Alexandra Riddle (En pausa)

Capítulo 72: La Primogénita

Narra Alexandra

Draco y yo seguíamos a sus padres, al acercarnos a las escaleras pude percatarme de que habría muchos mortifagos, podía escuchar sus voces, comenzamos a bajar, y por fin pude divisarlos, mantenía mi postura firme, mirada fría.

Los mortifagos comenzaron a hablar más fuerte, buscaba a mi progenitor discretamente con la mirada pero no lo veía, hasta que...

- ¡Silencio! - dijo haciendo presencia en el lugar, todos los mortifagos se callaron  y bajaron la mirada.

- Mi señor, su hija ha llegado - exclamó el señor Malfoy.

Voldemort sonrió y se acercó, detrás de él venía una enorme víbora, esperen esa, esa víbora yo la he visto, ¿pero en donde?, la sonrisa de él era más que escalofriante, rara, era como una combinación de ambas, ya no sentía miedo, más que eso tenía ganas de reír, ya sabía que regalarle de navidad, una nariz le quedaría al toque.

Los padres de Draco se apartaron a los lados y de este modo "mi padre" se acercó a mi, me estaba a analizando.

- Mi hija... - murmuró observándome, ahora pareciera haber visto a un fantasma.

- Es idéntica a Prince - escuché que susurró alguien, pero antes de que pudiera percatarme de quien era la persona que dijo aquel comentario, Voldemort dió un movimiento con su varita y el cuerpo de la persona cayó al suelo, dos mortífagos se lo llevaron arrastrando.

-...pero cuánto tiempo ha pasado desde que no te veo - continuó diciendo mi padre, esperen esperen, ¿alguna vez me vio?

Intento concentrarme pero un montón de flashbacks inundan mi mente, yo de pequeña y la serpiente visitándote, mis padres, mi vida antes de Hogwarts, la muerte de mis padres, los entrenamientos con Dumbledore, por un momento veo hacia donde se encuentra Draco y el me da una mirada como si supiera exactamente lo que estoy pensando y eso me tranquiliza.

- Es bueno por fin verte padre - digo finalmente de manera seria, y en ese momento el esboza una sonrisa, como si hubiera estado esperando que yo dijera aquellas palabras.

- Snape me ha contado muchas cosas sobre ti, al parecer eres una excelente bruja, era de esperarse, después de todo eres una Riddle, juntos destruiremos a Potter - exclamó y los mortífagos comenzaron a gritar eufóricos después de escuchar esto último - Denle todos la bienvenida a mi hija, ¡Alexandra Riddle!

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Todos los mortifagos se encontraban al interior de la mansión, celebrando mi llegada junto a Voldemort, aunque creo que más bien celebraban por que esto significaba el inicio del fin, sabía un poco de lo que me esperaba, entrenamientos, mostrarme magia negra, convertirme en la mejor de sus soldados, pero por alguna razón seguía recordando como aquella persona dijo que era igual a mi madre y después lo desvivieron

Le daba muchas vueltas en mi cabeza mientras veía el gran jardín de los Malfoy, hasta que sentí la presencia de alguien a mi lado.

- Sin duda eres idéntica a tu madre - su comentario me tomó por sorpresa, por lo cuál lo miré y el miraba al frente como si viera a la distancia y recordara cosas - eres mi hija, tienes una parte de mi carácter, pero debo aceptar que tienes mucho de ella...

- ¿Por qué asesinaste a la persona que mencionó mi parecido con el de mi madre? - pregunto sin pensarlo y entonces el me ve a los ojos.

- Porque aunque no lo parezca me sigue doliendo su muerte como el primer día, sigo sin soportar el que me la recuerden, no por que la odie, si no al contrario, la amé tanto que el recuerdo de saber que la perdí me quema por dentro - analizo sus palabras, ¿de verdad quiso tanto a mi madre? - algun día te contaré la historia, tu madre me seguía a donde yo fuera, siempre cuidaba de mi, pero me avergüenza no poder decir lo mismo de mi.

Después de decir esto último, vuelve a la mansión y me quedo de nuevo sola, con más dudas que antes.

Debo admitir que una parte de mi quiere obtener todas las respuestas a preguntas que algún día me atormentaron, respuestas que espero algún día obtener, estoy conviviendo con el causante de la muerte de mi madre biológica y de mis padres adoptivos, el causante de tantas desgracias y sé que debo ponerle fin a esto.

- Lex... - escucho la voz de mi rubio favorito detrás de mi y me giro para verlo.

- Estoy bien - exclamo antes de que me haga la pregunta que sé que me hará.

- ¿Segura? entiendo que todo esto pueda parecer nuevo para ti - dice casi en un susurro para evitar que alguien nos escuche - pero estaremos bien, me tienes a mi.

- Lo sé, solo quiero hacer que todo esto termine pronto, estoy cansada de tanto y sé que muchas muertes están por venir...