masaje para dos. (one shot) lionel scaloni &pablo aimar. +21

14.8K 289 280
                                    


Por fiiiiin me quedaba el ultimo turno de la tarde. Eran las 19:30 y esperaba que llegue Lionel, mi paciente de todas las semanas que había pedido el ultimo turno con su amigo y compañero de cancha, Pablo Aimar. Me dijo que no quería nada especial, lo que hacíamos generalmente.

Ser masajista en tiempos de Copa America me iban a sacar de pobre. Trabajaba particular y en el predio de la AFA para cuando los jugadores necesitaban sacarse en encima unos cuantos nudos del cuerpo. La mayoría eran chicos atentos y muy humildes, excelentes personajes.

Escuché el timbre del portero y les abrí la puerta. Muy puntual Scaloni, como siempre.

Ya había preparado las piedras calientes y la camilla con los aceites que iba a necesitar, a ultimo momento me habían pedido algo un poco mas fuerte que lo usual. Atenderlo a Lionel siempre era algo muy placentero. De solo pensar en recorrer ese hermoso cuerpo escultural con mis manos me hacia calentar como pava en la hornalla.

Tocaron la puerta del consultorio en el que atiendo de forma particular, hice que pasaran y los saludé a los dos con un beso. A Lionel lo atendia siempre, a Pablo era la primera vez. Los dos estaban sonrientes, Les dije que se pongan comodos, que en unos minutos arrancamos. Prendí unas velas aromáticas y bajé las luces, tambien tenia un humidificador con esencia que te relajaba al toque.

Les indiqué, mas a Pablo que a ambos ya que era la primera vez venia, que se sacaran la ropa y que se pusieran las batas que estaban colgadas en el perchero y les señale las camillas para que se recuesten. Quedaron en boxer y me di vuelta para no mirar cuando se acostaran, no queria que me vean babearme. Inicié con Lionel, dándole un masaje breve para ponerle las piedras calientes. Gimió al sentir el calor de las piedras quemarle la piel, me excita tanto este hombre.

A veces me imaginaba cogiendo con él después de cada sesión, era una hermosa fantasia que me acompañaba desde que empecé a atenderlo. Igual, era imposible desde mi punto de vista.

Me limpie las manos, ubicándome al costado de Pablo para iniciar con el mientras Lionel seguía relajado con las piedras. Le dije que si queria dormir que lo haga.

La espalda de Pablo, marcada con miles de lunares y pecas, me invitaba a pasear mis manos por toda la superficie. Coloqué una buena cantidad de aceite y las resbalé por todos lados. Fui desde el cuello y los hombros hasta la espalda baja. Seguí mi camino por los brazos sacándole leves suspiros cada vez que tocaba las zonas mas contracturadas. Scaloni estaba con la cabeza recostada sobre uno de sus antebrazos, mirando toda la situación. Aimar tenia los ojos cerrados. Continué con mis manos subiendo y bajando, apretándole los hombros. Me animé a tocar un poco mas debajo de las caderas, desde atrás hacia adelante. Gimió y yo me calente. Ya no bastaba con Scaloni, ahora iba a tener que fantasear tambien con el chico de los rulos castaños.

Hablaban de cosas triviales y me incluían en la charla, estábamos muy a gusto. Continué con las piernas de Pablo. Fui bajando desde la espalda baja, evitando su cola, por mas ganas que tenia de apretarle el culo. Masajeaba sus muslos reponiendo el aceite que tenia en las manos, me hacia resbalar por todos lados. Me preguntaba a mi misma si tendría la pija parada y si esto les excitaba. A Scaloni mas de una vez se le había parado con mis caricias pero yo trataba de no darle importancia, me babeaba cuando lo veía pero no queria flashear cosas.

Masajeaba sus piernas, de arriba abajo primero una y después la otra.

–¿Qué hora me toca a mí? Me estoy poniendo celoso. -me reí ante el comentario de Lionel y me acerqué hasta él. Ya había terminado con Pablo y le coloqué unas cremas en las piernas y en los pies para refrescarlo, tenia la piel caliente. Ojalá fuera por mi, pensé.

(ONE SHOTS) scaloneta y vos.  +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora