Dua's pov
Esa sensación de calidez cuando estas con esa persona, como todo es diferente cuando estas sola con esa persona, el como la vida empieza a cobrar sentido, es una sensación inexplicable.
El hecho de ver su espalda semi desnuda, cubierta ligeramente por una sabana blanca ligeramente transparente, los pequeños rayos solares que pasaron rebeldemente por las cortinas, es simplemente como estar en un sueño, pero seria mejor si esto fuera algo más que un acoston de una noche y luego volver a fingir que somos simplemente conocidas.
Seria muy descarado de mi parte decir que no me gusta la manera en la que vivimos, hay una magina inigualable en la manera en la que se desenvuelve esta "relación" no es algo moralmente aceptado, pero es jodidamente satisfactorio, pero en estos momentos quiero más de ella.
Quiero poder levantarme cada mañana a su lado, poder abrazarla por la cintura y poder saborear esos labios cada vez que quiera, daría mi vida entera para poder estar con ella, sin duda tiene un campo magnético que no te deja huir, siempre te mantiene en su orbita.
Yo era consiente de lo que esto significaba y ella me marco las reglas desde un principio.
Nada de enamorarse
Al principio estaba de acuerdo con eso, no le veía ningún problema, solo necesitaba un poco de distracción y saber donde tener una buena noche, pero nadie puede controlar lo que siente y de un momento a otro, había un sentimiento creciendo en mi pecho, pero con ella también crecía una angustia que no me dejaba dormir bien o disfrutar de esas noches como antes.
- ¿Cuanto tiempo llevas dormida?
Escuchar esa voz adormila hizo un corto circuito en mi cerebro, de pronto las palabras se fueron y no supe que responder, una parte de mi siente que escucho mis pensamientos y todo esto terminara, pero se que eso es imposible, pero se me hace imposible no pensar en esa posibilidad.
- ¿Todo bien, Dua?
Lleva su mano a mi vientre y siento ligeras caricias en ella, un suspiro involuntario sale de mi boca y siento mis mejillas enrojecer, ella suelta una risita y de pronto siento su peso encima de mi, ver su pelo despeinado y esos hermosos ojos cafes, se veia tan sexi y tierna al mismo tiempo, sin duda tenia ganas de besar ese pequeño puchero que tenia en sus labios.
- Odio el hecho de hablarte y que no respondas.
- Perdón, me perdí en mis ideas- le sonrió y le acaricio la mejilla- ¿Te quedas a desayunar?
- Sabes que no puedo Dua- dice seria.
- Solo te pido hoy Tn- le agarro de la cadera.
- Tenemos un trato, nunca me he quedado a desayunar en los últimos meses.
- Hoy podría ser un cambio.
- No, tengo que irme.
Y con eso ultimo empuja mis manos y se levanta para cambiarse, solo puedo ver como ella empieza a buscar su ropa y suleto un suspiro, empiezo a imitar su acción.
Odio los ambientes incomodos, siempre eh tratado de evitarlos o tratar de salir de ellos, pero en estos momentos no se como acercarme sin recibir otro rechazo ¿Por qué es tan dificil acercarme a Tn? nunca se me ha dificultado el coquetear con alguien y llevarla en la cama, incluso retenerlas por un tiempo, pero con ella todo era diferente, incluso tropezaba con mis propias palabras al tratar de hablar con ella.
Cuando ambas ya estamos cambiadas, veo como aun tiene ese semblante frio que hace que todo en mi cuerpo se ponga alerta, ella simplemente sigue alistandose como si yo no existiera, suelto un supiro de frustración, a veces odio el hecho de que pueda desinteresarse por las cosas tan rapido.
