FILTER NIGHT || YOONMIN

『𝟸𝟾:𝚛𝚎𝚊𝚕 𝚏𝚛𝚒𝚎𝚗𝚍𝚜 』

Los ojos de todos estaban colocados en el tablón del juego de mesa. Jimin tomó los dados al momento que fue su turno y empezó a moverlos, los tiro para luego observar el número y empezar a mover su ficha con forma de la Torre Eiffel. Contó su dinero para luego comprar la supuesta propiedad y llevarse el sello que coloco en un pedazo de plástico; tenía que reunir tres más y ganaría el juego otra vez. El adolescente que estaba a su costado empezó a quejarse, pues él estaba a tres casillas de poder obtener aquel lugar, el omega ante dicha queja se limitó a reírse de él y beber del líquido que los criados le habían traído hace unos minutos a todos. Era una mezcla de gaseosa con un poco de vino y pedazos de manzana para darles un sabor agradable.

- Yoongi, deja de hacer trampa. - le reclamo su madre cuando noto que su hijo volvía a soltar los dados de cierto modo para que me dé un seis y pueda volver a tirar.

- No es trampa, es técnica. - aclaro para luego ganarse un golpe en la cabeza por parte del omega sentado a su lado.

Yoongi giro a ver a Jimin con su ceño fruncido, pero se ganó una risa traviesa del menor que no tardo en ser contagiada.

Todo había cambiado en tan poco tiempo. Jimin llevaba tres semanas de medicación y terapia, no era mucho. Era un tratamiento largo y complejo que llevaría años si es que se llegaba a concluir, pues según una investigación el TEPT-C podía durar un periodo o toda la vida. Las cosas iban algo aceleradas por parte de Jimin al ver como la información cada vez iba subiendo de nivel y ambos averiguaban cosas que incluso Yoongi no sabía. Fuera de las terapias, y tras seguir el orden correcto la receta, los estados anímicos del omega fueron mejorando a tal punto que él mismo se sintió mejor consigo mismo. En su pecho siempre había existido un nudo que poco a poco se fue eliminando, era como si colocara un filtro que le agregaba un color más lindo a la vida. También las pesadillas iban desapareciendo y el insomnio de Jimin se eliminó una semana después.

Yoongi no podía sentirse más orgulloso de su pareja.

La ronda pasó hasta que Yoongi tuvo que volver a tirar los dados y su figura con forma de un perro cayó en una de las tantas casillas que le pertenecían a Jimin. Ante ello el alfa tuvo intención de darle los dados a su padre, más el menor le empezó a reclamar por el hecho de que debía de pagarle cierta cantidad de dinero para poder seguir avanzando.

- Yoongi págame de una buena vez para que sigamos jugando. - reclamo Park entre algunas risas mientras le daba un codazo en la zona de su costilla.

- Ya te dije que no te daré nada. Déjalo pasar.

- Págame lo que me debes.

- Jimin, es dinero falso. Déjame ser feliz. - reclamo mientras rodaba los ojos y le dedicaba una mirada rápida a su padre, quien los veía con una pequeña sonrisa.

- Págale lo que debes a Jimin - contribuyo su madre mientras arrugaba el ceño de manera falsa.

- ¡Mamá!

Jimin soltó una pequeña risa mientras sonreía ante la situación. Luego de un buen rato se había acostumbrado a su nombre, nuevamente se sentía él. Estaba en un hogar que de verdad lo cuidada, con una familia que lo querían y un lindo alfa que lo amaba. Tenía un sitio donde su opinión era válida y todos se preocuparon cuando hablaron sobre los problemas que Park tenía. Claramente, la pareja no contó la misma historia, si no la disfrazo de un pequeño abuso de niño y que el nombre de Jeremi había sido errado, pues sus orígenes eran coreanos. Si bien la historia no fue la mejor, los Min la aceptaron y no le dieron la espalda a Jimin; al ver a su hijo sabían que aquel chico le daba una felicidad tan única que jamás le habían visto.

Si de algo estaba seguro el omega era que quería quedarse ahí por todo el tiempo que podría, era simplemente hermoso.

- Fue tu idea jugar este juego, así que sigue las reglas. - esta vez fue Jungkook el que se metió en la charla.