Him |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤, 𝐓𝐚𝐞𝐡𝐲𝐮𝐧𝐠

Veintitrés

Mini maratón
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Yeonjun llevaba ya como hace diez minutos con un diminuto puchero en sus labios y sonreí divertida. Lo empujé captando su atención y para que dejase de tener ese rostro de perrito abandonado en medio de una tormenta.

—Me gustó la jirafa —intento hacerlo sentir bien. Aunque de verdad me había gustado el peluche.

—Pero tu realmente querías el oso.

—Pero está bien, me gustó este también —reí y me puse frente a él—. Deja de tener esa cara.

—¿De verdad te gustó? —me mira sin  estar tan convencido—. No lo dices para hacerme sentir bien ¿verdad?.

Sonreí divertida y negué.
—Claro que no —le sonreí dulcemente—. Dormiré con esta jirafa todos los días.

—Ya basta —suelta una risita y lo abrazo por uno de sus brazos sonriendo mientras seguíamos caminando—. Gracias por esta cita. Fue muy divertida.

Él extiende su brazo para dejarlo encima de mis hombros y acercarme a él. Lo miro y él me mira también con una sonrisa feliz y complacida en su rostro.

—Me alegra mucho. Ese era el objetivo.

—¿Vamos por un helado antes de ir finalmente a casa?.

Asiente y entonces nos sonreímos para dirigirnos a una heladería cercana.

Luego de una hora más o menos estaba ya entrando a mi casa. Encontrando inicialmente todo en silencio. Abrí la puerta y pensé que todo estaría oscuro, y además de eso, las personas dormirían, pero sin embargo Taehyung ya hacía en el sofá muy acomodado con una colcha casi tapándole entero mientras veía una serie; de Netflix, al parecer. Todo estaba oscuro y el lugar simplemente se iluminaba por la luz reflejada de la pantalla del televisor.

—Oh, Sooji —levanta un poco su cabeza para verme.

—Hey —sonrío un poco y cierro la puerta detrás de mi.

—¿Que tal la salida? —pregunta, sentándose en el sofá.

Me quito mis zapatos poniéndome unas cómodas pantuflas de la entrada y me encojo de hombros caminando para sentarme en un espacio disponible del sofá junto a él.

—Bien. ¿Y tú? ¿La serie está buena? —pregunto divertida mirándolo curiosa.

—Mhm, al menos me entretiene —dice con diversión y se encoge de hombros quitándole importancia.

—¿Y...Jungkook?. ¿Se quedó también? —y me resultó imposible no preguntar por él.

—No. Tenía que llevar a Yeoreum —contesta analizándome.

—Oh, ya veo.

—¿Y cuéntame?. ¿Que hiciste en la cita? —levanta sus pies poniéndolos encima del sofá viéndome con curiosidad; me giro también para verlo y me encogí de hombros con una leve sonrisita.

—Fuimos al cine, fuimos a una sala de juegos donde Yeonjun me compró esta jirafa —se la muestro—. Comimos pizza y luego antes de regresar tomamos helado.

—Ya veo. Mejor que la última ¿verdad?.

—Esa hubiese sido perfecta si mi hermano y ustedes no hubiesen tenido la fantástica idea de espiarme.

—¿Sigues enojada por eso?.

—Pues enojada no. Pero no puedo creer como fuiste capaz de participar en eso —alzo mis cejas viéndolo.

Él soltó una corta sonrisa.

—Lo siento.

—No te preocupes —le sonreí levemente—. ¿Vas a ver la serie completa?.