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Cap34 / Dua.

Jueves 06 de septiembre del 2018 / 23 años (124/365 días de casadas)
Cuenta _____ Walsh.

—Sobre eso, te toca a ti hablar— le dije poniéndome un poco seria —¿Por qué?— la pregunta salió más dolida de lo que yo quería, ella se removió en su asiento con incomodidad, sabía que ella entendía a qué me refería, pero yo necesitaba saberlo.

—Tu papá me presento a un manager, con ese mismo tengo un contrato que no leí bien— yo pase saliva en seco, sospechaba que él había estado metido en esto, pero jamás pensé que le había jugado sucio a Dua, está bajo la mirada —Mi manager me consiguió una relación falsa para ganar fama... pero pocas horas después se enteró que estaba contigo y me pidió que lo platicara, que te convenciera de vernos a escondidas, que no saliéramos al público— ahora entendía por dónde iba, aunque sentía mi nariz picar y ella ya estaba llorando, entendía un poco la situación —Fue ahí cuando tú padre se enteró de lo que hizo Ben, hablo conmigo y me dijo que no quería que su hija fuera el secreto de nadie, que me alejara de ti por ese tiempo y que él se encargaría de romper el contrato antes de tiempo para que pudiéramos estar juntas— fruncí ceño, había pasado este tiempo alejándome de él pensado que había sido el culpable de que ella rompiera conmigo, le había dado un cargo que no le pertenecía.

—Espera... ¿en serio él hizo eso?— pregunté con inseguridad, ella me miró a los ojos y asintió.

—Si, el contrato era para 8 años, pero tu padre lo corto, ahora solo serán 4 años— contestó con una leve sonrisa, él no había sido tan cruel, su único error era haberle presentado a Ben.

—Debiste confiar en mi— le dije para después bajar la mirada, ella tomó mi mano haciendo que la mire, tenía la nariz roja y los ojos cristalinos, una lágrima cayó por mi mejilla.

—Confío en ti, pero no podía hacerte batallar 4 años— dijo con una mueca, yo entendí su punto, quizás hubiera hecho lo mismo —Gracias por escucharme— dijo y entrelace nuestros dedos.

—Siempre tuve una debilidad por ti— le sonreí, se limpió las lágrimas con su mano disponible y ella sonrió mostrando sus dientes.

—Black, quiero quedarme este tiempo contigo— soltó de una, levante mis cejas y no sabía que decir, me había tomado por sorpresa.

—Estoy casada ¿estás consciente de eso?— ella lo dudo unos segundos y asintió, yo solté un suspiro —No quiero que batalles algo que no te pertenece— dije seria, ella bajo la mirada, sabia que le dolía el hecho de que yo estuviera con alguien más.

—Quiero estar contigo, no importa cuanto tiempo sea— dijo firme, me incline hacia ella y dejé un beso en su cabello, observe cómo cerró los ojos disfrutando de nuestra cercanía.

—Te extrañé— susurré en su oído y ella sonrió.

—No sabes cuanto tiempo estuve deseando este momento— susurro con los ojos cerrados y aún con mi mano unida a la suya, abrió sus ojos mirando fijamente los míos —No importa cuánto tiempo tuve que esperar, valió la pena por tenerte hoy cercas de mi— sonrió de lado, mire hacia otros lados buscando la mirada de otra persona, cuando no la encontré volví a mirar a Dua.

Me acerqué a ella con lentitud, sentía su respiración pesada, su nariz y la mía rozaban levemente haciendo que mi piel se prendiera, roce mis labios con los de ella y sentí como sonrió a mi tacto, en un acto de valentía cerré el espacio que se interponía entre la cantante y yo, sentí como mi corazón latió con mayor rapidez, los movimientos eran lentos, pero yo ya estaba muy perdida en ella, los besos lentos siempre fueron sus favoritos y los besos lentos siempre fueron una tortura para mi, lleve mi mano a su cintura jalándola hacia mi, había extrañado la calidez de sus labios, su respiración agitada se escuchaba entre los besos que nos dábamos, sabia que nos habíamos extrañado mutuamente, también entendía que necesitábamos recuperar mucho tiempo perdido, la falta de aire se hizo presente, pero aún así me entretuve otros segundos saboreando su labial sabor cereza y sus besos que sabían a té.