La hija de Sarada y Boruto.

Capitulo 47

Sali a explorar la aldea sola, sabiendo que Tobirama me andaría vigilando desde lejos.

- Puedes salir? -segui caminando- Se que me andas vigilando.

En ese momento aparecio a mi lado ya con los brazos cruzados y el un semblante sin expresión.

- Eres una buena ninja sensor. -hablo sin más.

- Gracias. -bufe- Que haces vigilándome?

- Mi hermano siempre confía en todos. Pero yo no. Pequeña Uchiha.

- Ay pero que incordioso. Ya te dije que no soy una Uchiha. -me cruze de brazos molesta.

- Eres una mestiza muy rara. Pero aún así no confío en ti.

- Prefiero mejor "pequeña Uchiha". Por que no me dejas sola? Los aldeanos hablarían de que estas con una chica rara.

- Que te hace pensar que dejaría que anduviera sola por la aldea?

- Tobirama sensei! -hablo un chico atrás de nosotros. - Lamento interrumpirlo pero llevamos esperándolo mucho tiempo en el campo de entrenamiento.

- Lamento hacerlos esperar Hiruzen, me habia olvidado que los cité. -me miró a mi- Me tengo que ir, pero no te dejaré sola por mucho tiempo.

- Si no fueras tan serio esas palabras sonarian más bonitas. -me rei. El solo gruño con enojo.

- y esta chica  Tobirama sensei?

- No te preocupes por ella Danzo. -me miró por última vez- No causará problemas.

Sin más que decir se fue con sus alumnos. Yo no le di importancia a sus palabras y seguí mi rumbo caminando para encontrar ese preciado "obsequio". Miraba al frente sin prestarle atención a los susurros de las personas. Mi atención se desvió en cuanto vi una cabellera rubia y apenas notar la punta de la capa negra. Fue un flash que logre ver. Pero en ese momento que me distraje choque con una persona, alta e impresionantemente fuerte.

- Auch. -me sobe la nariz- no sabes por donde vas?

- Que caracter tienes niña estupida. -esa voz hizo que un escalofrío recorriera mi espalda.

- Tu eres el que se puso enfrente mío. -sone firme.

- Eres una niña muy mal educada.

- Niña? Cuantos años tienes ansiano? -dije con burla provocando que frunsa el seño.

- Mira niña. -levanto mi mentón- nadie me habla de esa forma. -quite su mano rápidamente.

- No me toques. -lo miré enojada- que quieres? No creo que haya sido coincidencia que te pusieras enfrente de mi camino.

- ja! -se rio- Al parecer tienes un caracter único. -agarro mi cintura atrayendome a el- Que hermosa eres. -llevo una de sus manos a mi mejilla acariciandola con su pulgar.

- Estas jugando con fuego Madara Uchiha.

- Entonces quiero quemarme contigo. -se hacerco más a mi rostro. Yo estaba en shock y no podia moverme- Que interesante mujer resultaste ser.

- Disculpa? -me soltó de inmediato y desapareció sin decir más nada.- Que extraño es ese sujeto.

Segui caminando pensando en el extraño encuentro que tuve con Madara mientras pensaba en eso no me di cuenta de que estaba entrando a un callejón. Me topé con la pared de este y cuando estaba por darme vuelta unos hombres me tenian acorralada.

- Pero miren nada más la preciosura que tenemos aquí.

- Genial. Imbesiles. -hable con fastidio.

- Como nos dijiste?! -grito otro de esos patanes.