Alexandra Riddle (En pausa)

Capítulo 51: Soy un mago

Narra Alexandra

- Nada mal Malfoy - exclamé recargándome en el marco de la puerta de la habitación en donde se quedaría Draco, el cual se estaba viendo en el espejo acomodando su saco negro, pero al escuchar mi voz se giró para verme, acercándose a mi sonriendo de lado.

- ¿Y yo ya te dije que te ves hermosa? - negué con la cabeza, él se acercó besándome después se separó y me miró - bueno entonces te lo digo ahora, - se acercó a mi oído - te ves hermosa cariño - sentí como mi piel se erizó, me ponía nerviosa cuando hacía eso y él lo sabía - ¿te pongo nerviosa Riddle?.

Me separé de él, y lo miré sonriendo.

- Claro que no.

- ¿Ah no? - se acercó de nuevo a mi, haciéndome retroceder hasta llegar a la pared, acarició mi mejilla y después pasó su dedo pulgar por mi labio inferior, cerré mis ojos un pequeño momento, luego recargó su mano en la pared, acercándose a mi oído de nuevo - por qué yo juraría que ahora mismo estoy logrando ponerte nerviosa - relamí mis labios y lo miré, sus ojos ahora se veían un poco oscuros, bajó su mirada viendo un momento mis labios y después me empezó a besar.

El beso empezó siendo lento, luego se fue intensificando, mis manos jugaron un poco con su cabello, sentí como sonrió un poco durante el beso, yo también lo hice, me recostó en la cama, y continuó besándome, se separó un poco de mi, lo suficiente para mirarme a los ojos, puso su mano en mi cuello.

- ¿Sigues estando segura de que no te pongo nerviosa? - preguntó con su voz un poco agitada, alzando ambas cejas, mientras sonreía de lado.

- Cállate y mejor continua besándome - exclamé, relamió sus labios, bajando su mirada, estampó sus labios con los míos de nuevo.

Sentí como su mano pasaba por mi cintura, se quitó el saco, y todo iba subiendo de nivel, comenzó a dejar besos en mi cuello, yo hice mi cabeza hacia un lado para que tuviera más espacio. Mordió mi labio inferior, en un movimiento rápido logré que el quedara abajo de mí, sonreí maliciosamente, el sólo mordió su labio inferior, me acerqué y lo besé de nuevo, baje por su cuello, sentí como sus manos pasaron de están rodeando mi cintura a mi trasero, lo apretó un poco y solté un pequeño gemido, pero el lo reprimió besándome, mis padres estaban abajo así que no debían escucharnos, me separé un poco acercándome a su oído.

- ¿Nervioso Malfoy? - exclamé cómo pude.

- Nervioso no es precisamente como estoy en estos momentos - murmuró, sonrió e hizo que quedara debajo de él de nuevo.

- ¡Chicos hora de irnos! - escuchamos que gritó mi padre desde la planta baja, Draco y yo tuvimos que separarnos.

- ¡Ya vamos! - dije esperando que mi voz se escuchará lo menos agitada posible. Draco se puso de pie, ayudando a que yo lo pudiera hacer también, acomodé la falda de mi vestido y mi cabello - ¿me veo presentable? - le pregunté, el me miró de arriba a abajo, pasando su mano por su mentón.

- Te ves perfecta - murmuró, sonreí, me acerqué a él, ayudándolo a acomodar el cuello de su camisa, después su cabello y por último se puso su saco.

Entrelace nuestras manos.

- Vamos entonces.

- Sabes que esto quedará pendiente, cariño.

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La fiesta en la fundación iba bastante bien, los niños reían mientras jugaban, más tarde saldrían a buscar los huevos de pascua, Draco había ido al baño, así que yo estaba en la barra de bebidas esperándolo.