«Cuando tú vas, La Parca ya fue y vino dos veces»
La Parca es líder del cártel más importante en México, es el ser más temido en el país y gran parte del mundo, nadie ha visto su rostro, mucho menos conocen su nombre real. Y, a decir verdad, nadie q...
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"Reunión"
28 de septiembre de 2019.
🐆 ; A T Z I N❞
—Moshi moshi. —saluda el japonés en cuanto descuelga el teléfono.
—Raiden.
—Oh, pero si es mi gran amigo, La Parca. Enserio, amo a este hombre. —añade, como si estuviera con alguien más.
Ojalá sea Dalil, me evitará el tener que dar dos amenazas.
—No lo creo, después de todo, faltaste a tu palabra al atacarme. —reclamo.
—Shinigami, ¿cuándo dije que no te iba a atacar?
—Dijiste que no querías que lo hicieras con Dalil interfiriera en nuestros negocios.
—Ah, bueno, supongo que entenderás cómo es esto. A veces uno tiene que elegir el mejor postor.
—¿Dalil es mejor postor que yo? ¿Desde cuándo?
—Mira, sabes que no hay ningún pacto que pueda hacer que me dé más poder del que ya tengo. Contigo sería irme a la segura... lo mismo de siempre..., aburrido. En cambio, con el árabe, tengo el factor sorpresa de que nunca sé qué es lo siguiente que se le va a ocurrir. ¿Qué vale más? ¿La adrenalina o más dinero del que ya tengo?
—No sabía que fueras emocional.
—Sí lo soy, tengo un gran corazón, de hecho.
—Espero que no sea eso lo que te lleve a la ruina, Raiden. No te odio tanto como a otras personas.
—Y espero que esta pequeña travesura no haga que eso cambie.
—Esperaré entonces que mi respuesta no te moleste.
—Ah, shinigami, no esperaría menos de ti. La vida es una y hay que disfrutarla al máximo antes de que vengas a arrebatárnosla, ¿no?
—Estás loco, Raiden. —ataco, pero tengo una sonrisa en el rostro.
—Todos lo estamos, de algún modo.
»Ahora, si me disculpas, tengo unos asuntos que atender.
—Quiero creer que ninguno en mi contra.
—Crees bien —escucho la sonrisa a través de su voz—. Siempre es un placer hablar contigo, espero se repita pronto.
Cuelgo antes de que él pueda hacerlo. En este mundo debes aprovechar todo lo que puedas usar para demostrar tu poder sobre otro, cada mínima cosa cuenta. La manera en la que hablas, como ves a otras personas, tu pose al caminar, lo que dices y lo que no dices, y el modo en el que lo haces.
