Me dueles

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Pov callie

Comienzo a temblar, mi sangre se vuelve hielo, los huesos me duele y siento mi piel arder.
¿Así duele el amor? Me pregunto. Jamás lo sentí.
Comienzo a ahogarme en llanto, ni siquiera pude prevenirlo, solo debo dejarlo salir.
Corro despavorida al baño y allí me quedo encerrada en uno de los cubículos durante no sé cuánto tiempo porque allí dentro es como si los minutos corrieran a paso lento. Pero creo que he estado aquí bastante tiempo ya que me fueron a buscar.

-¿callie? ¿estás aquí? (Oí decir desde el cubículo).

No respondí pero creo que mis inevitables sollozos me delataron.

-callie sé que estás aquí, acabo de oírte, sal por favor (volví a escuchar a esa voz decir)

Resignada me asomo a la puerta y trató de limpiar mi rostro con la manga de mi camisa rápidamente. Y al salir es Erika quien se encuentra frente a mí, observandome extrañada.

Erika: ¿Qué es lo que ha sucedido? (Pregunto observando el desastre que dejó aquel llanto en mi rostro)
Callie: nada (conteste cortante)
Erika: ¿y ese "nada" es el causante de tu llanto? (Volvió a preguntar)

Yo solo me mantuve en silencio.

Erika: ven acompañame (dijo tendiéndome la mano)

Estaba teniendo la mano al diablo, lo sabía. Pero me sentía tan mal que no sabía qué carajos hacer, así que acepte y fui con ella.
Me llevó hasta su despacho, me pidió que me sentara y luego me ofreció un vaso de agua.

Erika: ten, bebe (me dijo mientras me acomodaba del otro lado del escritorio)
Callie: gracias (conteste con la voz débil mientras bebía un pequeño sorbo de agua, mis labios estaban irritados)
Erika: ¿vas a contarme que te sucedió? (Insistió en preguntarme)
Callie: nada, solo... problemas (contesté con la mirada gacha)
Erika: puedes hablarme de ellos, estoy aquí para escucharte (dijo mientras entrelazaba sus manos)
Callie: ya no eres mi psicóloga (conteste sin poder evitarlo)
Erika: lo sé, de igual forma.. quisiera ayudarte (me observo)
Callie: no puedes, olvídalo (la observé unos segundos)
Erika: es por esa secretaria ¿no? (Dijo observandome detenidamente)
¿Arizona? (continuo)

Al oír aquello no sabía qué contestar. ¿Cómo es que sabía por qué estaba triste? Oh no, esto no está nada bien.

Erika: ¿es así? (Insistió)
Callie: ¿cómo..(interrumpe)
Erika: simplemente lo sé todo, deberías tener más cuidado con quién te observa en el parque ¿sabes? (Me dijo indiferente)
Callie: ¿Nos viste en el parque? (Pregunté sorprendida)
Erika: así es, pero tranquila... no diré nada (dijo seria) ¿es algo pasajero o formal? (Siguió preguntando)
Callie: yo... no lo sé (respondí)
Erika: ¿no lo sabes? (Pregunto está vez)

La observé.

Erika: ¿la amas? (Volvió a preguntar)
Callie: eso ya no importa (dije cabizbaja)

Ella me miró y suspiro.

Erika: algo malo tiene que haber pasado para que te encuentres así call (dijo observandome)

Siempre odie que me llamara así, me trae malos recuerdos. Aún así veo que no desiste en dejar de llamarme así.
Si supiera que ella es la principal causa del problema, esto es una mierda. Preferí mejor quedarme callada, no quería embarrar la situación más de lo que ya estaba.

Erika: bueno... quiero decirte que cualquier cosa que necesites, hablar con alguien o lo que sea... yo estoy (dijo sonriendo)
Callie: gracias (dije observandola)
Erika: de nada. Debo seguir trabajando, pero antes que me olvidé... la directora Catherine quiere verte, esto de lo que hayas ausentado de clases la preocupó y quiere hablar contigo, lo lamento (dijo)
Callie: está bien, no te preocupes. Gracias por la charla y el agua (dije mientras me levantaba de la silla)
Erika: no hay porque, adiós (dijo sonriendo, siempre le salía bien)
Callie: adiós (dije y me fui)

Mi tía Catherine me busca, mierda.

Salí del despacho de Erika y nerviosa y con miedo me dirigí al de mi tía.
¿Qué me diría? Espero que no esté enfadada por las faltas a mis clases y por haber desaparecido por unas horas hoy. No quiero problemas pero creo que ya los tengo.
Llegó a su despacho y golpeo la puerta, de inmediato contesta con un "adelante" desde adentro.

Callie: permiso tía, aquí estoy (dije entrando)
Catherine: callie (dijo dejando las cosas que hacía y observandome a través de sus gafas) toma asiento por favor (dijo señalando el sofá frente a mí)

Me senté, me cruce de brazos y esperé para escuchar lo que tenía para decirme.

Catherine: te he citado aquí porque de verdad estoy preocupada por ti. Has bajado tus calificaciones, tienes muchas faltas y hoy desapareces por horas sin dejar aviso ¿qué ocurre contigo? (Pregunto observandome)
Callie: nada, yo solo.. no es anda (respondí)
Catherine: no me mientas, algo te sucede, sino no estarías de este modo. Puede contame (me dijo)
Callie: no es nada importante, de verdad (que podía decirle)
Catherine: ¿tienes algún problema con alguien? dime por favor, puedes decirme cualquier cosa (insistió)
Callie: problemas conmigo misma, en verdad no puede ayudarme, pero prometo tratarme (dije)
Catherine: está bien, si tú lo dices voy a creerte, pero voy a pedirte por favor que vayas a gabinete, que trates de levantar tus calificaciones y que dejes de faltar, eso no hace más que perjudicarte (me dijo seria)
Callie: lo sé, lo siento (respondí)
Catherine: bien, tiene clases ahora así que vuelve allí, luego hablaremos (dijo )
Callie: está bien , gracias tía (dije mientras me levantaba del lugar y salía de allí)

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Ya eran algo de las 11 pm, se suponía debería estar acostada durmiendo pero no podía conciliar el sueño, tenía demasiadas cosas en la cabeza como para dormir.

Así que para no despertar con mis vueltas en la cama a las chicas quienes ya dormían, decidí salir a tomar un poco de aire al balcón, ya que afuera no podría salir.
Me coloqué la bata, las pantuflas y salí.
De camino al balcón puedo ver perfectamente que está vez no está deshabitado y solitario como siempre, sino que está vez Arizona está allí apoyada con la vista hacia la oscuridad de la noche.

¿Por qué tiene que pasarme esto a mí?

No pude detenerme y continúe caminando hasta ella, cuando de pronto notó mi presencia.

Arizona: ¿que haces aquí? (Pregunto observandome algo desprevenida)
Callie: solo.. salí a caminar y pensé en venir aquí, pero veo que el lugar está ocupado (dije comenzando a sentir nuevamente aquel nudo en la garganta)
Arizona: deberías estar durmiendo, no vagando por los pasillos (dijo seria)
Callie: no puedo dormir (dije sin más)

Ella se volteo a ver el cielo nocturno nuevamente y nada respondió.

De pronto un silencio invadió el lugar, yo no podía dejar de pensar en ella besándose con su esposo, estaba matandome por dentro lentamente.

Callie: ¿volviste con él? (Pregunte sin más)
Arizona: ¿Qué? (Dijo volteando a verme sin entender)
Callie: ¿Volviste con tu esposo? (Volví a preguntar pero está vez más claro)
Arizona: no es algo de lo que y tenga o deja hablar contigo ¿no te parece? (Dijo irritada)
Callie: necesito saberlo (mi voz se desmoronaba con cada palabra)

Ella solo me observó.

Me acerque a ella dejándola aprisionada contra la pared y pegada a sus labios le pregunte.

Callie: ¿Me has olvidado? (Podía sentir perfectamente sus ritmo cardíaco)
Arizona: callie.. ¿que haces? sal de aquí (dijo que tratando de sacarme de encima pero no lo logró)
Callie: ¿ya no me quieres? (Volví a preguntar sobre sus labios)
Arizona: suéltame (sonaba agitada)
Callie: ¿ya no extrañas mis besos? (Dije observando sus labios con deseo)

La extrañaba tanto, tanto que no pude evitar besarla.

Un beso que duró segundos, ya que ella me apartó de inmediato y entre una mirada de descaro me abofeteó.

Arizona: no vuelvas a hacer eso, jamás (dijo clavándome su mirada en el pecho como una estaca)

Debo decir que preferiría la mismísima estaca, a el dolor de sentir aquella mirada suya sobre mí....

Cuando Amarte no sea PecadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora