[Capítulo nuevo; agregado durante la edición de la historia]
Bruno
Suspiré hondo cuando escuché la voz de mi mamá y de la tía Xime en la cocina. Ni siquiera sé por qué están tan emocionadas por recibir a un ahueonao' en la casa, pero bueno, cosa de ellas.
—¿Estai celoso?
Miré rápido al Pablo, que me miraba divertido.—¿Qué hablai?
—¿No estai celoso de que venga el pololo de la Cassy?
Me reí y fruncí ligeramente el ceño.—No.
—¿Por qué andai con la cara de hoyo entonces?
—Porque me cae como el pico el Felipe y voy a tener que aguantarlo todo el almuerzo.
—Pero si vo' casi nunca almorzai abajo.
—Ahora si po'.
—Mmh.—Se rió y luego negó con la cabeza.—Si tú lo decí...—Se encogió de hombros.—Lo único que te voy a decir, como un consejo de pololo—Me reí.—No vayai a cagarle el almuerzo a la Cassy, porque si eso pasa, no vai a tener ni banderita blanca de su parte.
—No quiero cagarle el almuerzo.
—¿Entonces?
—Solo quiero ver como la trata el hueón.
Sentí leves golpes en la puerta y me levanté rápido de la cama pa' abrirla, porque sabía que la única que tocaba era el Casandra.
—¿Qué se te ofrece, Casandra Garrido?—La miré con una sonrisa, pero ella estaba súper seria.
—Bruno,—Pronunció lento mi nombre y sentí mi piel erizarse.—¿Podí almorzar aquí arriba?
—¿Cómo?
—Quiero que todo salga bien y sé que no te llevai bien con el Felipe.
Uní mi pulgar e índice para pasarlos por encima de mi boca, simulando un cierre.—Por mí no te preocupí, que no ando con ganas de pelear con giles.
Me miró cansada.—Tú siempre andai con ganas de pelear.
—Corrección, solo cuando me hinchan las hueás.
—¿Podí almorzar en tu pieza, por favor?
Negué.—No.
Suspiró y corrió la mirada.—Bruno, por fa, no me vayai a cagar esto.
—No voy a hacerlo.
Asintió lento.—Bueno.
Se alejó y empezó a bajar rápido las escaleras, porque sonó la puerta, así que, supuse que ya había llegado el Felipito.
—Vamos.—Le pegué despacio al Pablo en la espalda, porque estaba pegao' mirando su celular.—A almorzar.
—Creo que la Antonia está ni ahí conmigo.—Susurró y se guardó el celular en el bolsillo.—¿Qué pensai tu? Me dejó en visto hace como una hora.
—Quizás está ocupada.—Le dije mientras bajábamos las escaleras.—O le da miedo enamorarse porque hace poquito, te recuerdo, la cagó un ahueonao.—Alcé un poquito la voz, con la esperanza de que el Felipe escuchara y parece que resultó, porque cuando llegamos a la mesa ya estaba mirando mal en la dirección que veníamos con el Pablo.—Hola.
—Hola.—Nos saludó de mala gana.
Me senté al frente de la Casandra y el Pablo al frente del Felipe, porque sabía que si lo tenía al frente no iba a terminar muy bien esto.
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Culiao Pesao
Genç Kurgu༶•┈୨CHILENSIS୧┈•༶ Los problemas de la Casandra no empezaron cuando se fue a vivir a la playa con la mejor amiga de su mamá, pero sí empeoraron cuando conoció al Bruno; un mino antipático con el que tendrá que convivir a diario en la casa. ┍━━━━━━»•»...