CIARA
El dolor de cabeza es insoportable, la imagen que refleja mi espejo no me reconforta en nada. No sé qué me hizo esa maldita pero lo hizo con toda la intención de acabar conmigo
Mi labio está roto con dos puntos que sujetan la abertura. Mis mejillas están cubiertas de moretones al igual que mis ojos.
—No deberías estar de pie. —dice la voz masculina que invade el dormitorio. —Regresa a la cama.
Me toma unos minutos ver su imagen a través del espejo. Está de pie observando toda mi imagen.
—¿Quién eres?
—El médico del gran jefe. —me toma el brazo con delicadeza y sus ojos cafés verdosos no dejan de buscar los míos a través del reflejo en el espejo. —Obedece.
No tengo fuerza para rehusar así que dejo que me lleve de vuelta a la cama y me acomode en esta.
—¿Qué haces aquí?
—El gran señor se preocupa por su gente. Estarás bien.
Comenta tranquilo mientras revisa mis heridas y mis pulsaciones.
—¿Y los demás peleadores?
—Bien. Todos bien y muy interesados por tu recuperación. Es curioso lo mucho que se preocupan por una desconocida.
Asiento.
¿Cuál es el plan?
—En la tarde te llevaré a mi consultorio. Allí recogeremos medicina que te ayudará.
Le doy una mirada fija y asiento.
No se que hace aquí, no se porque carajos lo envío Cassian. Esta misión es nuestra, de mi División Roja, no comprendo porque este Halcón Azul está aquí.
Serkan Mazharok, cómo olvidarlo si es uno de los más impecables hombres de la FES. Jamás en tantos años de carro se ha escuchado que rompa una regla salvo por la anotación en su expediente hace un par de años.
El y Cassian crecieron juntos, siempre llevando una relación de competencia y amistad. En la FES ambos luchaban por sobresalir pero una vez terminaba su turno volvían a ser los amigos de siempre.
Varias veces intente llamar su atención pero nunca me miró, tal parece que no soy su tipo de mujer ya que por más que yo intentaba hablar y conocerlo el únicamente se acercaba amablemente cuando tenía alguna duda o necesitaba ayuda con algún tema laboral.
Yo era como eso mal necesario, es decir, cuando tenía dudas yo le servía para ayudar y más pero fuera de eso era más que un cero a la izquierda.
—¿Cuánto tiempo dormí? —pregunto finalmente.
Me observa en silencio unos minutos para finalmente responder:
—Diez días.
—Es hoy —afirmó.
—Afirmativo.
—Tengo algo que le dará adrenalina a tu cuerpo para la gran celebración.
El—Comprendo.
Deja un par de pastillas medicinales sobre la mesa acompañadas de un vaso con jugo de naranja y sale. Luego de tomarme la medicina siento que la fuerza regresa a mi, como no. Si la FES maneja medicina creada por la mismísima Katharina Zakharova.
Una ducha es la mejor vitamina. Tomo una sudadera y salgo de la habitación, las piernas aún me tiemblan pero nada que no pueda controlar. Mi ánimo mejora cuando me cruzo en el pasillo con Aleksander quién me observa de arriba a abajo con frialdad.
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Dérive
Roman d'amourHe pasado mi vida entera dedicada a una sola cosa: la FES (Fuerzas Especiales Secretas) congraciandome como la mejor Halcón de mi central y llevando en alto mi uniforme con más medallas que cualquier otra mujer en la historia. Siempre me he caracter...