Prefacio

18.9K 1.1K 77
                                    

•☠️•

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

•☠️•
.

.

.

El día que mi mundo se vino abajo fue el día que me enteré que estaba embarazada... Y solo dejé de sentirlo así cuando me encontré tirada en el suelo, viendo mi pequeña casa totalmente destruida y en llamas.

Solo ahí supe que no me quedaba nada más.

No tuve esperanzas, ni siquiera cuando el llanto de mi hijo me perforó los oídos. Yo sabía que estaba entre los escombros, sabía que debía levantarme y buscarlo pero era inútil; mi cuerpo no respondía, mi mente se encontraba ida y una de mis piernas estaba sepultada por los escombros.

—¡Mamá!

El sonido de las llamas ardiendo me absorbían y por un momento creí que estaba en el infierno pagando por no poder salvar a mi pequeño.

Mi dolor se volvió insoportable y fue en ese momento de desesperación qué comencé a rezar. Recé a un Dios en el que había dejado de creer hace mucho. Le rogué un ángel que salvara a lo único que me quedaba: mi hijo.

Los minutos se sintieron eternos y mi cuerpo ya me estaba enviando a la inconsciencia, pues no importaba cuanto lo intentara, no podía moverme, no podía gritar.

Y lloré... Lloré con el mayor dolor del mundo porque ya no escuchaba a Maikol y mi mente había empezado a imaginar lo peor.

Hasta que él apareció...

Tan silencioso como un fantasma, tan alto que me costó observarlo y con aquella extraña máscara de hueso, esa que me hizo pensar que era la muerte viniendo a por mi.

Aunque estaba muy equivocada, porque en realidad, él era el ángel que había pedido.

En sus brazos cargaba a mi niño y supe que todo estaría bien.

Me dejé ir, dejé que por una vez alguien tomara el control.

.

Entre balas [Ghost x Tu] (#1) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora