capítulo 5 cita arruinada 💔

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Soobin.

¿Por qué todo alrededor de él se volvió más brillante?

Cuando Hueningkai dijo eso sentí cómo todo se iluminaba con esa sonrisa. La noche más oscura se hizo la más brillante con ese momento y no entendía porqué.

Tal vez suele ser muy frío a veces, pero cuando hace este tipo de cosas se ve como la persona más feliz del mundo.

Las luces del autobús eran lo que iluminaba más a Hueningkai.

Ya tenía sentido el porqué.

Al escuchar que el autobús llegando, reaccionó

—oh llegó el autobus. Supongo que debes irte en el ¿no?

—ah... sí...

No me sentía yo mismo, estaba raro, la imagen permanecía en mi mente como el tatuaje en la piel de alguien.

"¿Qué pasó?"

—¿qué? ¿Hola?—Hueningkai sacude su mano en mi rostro—Tierra llamando a Choi Soobin, Choi Soobin su autobús se va a ir—sonríe.

Por fin pude despertar, al ver autobús me surgió una duda.

"¿Cómo se irá él?"

—¿tú cómo te irás?

—tengo chófer. Vete a casa.

Cierto, lo olvidé. Mi momento de lucidez no llega.

—oh... sí. Adiós para siempre, supongo.

"¿Enserio es el adiós definitivo?"

—sí, eso creo. Me agradaste mucho, es una pena. Adiós.

—adios.

No pensé que una despedida era así de cruel.

Hueningkai estaba tranquilo, pero yo no, algo en mi no me dejaba en paz.

Subí al autobús y por la ventana seguí viendo a Hueningkai y cómo me alejaba de él ¿este era el final? Apenas conozco a alguien y de alguna manera no me quiero alejar de esa persona.

"¿Este enserio es el final del subastado?"

*****

Hueningkai.

Fue la cita que más disfruté.

Llegué a casa muy feliz por la velada, es cuando la sonrisa que tenía en mi rostro desaparece con solo verlo.

"¿Qué hace aquí?"

La persona que más odio, la persona que me rompió el corazón estaba en mi sala sentado en mi sillón con una mirada seria.

Sí, no me puedo alejar de él, ya que trabajamos juntos. Que cruel ¿no? Terminar de la peor manera con alguien y encima trabajar en el mismo lugar.

—¿por qué no viniste a la reunión?—otra vez escucho su noto dominante.

—estaba ocupado—dije sin verlo—¿qué haces aquí? Prohibí tu entrada a esta casa.

—calmado, no te puedes deshaxer de mi tan fácilmente, Huening-ah.

Odiaba cuando me hablaba con tal normalidad.

—¿qué quieres?

Ya no te tolero.

Él se levantó del sofá de donde estaba y se acercó muy serio hacia mi.

—¿por qué no viniste?

—tuve cosas que hacer.

—no es verdad.

Eui soo; sorpresivamente, me toma del rostro apretándolo. Yo simplemente me quejaba un poco, pero no dejaba de mirarlo para demostrarle que no me asustaba.

Su mirada malvada volvía.

—Te conozco, no tienes nada más que hacer en tu miserable vida.

Hijo de...

—¡sueltame!—intenté que me soltara sacudiendo mi rostro, pero el me tomó del brazo para detenerme.

Quiero que pare.

—¿qué? ¿Ahora vas a decirme que no fuiste a una subasta de solteros?

—¿quién te lo... ?

Nadie sabe sobre la subasta y dudo mucho que Ji on lo haya dicho porque ella odia a este tipo con todo su corazón por miles de razones, no solo porque me traicionó. Así que, no se me viene a la mente nada.

A menos que, yo sí dejé de prestarle atención, pero él no a mi.

—huening huening huening, cuando se trata de ti nada se me escapa ¿Cómo se llama a quien viste?

No sé cómo sabe eso, pero quiero que se largue de aquí.

Escuetamente me solté y lo empujo alejándolo de mi.

—vete... ¡vete!

—no me iré hasta que me lo digas.

—entonces yo me iré.

—claro que no.

Estaba yéndome cuando Eui soo toma mi brazo y me empuja al sillón para ponerse encima de mi.

—¡sueltame!

—dime con quien estabas.

—¡vete de aquí, imbécil!

Para callar mis gritos comenzó a besar mis labios ferozmente, no me dejé, rápidamente mordí su labio para que se alejara de mi y golpeé su rostro.

—¡ah! ¡tú...!

—¡largo! Vete ¿Qué te importa a ti con quien salgo? ¡ya no somos nada!

—¡tú me perteneces!—me toma de los hombros.

Su mirada de lunático solo le enfadaba y me solté de él.

—no te pertenezco ¡¿oíste?! Vete de aquí antes de que mande a los de seguridad y te golpeen ¡vete!

—no te vas a librar tan fácilmente de mi, querido. Tus labios aún disfrutan que los bese.

Después de decir eso se fue, felizmente, pensé que esto nunca acabaría.

Solo me senté en el sillón muy atónito por lo que había sucedido, mis manos despeinaban mi cabello y no entendía cómo pasó todo.

Es tan frustrante. Solo quiero que termine.

No lloro por él, sino porque no se aleja lo que le hizo daño.

𝘚𝘶𝘣𝘢𝘴𝘵𝘢 𝘥𝘦 𝘴𝘰𝘭𝘵𝘦𝘳𝘰𝘴 •𝘚𝘖𝘖𝘒𝘈𝘐•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora