• ℂ𝕒𝕤𝕒𝕕𝕒𝕤 𝕡𝕠𝕣 𝕒𝕔𝕔𝕚𝕕𝕖𝕟𝕥𝕖, 𝕂𝕖𝕟𝕕𝕒𝕝𝕝 𝕁𝕖𝕟𝕟𝕖𝕣 𝕪 𝕋𝕦 •

Cap23/JulioDel2015

Un mañana cualquiera de Julio del 2015.
Cuanta ____ Walsh.

Tome fuertemente la mano de la castaña al bajar del auto, después de un año y meses de estar con ella aún no podía creer que fuera mi novia, abrí la puerta principal y ella entró primero, miro el gran recibidor, cerré la puerta a mis espaldas, mi mirada quedo en una foto de Emma y mía con los abuelos Black.

—De quien es?— preguntó refiriéndose a la mansión, yo la mire para después acercarme a ella ágilmente.

—De los abuelos— me limité a decir sin quitar mi mirada de sus ojos, la abrace por la cintura —Estamos solas amor— dije para hacer mi agarre más fuerte y pegarla a mi, ella me abrazó por los hombros, mire sus labios rojizos, su sonrisa traviesa me hizo saber que ella esperaba que pasara lo mismo que yo ansiaba.

—Lista?— preguntó ella, yo la mire a los ojos, esos jodidos ojos cafés que desde que los vi supe que iban a ser inolvidables.

—Para qué?— pregunte haciéndome la desentendida y ella soltó una risita, se acercó a mi.

—Para el mañanero— dijo para después besarme, sus labios atraparon mi labio inferior, comenzó con movimientos suaves y inmediatamente correspondí, la solté de la cintura para llevar mis manos a los costados de sus piernas, ella entendió mis intenciones porque dio un pequeño brinco y se aferró a mi, yo la tomé con fuerza de sus grandes piernas, nuestros labios no se separaron, solo seguían en lo suyo, pero me separé un poco, quería mirarla, observe su linda nariz, sus mejillas que estaban rojitas, sus labios que estaban medio abiertos, sus pestañas largas, sus cejas pobladas y sus ojos, solté un suspiro.

—Te amo, DuLi— susurre y ella soltó una risita, en sus labios había una sonrisa que me permitía observar sus dientes.

—Te amo tanto, Black— dijo ella, se acercó a mi rostro y rozó nuestras narices, llevó su mano derecha a mi nuca y cerró nuestro espacio con un beso.

En pasos torpes y entre besos la lleve a la habitación principal, una cama gigante de edredones vino tinto nos esperaba, sin embargo al momento de intentar acostar a Dua ella volteó los papeles y con la fuerza de sus piernas se posición sobre mi, me dejó una buena vista pues en el camino ya le había quitado la blusa, mi mente imagino un millón de cosas.

—Me gusta como piensas DuLi— hablé roncamente cegada por el deseo, aún tenían cosas por mostrarle.

—Ni te emociones Black— hablo con una sonrisa traviesa y paso sus manos por mis muñecas, eso hizo que yo me confundiera.

Click...

Me había esposado a la cama y yo ni en cuenta había caído, lo tenía todo preparado desde el principio, al final no era mi presa, yo era la suya.

—Juegas muy sucio Lipa— dije con demasiado nerviosismo mientras trataba de soltarme, no acostumbraba mucho a que yo fuera la pasiva.

—¿Tu crees?— me reto mientras lamía mis clavículas y daba pequeñas mordidas haciendo que me excite más de lo que yo esperaba.

—Ah!— ese sonido salió de entre mis labios.

—Justo eso quería escuchar Black— dijo y soltó una risita, el aire de su boca chocó con mi piel.

Desapunto con rapidez mi camisa para empezar a masajear mis pechos mientras yo reprimía mis gemidos, no quería darle ese gusto, sería caer muy bajo.

—No me gusta que te reprimas sabes?— dijo en un tono dominante que comenzaba a intimidarme.

—No te pregunté que o que no te gustaba Lipa— hablé burlonamente, no quería ser una pequeña presa y como reacción ella frunció el ceño.

Oh no.