

—¡Dime de una maldita vez qué vas a hacer! ¡Hueningkai, te besó!

—¡lo sé!

Su grito me dejó sorprendido, pero por lo menos sabía que estaba consciente de la situación.

Vi cómo bajaba la cabeza y sus manos apretaban más el barandal.

—Lo odio, enserio lo odio, ¿qué más debo hacer? Mi única opción es morir. No puedo más con esto. No soy un heredero... soy un prisionero.

(...)

No quería que se sintiera mal, no quería sentirme así, no quería perderlo por no decirle cómo me siento.

—te dio un mal beso.

—¿qué?—se voltea hacia mi dirección.

—así se te tiene que besar.

Me acerqué a Hueningkai y lo besé lentamente parando su llanto, él respondió mi beso sin dudarlo.

—no voy a dejar que ese imbecil te aleje de mi lado, me gustas y no voy a perderte, Hueningkai.

Por fin lo dije.

Hueningkai.

Sentía cómo mi corazón no paraba de latir y mis ojos se llenaban de lágrimas de felicidad.

Ya no podía negar lo más y reprimir lo que sentía a tal punto de hacerle daño.

Yo también lo siento.

—Soobin-ah... también me gustas—sonreí.

—me gustas, Hueningkai.

Por tanta felicidad, decidió abrazarme y yo hice lo mismo con él.

La primera nevada caía sobre nosotros, me sentía tan feliz de tener a Soobin a mi lado.

Pero aún seguían los problemas.

—Soobin-ah...

—¿qué?

—tengo frío—reí.

—¿vamos a mi casa?

—¡oye! Estamos lejos.

—¿a dónde quieres ir entonces?

Tal vez... a un lugar donde iniciaron muchas cosas.

*****

Hueningkai no estaba con su chófer como acostumbraba hacerlo y ya era muy tarde para que Soobin tome el autobús, así que ambos tomaron un taxi en dirección a un hotel.

—¿un hotel?—dijo Soobin viendo la fachada.

—mi padre de seguro me busca en mi casa y en Moon sky.

—¿por qué mejor no vamos a mi casa con taxi? Ya lo conoces muy bien.

—Soobin-ah.

—bromeo, sigamos.