.-Capítulo 71

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•[Despedida]•

«¿Cambiar o mejorar?»

••••••••

2 años después:

Un edifico se desplomaba, las columnas de la base se torcieron y el edifico de 8 pisos caía de lado, provocando que al momento de su caída el piso temblara y un fuerte aire azotara el rostro de 17, mientras lo veía desplomarse.

El edificio cayó y consigo, mató a las personas que se refugiaban en ese lugar.

—Aún no entienden que los edificios no son buenos refugios...— comentó 18, rascándose la cabeza y soltando una pequeña risa.

—Si— respondió 17, observando el panorama.

Horas después de estar con su hermana, 18 tomó su rumbo y 17 partió nuevamente, a la cabaña del bosque.

Limpió sus pies antes de entrar, abrió la puerta con suavidad y la cerró tras de sí.

Se quedó un momento observando su antiguo hogar, ya no tenía esa luz reluciente que acostumbraba a ver, ahora era solo una cabaña de viejos recuerdos.

Caminó hasta el escritorio de (Tn) y vio los cuadros de fotografías que había en el, tantos recuerdos y buenos momentos que ahora se quedaron en un simple cuadro de cristal.

Se sentó en la silla giratoria y observó los libros, sus cuadernos y escrituras. Sacudió un poco el polvo: la laptop de (Tn).

Abrió la laptop y al presionar el botón de encendido por varias veces y no poder prenderla, la dio por muerta.

Era la batería.

Conectó la laptop y abrió la carpeta de fotos y videos.

Comenzó a ver uno por uno, fotos de ella joven, Lupy pequeño, más aventuras de ellos, algunas fotos del ex novio de (Tn), videos donde aún podía escuchar nuevamente la voz de ella.

—Tu voz...— 17 sonrió con melancolía. Pudo escuchar nuevamente la voz de su esposa.

Esa hermosa voz...

Siguió revisando más videos, escuchó sus chistes, sus risas y sus conversaciones. De alguna forma pudo tenerla cerca otra vez.

Pasó a otro video y se quedó concentrado en lo que veía, era (Tn) jugando con Lupy, se escuchaba otra voz varonil, he de suponer que era del tal Patrick, pero no le tomó importancia.

Sus ojos estaban plantados en ella, en cómo se reía, se divertía, como su cabello se movía y los mimos que le daba a un pequeño Lupy.

—Tu risa...— la pequeña presión de dolor en su corazón ya se había hecho costumbre en él, lo que era el sufrimiento y sentimentalismo.

Hizo click para pasar a otro video, pero la laptop le señalaba el fin de la carpeta de recuerdos. El androide suspiró y optó por apagar la máquina.

Se puso de pie y comenzó a recorrer la casa, divagando como un alma en pena cada lugar: el comedor, la sala de estar, la habitación, la cocina e incluso el baño.

•Amor en crisis•(#17 del futuro y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora