Tn pov's
La premier de
Merlina había sucedido hace un par de horas, ahora nos encontrábamos en el after party, estaba mas que orgullosa y emocionada por mi novia, a pesar de su look tan sombrío y tan al estilo Adams, ella tenia una sonrisa y veía el brillo en sus ojos, no podia ser más y feliz.- Me alegra que estés esta noche conmigo- dice Jenna mientras pone su mano en mi cintura.
- No me perdería este día por nada- digo con una sonrisa.
No hace mucho que nosotras hicimos nuestra relación publica, claramente habían muchos comentarios de odio, pero más eran de felicidad y de la poca sorpresa que tenían, digamos que mientras éramos "amigas" no éramos las personas mas disimuladas, las indirectas en post, tweets, siempre estábamos juntas, siempre habían rumores.
Jenna suelta mi cintura para agarrarme de la mano y llevarme donde los demás actores, no soy una persona muy sociable, mucho menos una persona a la cual le gusten las fiestas y conocer gente, pero hoy era una de esas excepciones, suelto un suspiro antes de llegar a la mesa, Emma es la primera en saludar y luego siguen los demás.
Me siento al lado de Jenna y agarro su mano, no la suelto ni un minuto y mi participación en la conversación es casi nula, respondo lo que me preguntan, pero no aporto nada ni cambio la conversación, siento sus miradas en mi y los típicos pensamientos aparecen, siempre en los peores momentos, trato de ignóralos pero no puedo.
- Amor ire por un trago ¿Quires uno?- le susurro a Jenna.
- No esta bien.
Solo asiento y me levanto de la mesa dirigiendo al barra de tragos, me apoyo ligeramente en la barra, espero a que pase el bartender para poder hacer mi pedido, pero en esos segundos que parecen una eternidad, siento como alguien se para a mi lado derecho, miro de reojo y es un chico alto y castaño.
- Hola.
- Uhm hola- digo nerviosa.
- ¿Esperas por un trago?- dice con una sonrisa.
- ¿Por que más estaría aquí?
Solo lo escucho reír y cuando por fin aparece el bartender, siento un poco de tranquilas, pero justo cuando estoy por pedir una margarita, el chico que estaba a mi lado se adelanta.
- Dos mojitos por favor.
- Claro- dice el bartender para luego irse.
Suelto un bufido de frustración y enojo, el sabia que yo quería un trago, que yo había llegado antes que el, como odio a la gente como el.
- Sus mojitos- le pasa los tragos al chico.
- Gracias - me pone un mojito en la barra- déjame invitarte un trago.
- No gracias- digo enojada.
- Oh vamos preciosa, solo es un trago, se nota que no estas disfrutando, quizás yo pueda cambiar eso.
- No lo creo -suspiro- Me da una margarita, por favor.
- Claro- dice el bartender.
- ¿Me vas a despreciar el mojito?
- Yo nunca te lo pedí.
- Sabes, me encantan las chicas como tu.
- ¿Cómo yo?
- Su margarita- me pasa mi trago el bartender.
- Gracias- lo agarro- Me voy.
Siento como me agarra de la cintura y me acorralada en la barra, siento miedo y enojo al mismo tiempo, trato de buscar a mi novia con la mirada, pero entre tanta gente bailando, no la puedo ver y dudo que ella pueda verme a mi.
- Déjame ir- digo furiosa.
- Solo quiero conocerte preciosa, aparte tu mojito te esta esperando- dice con una sonrisa.
- No me gusta el mojito y segundo no me digas preciosa, no te quiero conocer.
- Dame 5 minutos y te hare cambiar de opinion- se acerca más.
- No quiero conocerte, déjame ir, tengo que volver donde mi novia- digo más enojada.
- ¿Novia? -rie- no mientas, alguien tan linda como tu no puede tener novia.
- ruedo los ojos- Créelo, tengo una novia que me esta esperando, así que déjame ir.
- No.
Veo como se acerca cada vez, causando que corazón empiece a latir rápido, los nervios me estaban atacando y justo antes de que le lance mi bebida, escucho esa voz que me hace sentir tranquila.
- Aléjate de mi novia estúpido- dice Jenna furiosa.
- ¿Ella es tu novia? - rie- yo soy mejor que ella.
- Idiota- le lanzo mi bebida y se aleja.
Siento como Jenna toma mi muñeca y me empieza a jalar para salir de la fiesta, al ya estar afuera, veo como su expresión aun es de enojada, hasta yo lo estaría si Jenna hubiera estado en esa situación.
- ¿Estas bien?- pregunta preocupada.
- Si, pero no me vendría mal un abrazo.
A los segundos siento sus brazos al rededor de mi cintura y como apoya su cabeza en mi pecho, hay una diferencia de 20 cm entre las dos, así que ella siempre puede escuchar como mi corazón se acelera ante su contacto, suelto un suspiro de cansancio.
- ¿El te hizo algo?
- No, antes de que lo haga justo llegaste.
- Nunca más te vuelvo a soltar en una fiesta.
- No lo vuelvas a hacer, pero es preferible no ir a fiestas.
- Esta bien, no más fiestas con gente que no conoces o conocemos.
- Me encanta esa idea -sonrió- ¿Quieres volver a tu fiesta?
- ¿Tu quieres volver?
- No pe- me interrumpe.
- Entonces vamos a casa, podemos hacer un maratón de Merlina- me sonríe.
- Yo puedo ir a casa, amor vuelve a tu fiesta, se notaba que estabas feliz.
- Estaba feliz por que tu estabas a mi lado, no tiene sentido que yo me quede y tu te vayas, quiero celebrar contigo, así sea en nuestra casa o en esta fiesta, solo quiero estar contigo Tn.
- Esta bien, vamos a comprar golosinas y a la casa.
Jenna agarro mi mano y empezamos a caminar por las calles de Los Angeles, entramos a la primera tienda que encontramos y compramos todas las golosinas que queríamos y luego fue otro camino a la casa y en ningún momento nos soltamos las manos, me estoy enamorando y eso asusta.