『𝟷𝟻: 𝚒𝚝'𝚜 𝚗𝚘𝚝 𝚛𝚎𝚊𝚕』

3K 435 114
                                    

Kitty corrió cuanto pudo en búsqueda de un poco de libertad. En realidad, nadie lo estaba persiguiendo, pero había un agrio sabor que llegaba a su paladar no paraba de crearle unas ganas de vomitar. Su corazón empezó a bombear mucho más rápido y el aire se hizo tan pesado que no pudo seguir con su trote. Terminó por caminar unos cuantos pasos más hasta que llegó a una banca de un parque y lo uso de apoyo. Tomó asiento en dicho lugar y miró el cielo anaranjado que había sobre él, sentía su pecho arder. Tiro su espalda al respaldar antes de perder su mirada en cualquier sitio.

Busco en los bolsillos de la casaca de cuero que vestía su celular. Si bien no sabía cómo buscar las cosas al cien por ciento, lo utilizaba para todo lo que necesitaba a pesar de sus restricciones. Siempre que tenía un pesar o algo le dolía buscaba en el icono del teléfono el número de la persona que siempre estaba dispuesta a escucharlo sin importar lo que pasaba. Sea de día, sea de noche, sean las tres de la tarde o de la mañana... no importaba, bastaba que timbre cuatro veces para que Taehyung respondiera el teléfono.

Ya sea que este contento o este triste, el problema nunca importo cuando de Chris se trataba. Él, queriéndolo o no, se había vuelto un punto de apoyo para Kitty; Christian no se limitaba a ser un conocido más con quien Kitty solía follar, él era algo más que un compañero. Era su mejor amigo, la única persona cuerda que le quedaba a su lado. Algunas veces incluso se habían llamado almas gemelas por la manera tan peculiar en la que ambos encajaban en la vida del otro sin crear una gran disonancia. Era cierto, los lazos más allá de lo profesional estaban prohibidos, pero Namjoon nunca específico que no podían tener amigos.

Si bien a Kim no le agrado del todo saber que su muñeco favorito tenía un amigo, tampoco le gustaba la idea de tener un chico tan desquiciado a su lado.

— No me digas que otra vez quieres tener sexo telefónico. — soltó Taehyung a través de la línea.

— No toda mi vida es de sexo, para tu información.

— Dijo nunca Kitty. — completo la frase para luego soltar una carcajada tan particular. — ¿Qué sucede? Ya casi no me llamas si no es para llorar porque no puedes follar.

— Eres un dramático, no necesariamente necesito tener ausencia para querer hablar con mi amigo.

— ¿Otra vez peleaste con Yoongi? — Kitty mantuvo un silencio por un largo rato que solo preocupo a Taehyung. — Hey, ¿Estás ahí?

— Yoongi no tiene nada que ver aquí. — su voz fue fuerte y con gran nivel de seriedad.

— Entonces veo que fue grave.

— Que él no tiene nada que ver aquí. — Kitty acomodo el teléfono antes de formar unos puños con sus manos y gruñir en voz baja.

A su mente llego todo lo sucedido antes de que escapara. La omega que no había parado de circular a lado de Yoongi desde ya hace tres semanas lo empezaban a ahogar. Antes de que esa chica llegara su alfa le brindaba atención, le daba los buenos días o esperaba a que despertara para que compartieran un tiempo juntos. Incluso, luego del ataque de pánico que le dio por las pesadillas, Yoongi se dio la oportunidad de volver a descansar en su cama con el omega entre sus brazos. Solo vivían un mundo imaginario donde nada estaba mal, para ellos cada día que pasaba era un recuerdo bañando en oro en sus mentes y no un día menos con el omega. Eran ellos, nadie más importaba.

Todo iba bien hasta que la chica llego y no sabía si era el egoísmo de Kitty que deformaba la realidad o que Yoongi lo estaba descuidando. Ni siquiera entendía por qué llamaba la situación así, "descuidar", ni que fuera un perro al que debían de mantener. Desde que Park había llegado a la pubertad, Namjoon le enseño que los sentimientos eran inútiles, amar nunca le llevaría a nada; además que alguien como él, tan usado, nunca recibiría un verdadero cariño, y si alguien se mostraba interesado nada más quería tener una buena noche a su lado. En algunas ocasiones lo habían puesto a prueba y cuando reaccionaba de manera positiva ante la atención que le daban todo terminaba en unas frías lágrimas y secos correazos en su espalda. ¿El objetivo? Matar esas ilusiones de ser amado, y resulto porque Kitty fue avanzando por su camino con la idea de que a nadie le interesaría.

FILTER NIGHT || YOONMIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora