(ONE SHOTS) scaloneta y vos. +18

Por los aires. (Dibu Martinez +18)

AVISO. Esta de mas recordar que todo es ficticio y que no se busca para nada perjudicar a los personajes y sus respectivas familias. También prohibido copiar y si buscan adaptar me avisan etc etc. Sin mas preámbulo, aquí les dejo para que fantaseen tranquilxs.

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Después de haber trabajado tanto durante el año, era el momento de unas hermosas y fabulosas vacaciones. Sirvió eso de ser mi propia jefa, al fin pude volar a mi lugar soñado. 

Estaba esperando el vuelo cuando un chico me toca el hombro y me pregunta algo referido a su pasaje. 

Tuve que mirar arriba por lo alto que era. Un tipo hermoso de casi 2 metros me estaba hablando y casi que se va hasta que reacciono.

-Si, es esta fila. Yo estoy para ese vuelo- le indico

-Genial entonces, así no se hace tan larga la espera- contesto

-Me llamo _____(tu nombre) _______(tu apellido) vos? -Intento sacarle conversación, total anda a saber cuando nos volvemos a ver.

-Soy Emiliano Martínez, un gusto. 

Nos dimos la mano y conversamos de cosas triviales hasta que la larga fila comenzó a avanzar. Nos subimos al avión y sorpresa, teníamos los asientos juntos.  Nos acomodamos para el largo viaje que nos esperaba. Cada uno con sus cosas. Sacó un libro y se puso a leer.

<Uf, encima intelectual el loco> pensé, que cosa hermosa.

Paso un rato y en un momento se le cayó el celular, como era tan grandote se le dificulto moverse debido al cinturón y en un amague de agacharse a levantarlo me toco la pierna. Me estremecí como quinceañera y parece que se dio cuenta. 

<Este viaje no va terminar mas>

Medio que se hizo el boludo y me empezó a charlar de nuevo. Me conto que era futbolista y que tenia unos días libres, soltero, sin hijos, que le gustaba viajar mucho y que casi siempre viajaba solo o con sus amigos. Jugaba en Inglaterra pero volvía de vez en cuando para Argentina a ver a su familia. Ahora le tocaba descansar un poco para aclararse las ideas. Yo también le comentaba lo que hacia. Que soy contadora, también sola sin hijos y que vivía sola hace ya un tiempo dejando la casa de mis padres. Hablamos de familia y trabajo un buen rato hasta que me dio un poco de sueño. Me quedo gustando este chico. Fachero, lindo, trabajador y encima de casi dos metros.

Me dormí una hora y cuando me desperté seguíamos volando.  Mire a Emi a mi costado y el también se había dormido. Estaba tan lindo, los ojitos cerrados y tan tranquilo. Dormía con una paz. No me moví mucho para no despertarlo y lo tape un poco con la campera que tenia al lado. Me puse los auriculares sin moverme mucho y me puse a ver una peli que había descargado en el celu. 

No podía dejar de pensar en el desconocido que tenia al lado. 

Pasó un buen rato. Se despertó, comimos lo que nos dieron en el avión y volvimos a hablar de nuevo. Me encantaba la experiencia de charlar con descocidos ya que podías hablar de todo un poco, indagar y contestar, conocer a alguien nuevo. 

Llegaba la hora de aterrizar. No me gustaba la idea de separarme de Emi. Parece absurdo porque era un completo desconocido pero había algo en el que me encantaba, físicamente y también por dentro y eso que todavía me faltaba conocerlo mas a fondo.

-Eu ¿ya estamos llegando? -me pregunto el grandote mientras se estiraba 

-Sip, en breves parece que bajamos.