La hija de Sarada y Boruto.

Relleno.

Narra Nariko.

- No puedo creer que seas el próximo hokage. -hablo mi hermana

- No te preocupes hermanita. -le sonrei- Te daré las peor y asquerosas misiones para ti.

- Muy gracioso.

Estabamos en lo alto de la torre hokage, donde prontamente mi abuela Sarada me nombraría el noveno hokage de la aldea de la hoja.

- Hijo! -mi mama vino corriendo hacia mí abrazandome.

- Hola mamá. -correspondi a su abrazo.

- Estoy tan orgullosa de tu ascenso a hokage. -decía separándose del abrazó.

- Gracias mamá. -le sonrei- Donde está papá?

- Tu padre. -miro hacia atras- Ya pronto llegará, estaba tan emocionada que vine corriendo para ver a mi bebé.

- Mamá. -la reprimi- Tengo 23 años, no me trates como un niño. Mi hermana se río ganándose la atención de nuestra madre.

- Y tú no felicitaras a tu hermano?

- Que agradezca que lo ayude de vez en cuando. -se cruzó de brazos.

- Niños. -Mama suspiró cansada. Cuando vi por detrás de ella venía mi padre con mucha paciencia hacia nosotros.

- Mi hijo! -abrio los brazos antes de llegar a mi y abrazarme.

- Es un gusto que pudieras venir papa. -correspondi a su abrazo- Aunque no llegaste a mi nacimiento.

- Tu también. -blanqueo sus ojos- Tecnicamente si estuve. -se separó del abrazo.

- Como digas papá. -me rei.

- Y AHORA ES MOMENTO DE RETIRARME COMO HOKAGE.-escuche que decía mi abuela- FUE UN HONOR CUIDAR DE MI ALDEA Y TENER EL PRIVILEGIO DE SER HOKAGE. -me miró a mí. -Ahora les presento a su nuevo hokage NARIKO UZUMAKI!

yo aparecí atrás de mi abuela y me asomé que la orilla para ver a toda la gente reunida abajo obasionandome y gritando de alegría.

- Será un placer proteger y cuidar de esta aldea tanto como lo hicieron mi bisabuelo, el séptimo hokage y mi abuela Sarada Uchiha. -le sonrei- Ahora es mi turno de cuidar y proteger a cada uno de ustedes! Porque yo soy el noveno hokage! -la gente empezó a gritar alegremente mientras yo levantaba mi brazo sacudiendolo en señal de saludo.

- Bien, noveno hokage. -hablo con burla mi hermana a mi lado- Es hora del papelerio. -Yo puse un aura triste- Vamos.

- Espera un poco Shun. -la miré de reojo mientras seguia saludando a la gente- Dejame gozar un poco más este momento.

- Andando! -agarro mi capa de hokage y me arrastro al interior de la torre hokage.

Once años atras: Examenes chunin.

- Buena suerte hermanito. -me sonrió Shun.

- Gracias hermana. -la despeine un poco para hacerla enojar y funciono al instante cuando vi que ponía una mueca de disgusto.

- Dejame! -se quejó.

- Pronto me convertiré en chunin hermanita. -me cruze de brazos- Y te protegeré a ti también.

- Tengo nueve años hermano. -me miró enojada- No quiero que me protejas.

- Lo haré igual. -puse una mano en su cabeza para que suspire enojada.

- Basta! -quito su mano de mi cabeza.

Abuelo Boruto era el sensor de los examenes chunin. Tenia que esperar a que me indicaran con quien debería pelear. Y al cabo de unos minutos me llamaron a mi junto con un chico de la cascada. Camine para que abuelo Boruto quedara en el medio de ambos y diera la señal para empezar la pelea.