Cuarenta y cuatro

2.1K 241 78
                                    

                          Sooji;

Entramos a la casa y aunque no podía mirar a Tae, sus palabras por alguna razón seguían haciendo un tipo de eco en mi cabeza. Estaba más que claro que aquello de "usarlo" había sido un completo disparate porque yo jamás haría algo así. Y muchísimo menos a él.

—Chicos, ¿dónde estaban? —salgo de mis pensamientos ante la voz de mi madre que prácticamente se interpone en el ambiente silencioso que manteníamos Tae y yo.

Levanto mi cabeza para mirarla y ella al parecer venía de la cocina trayendo en sus manos una bandeja.

—Oh... —por un momento no sé que decir y miro a Tae. Él responde:

—Fuimos a dar una vuelta —dice.

—¿Y la pasaron bien? No los veo desde la mañana y ya atardeció.

—Hum sí... —respondo yo con una pequeña sonrisa de labios cerrados.

—Bueno, deben de tener hambre. Todos estamos en el patio. Vengan —nos dedica una sonrisa y luego se va.

Miro a Tae por un segundo y nuestros ojos se encuentran.

—¿Vamos?

—Después de ti —me cede el paso y le agradezco para tomar el mismo camino que usó mamá para ir hacia el patio.

Y realmente todos estaban allí. Inclusive Yeoreum y Jungkook. Ellos dos en la piscina junto con Jimin y... observo algo dudosa lo cerca que por alguna razón mi amiga está de mi hermano. Y todavía tenía aquella pregunta de donde se había metido la noche anterior.

—Mis niños, ¿donde se habían metido? —mi abuela se acerca a mi y a Tae para mirarnos con curiosidad.

—Fuimos a dar una vuelta —le sonrío solo un poco y veo levemente como Jungkook desde su lugar nos observa.

—Aigoo, ¿y hasta esta hora? Vengan, ya casi vamos a servir la cena.

Y habían hecho una improvisada parrillada que en seguida alertó a mi estómago por el delicioso olor que nos rodeaba ya que la verdad es que me moría por comer algo.

—Sooji, hasta que te veo —mi amiga viene hacia mí pocos minutos después mientras envolvía su cuerpo mojado en una toalla.

—Lo mismo digo.

—¿Mhm?

—Digo, porque desapareciste a media noche y no tengo idea de en que parte de la casa estabas —no puedo evitar decir con cierto tono desconfiante.

—O-oh —y literalmente son muy notorios sus nervios—. Solo estaba aquí, en el patio tomando un poco de aire.

—No entiendo porque me estás mintiendo, Jeulgi. Yo estuve en este patio y no te vi.

Ella me mira, pero no dice nada porque anuncian que la cena ya estaba puesta y que debíamos ir a comer. Y a pesar de que tengo millones de preguntas sin responder que hacerle, solo paso de ella y me dirijo a la mesa. ¿Por qué me estaba mintiendo? ¿A donde fue anoche que luce como un misterio y me lo quiere ocultar? Es decir, sé que es mi amiga y sé que no tiene porque darme explicaciones de lo que haga o deje de hacer, pero si somos amigas, se supone que hay confianza ¿no? Claro, no digo que me tenga que contar absolutamente todo, pero ¿que tanta desconfianza hay en medio de nosotras para que incluso logre mentir descaradamente de esa forma?

Me siento en una silla, y Tae se sienta a mi lado porque su misma madre es quién lo hace sentarse allí. Nos miramos y siendo sincera, no me molestaba ni tampoco me sentía incómoda con él. Incluso a pesar de las veces que él ya había sido honesto con respecto a sus sentimientos siempre me sentía cómoda a su lado.

Him |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤, 𝐓𝐚𝐞𝐡𝐲𝐮𝐧𝐠Donde viven las historias. Descúbrelo ahora