33. Reunión de Cuatro

748 57 3
                                    

Gustavo:

Estaba sentado en el borde del colchón de la cama de Grace mientras veía todo el desastre que habían dejado esos idiotas que habían querido atacarle.

Observé cómo todo seguía en el mismo lugar y suspiré antes de que un ruido proveniente de la entrada se escuchará. Poniéndome alerta antes de ver que, la persona que venía en mi dirección, se trataba de él.

De Teo.

Él alzó las dos manos en son de paz al ver como le apuntaba con mi arma y, en cuanto la guardé en la pretina de mi pantalón, avanzó dos pasos más hasta quedar en el marco de la puerta. Observando todo el desatre que había.

—Entonces Maximiliano tenía razón —fue lo que dijo, causando que un suspiro de hastío saliera de mí.

—Tengo ganas de pegarle un tiró en la cabeza a ese idiota —confesé, dejándome caer sobre el colchón—. Le pedí que cuidara a Grace mientras yo arriesgaba mi trasero por él y él muy idiota no lo hizo.

—O quizá sí y Miranda Fry fue más lista —lo miré—. No me veas así. Los dos sabemos que es verdad. Esa mujer podía ser de todo, pero tonta no.

—Bueno, fue tan tonta que dejó que Maximiliano le pegará un tiró en la cabeza —recordé, cerrando mis ojos al recordar toda la escena—. ¿Sabes que hubiera pasado si no hubiera alcanzado a leer el mensaje de Grace?

—Ella quizá estaría muerta. O quizá no. Fue lo suficientemente fuerte como para lastimarse a si misma solo para eso: para sobrevivir —se encogió de hombros—. Yo diría que, sin importar si tú o Maximiliano no hubieran venido, ella seguiría viva.

—Y Miranda también —cedí, notando como su silencio me daba la razón.

—Como sea, sabemos que ahora los Fry van a querer vengarse. Al menos Kalu nos ayudará en esa parte, pero con su padre...

—¿Con mi padre, qué? —Dijo una voz detrás de él, causando que los dos viéramos en esa dirección para ver qué se trataba de Gustavo Torres. Mismo que vestía tan perfectamente bien, que me dieron náuseas de solo verlo.

—No sabemos de lo que es capaz de hacer. Mejor dicho, sabemos de lo que es capaz, pero no sabemos qué hará ni cuándo o dónde —explicó Teo, apoyando su cabeza sobre el marco de la puerta mientras el mayor de los Torres pasaba a su lado, empujándolo levemente para poder entrar a la habitación.

—¿Y qué es lo que tienen en mente? —Cuestionó, fingiendo que se quitaba una pelusa de su saco.

—¿Lo que tenemos? ¿Y tú qué? ¿No que estabas metido en esto? —Cuestioné molestó, sintiendo ganas de partirle la cara de solo recordar a Grace.

—Claro que lo estoy. Pero mi padre anda como un halcón estos días. No puedo andar libremente sin que él lo sepa —nos miró a los dos—. ¿Al menos tienen una idea de lo que me costó venir hasta aquí sin que él sospechara?

—Imagino que a los dos nos costó lo mismo —dijo Maximiliano, luciendo un poco más cansado de lo normal.

—Vaya. El idiota apareció —exclamé, viendo como sus ojos se posaban en mí. Casi como si me suplicara de que no le recriminara nada.

Pero él había sido el idiota que había dejado desprotegida a Grace. Bueno, en si los dos Torres habían sido. Así que no estaba dispuesto a quedarme callado.

—Bueno, ustedes dos no cumplieron con su parte del trato —dije, dejando en claro de que todo esto era su culpa.

—Nadie está diciendo que no sea así, niñato —dijo el tipejo que se llamaba igual que yo, haciendo que me levantara de la cama para poder acercarme a él.

—Vuelve a llamarme niñato y lo próximo que verás será mi arma siendo apuntada a tu puta boca —reñí, sintiendo como si todo se volviera negro de un segundo a otro.

—Ya, basta. Los dos deben enfocarse en lo que de verdad importa —Maximiliano avanzó hasta nosotros—. Grace Sullivan corre peligro y no tenemos tiempo para discutir como unos críos. Así que mejor alejense y presten atención a lo que haremos —dijo, sacando de su saco un sobre blanco que, al ver su contenido, me dejó en claro de que él tenía razón.

Debíamos actuar ya y rápido. O no solo Grace estaría en peligro.

•••••
¡Hola!
Lamento haberme desparecido pero mi papá estuvo hospitalizado y bueno, gracias a Dios está en casa.

En fin, les traje un capítulo porque...

¡Hoy es mi cumpleaños!

Así que denle mucho amor y dejen sus hipótesis. Les leo 🤗❤️

Deseo PeligrosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora