Him |𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤, 𝐓𝐚𝐞𝐡𝐲𝐮𝐧𝐠

Treinta y uno

Los días habían transcurrido normalmente; mi relación con Yeonjun estaba perfectamente bien, Tae y yo seguíamos teniendo una agradable relación entre nosotros. Y me gustaba el hecho de que incluso yo sabiendo que le gustaba, él lograse mantener una comodidad entre nosotros sin que se sintiera extraño.

Con respecto a Jungkook...

Sabía que venía a la casa, pero no lo veía porque la mayoría de veces yo estaba en la preparatoria. Le preguntaba de vez en cuando a Jimin por él pero siempre me decía que estaba ocupado o cualquier cosa que a leguas se notaba que eran excusas.

Y lo que más me molestaba recientemente, era el hecho de que luego de esa vez, cuando pasó lo de la cocina, que me había dicho que quería ser "el especial y el indicado", se había desaparecido prácticamente. ¿Acaso es un juego para él actuar y luego alejarse como si nada? Era molesto, sinceramente.

Sin embargo, yo podía ir tras el ¿verdad? Podía escribirle, llamarlo. Intentar saber de él o mejor dicho, intentar saber a que diablos está jugando y si le resultaba tan divertido jugar conmigo de esa forma. Pero al mismo tiempo, también estaba manteniendo mi límite. Porque de hecho, era lo que debía hacer. Y si iba tras él....

La verdad es que no podía, aunque quisiera. Solo esperaba que esto no fuese para siempre así.

Finalmente, cumplía un mes de relación con Yeonjun. Me encontraba en el cuarto de Jeulgi (ya que había ido a su casa) y mientras pensaba seriamente que regalarle a mi novio. Me había invitado a cenar en la noche a un restaurante italiano y quería darle un detalle por nuestro mes como novios. Suspiré.

-Batido -dice Jeulgi entrando a la habitación mientras traía en cada una de sus manos un vaso con batido.

-Gracias -le sonreí aceptando este.

-¿Sigues pensando que regalarle? -cuestiona ella sentándose a mi lado luego de darle un pequeño sorbo a su bebida.

Yo hago lo mismo y asiento.

-Mhm. Sé que cualquier cosa que le regale le va gustar pero aún así -digo y doy un pequeño sorbo a la bebida que me había traído mi amiga.

-Entonces dále un regalo que aunque sea simple transmita un lindo sentimiento y sobre todo que desprenda cariño por doquier -bromea divertida.

-Necesito pensar rápido que regalarle. -Suspiro.

La vibración de algo capta mi atención y miro el celular de Jeulgi a mi lado. Veo como la pantalla se enciende y un mensaje proveniente de un tal Baby se mostró.

"Veámonos hoy en la noche".

Alzo una ceja y veo a mi amiga que tomaba de su batido muy concentrada. Tomo el celular y hablo.

-Un tal...Baby y corazoncito rojo te envió un mensaje -alzo una ceja.

Ella me mira y comienza a toser. Intenta avalazarse hacia mi para coger el celular pero lo escondo.

-¿Tienes novio? -pregunto-. ¿Es Juyeon?.

-Ummm no -dice negando y por alguna razón noto que se pone nerviosa.

-¿No?. ¿Quién es entonces? -pregunto-. No me lo habías dicho. De hecho...últimamente estás actuando un poco extraña.

-No estoy actuando extraña -me quita el celular de un hábil movimiento.

-¿Por qué no me lo dijiste? ¿Es tu novio? ¿Alguien que yo conozca?

-No te lo dije porque aun no es nada serio. Y no es mi novio, nos estamos conociendo.

Me le quedo viendo aun con desconfianza. Ella sonríe inocente.

-Si se forma algo serio te lo contaré. De verdad.