Capítulo 18

4.9K 576 175
                                    

•☠️•

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

•☠️•


Nueve meses antes del nacimiento de Maikol Valerys.

_______

Una de las cosas que más disfruto de las vacaciones es el poder ir de fiesta y ponerme cortos vestidos que me hagan sentir poderosa. La mayoría de ocasiones suelo venir con Jhonny y al final de cada noche terminamos teniendo una buena noche y hablando de que tal estuvo la fiesta. En esta ocasión, mi querido novio me comentó que llegaría más tarde de lo habitual pero eso no es un impedimento para que yo disfrute esta noche.

Junto con unas compañeras me encuentro bailando en la pista. La buena música hace que me sienta con energía y los tragos que tengo encima hacen que no sienta vergüenza alguna de como estoy bailando. Todas reímos con diversión y euforia mientras bailamos y saltamos en la inmensa pista que solo es iluminada por unas luces rojas y azules.

—¡Hay un guapetón mirándote a las doce! —una de mis amigas me habla al oído para poder escucharla y yo solo río.

—¡A (T/n)______ la buscan puros rubios, a ver si varias un poco! —otra de ellas grita para que podamos escucharla y el coro de risas no se hace esperar.

—¡Tengo novio, no se les olvide! —grito para recordarles ese pequeño pero importante detalle y ellas solo bufan o me giran los ojos con fastidio.

—¡No puedo creer como es que sigues con ese imbécil, te recuerdo que se acostó con Isabella! —todas empiezan a estar de acuerdo con el comentario y yo me remuevo incómoda.

Tal vez fue muy estúpido de mi parte perdonarle la infidelidad a Jhonny pero el amor que siento por él es muy grande y creo en sus disculpas.

—¡Vamos (T/n)______, por una vez que pruebes otro hombre no te va a pasar nada! —todas gritan con emoción pero yo ya estoy aburrida de esta charla.

Les hago una seña de que iré a la barra a descansar un poco y a beber algo. Ellas asienten y yo me encamino hacía allí con un poco de dificultad pues el alcohol ya está haciendo lo suyo.

Cuando llego a la barra, tomo asiento y le pido algo fuerte al bartender. Escucho como alguien a mi lado pide lo mismo pero no le prestó mucha atención pues sigo pensando en lo que mis amigas dijeron. Tal vez tengan razón y deba probar otro hombre. Si hago lo mismo no sería tan malo, pues lo que es igual no es trampa.

Cuando me ponen el trago al frente ni siquiera me detengo a revisarlo, simplemente me lo tomo con rapidez y estampo el vaso contra la barra. Una risa boba se escapa de mi al recordar como encontré a mi novio cogiendose a otra y cuando voy a levantarme un horrible mareo me azota y debo sujetarme de lo que tengo al lado, lo cual es el cuerpo grande y ancho de un hombre.

Mi cabeza da vueltas y mis ojos ya no logran enfocar nada. Intento ver al tipo a los ojos y disculparme pero simplemente no puedo enfocar su rostro. Pese a lo aturdida que estoy, siento como toma uno de mis brazos y me ayuda a estabilizarme. Yo río por la extraña sensación y él también parece hacerlo pues siento su pecho vibrar.

—Creo que nos han drogado. —su voz se escucha rasposa, dándome a entender que también está borracho y sea lo que sea que nos pusieron en la bebida le está afectando.

—No me sorprende. —suelto con torpeza y cuando quiero soltarme de su agarre, otro mareo me inunda y debo sujetarme ahora con mi otra mano.

—Deberíamos ir a un lugar con menos ruido. —él me habla ahora al oído, un delicioso escalofrío me recorre la espalda y soy consciente de su invitación.

Lo pienso por un momento, pienso en si es lo correcto teniendo novio. Intento volver a enfocarlo pero es imposible, no se ve feo y el cuerpo que acabo de sentir esta duro y definido por lo que decido dejar de pensar tanto y simplemente asiento con la cabeza.

Él nos guía entre tanta gente, o eso creo. Estoy bastante ida como para darme cuenta. Soy consciente de que después de caminar un rato la música ya no se escucha y estamos en una extraña habitación. Él le pasa seguro a la puerta y me acorrala contra la pared, después siento sus cálidos labios sobre los míos.

El beso es urgente y necesitado, yo gimo al darme cuenta de lo increíble que besa y hago todo lo posible para seguirle el ritmo. Él toma mi cintura y me carga como si yo no pesara nada; me recuesta a la pared de nuevo y yo enrollo mis piernas alrededor de su esculpido torso. Nos seguimos besando con demasiada intensidad y no puedo creer que con tan solo unos besos ya estoy al borde. Escucho como tocan la puerta pero nosotros lo ignoramos abiertamente, sé que esto va a ser rápido por lo que decido bajarme de su cuerpo y levantarme el vestido.

—Joder. —gruñe él.

[...]

El dolor de cabeza que siento es punzante y me hace soltar un quejido. Abro los ojos con lentitud y una conocida lámpara es lo primero que ven mis ojos. Con cuidado empiezo a levantarme y soy consciente de que me encuentro en una cama. Miro a mi alrededor y la habitación se vuelve conocida para mí.

Estoy en la habitación de Jhonny.

Me froto los ojos y hago todo lo posible para poder intentar recordar que sucedió antes de llegar aquí.

Las imágenes borrosas de aquel hombre empiezan a abordar mi mente y debo cruzar las piernas cuando el recuerdo de como me complacía sin cuidado alguno llega a mi cerebro. No es justo que ese hombre desconocido me dió el mayor placer de mi vida y yo solo tengo vagos recuerdos, que agonía.

Salgo de mi trance cuando algo a mi derecha se mueve y puedo ver el blanco y marcado cuerpo de mi novio siendo arropado por las sábanas.

Se encuentra dormido y teniendo en cuenta que ambos estamos desnudos puedo asegurar que hicimos bastante anoche. Vuelvo a recostarme en la cama y empiezo a recordar que pasó después.

Según mis recuerdos borrosos, después de haber acabado con el desconocido, ambos nos acomodamos las ropas y salimos de la extraña habitación. Mi vista seguía borrosa pero ni siquiera me moleste en darle una segunda mirada pues por algún motivo el cargo de consciencia ya estaba golpeandome y no tenía las agallas para si quiera dirigirle la palabra. Después de eso simplemente me dedique a buscar a mis amigas y un rato después llegó Jhonny.

Yo ya estaba agotada y el efecto de la droga ya se estaba pasando. Cuando fue hora de irnos a casa no pude encontrar al desconocido con la mirada, aunque sabía que no servía de nada buscarlo porque no había podido ni siquiera enfocar su rostro.

Luego, Jhonny y yo simplemente nos divertimos un poco más antes de caer dormidos. Y ahora que lo pienso, estoy segura de que no usamos protección por lo aturdidos que estábamos. En ese momento no sabía cómo sentirme al respecto, me sentía mal por haberle hecho eso a Jhonny pero al mismo tiempo no podía dejar de pensar en lo bien que se sintió. Supuse que podía olvidarlo y hacer como si nada hubiera pasado.

Lastima que unas semanas después, descubrí que estaba embarazada.

Y no sabía de quién era.

.

Entre balas [Ghost x Tu] (#1) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora