Silencio +18 - Gavi

Tensión

Al final todos se habían ido de fiesta y yo me había quedado en mi habitación.

Mi nueva habitación.

Había aprovechado para recoger mis cosas cuando todos se habían ido a la fiesta y ahora eran pasadas las doce de la noche y yo estaba en mi cama, mirando el teléfono, muerta del asco, triste y con ganas de tirarme por la ventana.

Eric quería conquistarme de nuevo y Gavi creía que yo había vuelto con él.

No.

Todo estaba jodido.

Y ni siquiera sabía que hacer.

Quería a Eric, a pesar del dolor.

Pero mi corazón daba saltitos cada vez que Gavi sonreía o simplemente pasaba por mi lado.

Estaba mirando instagram cuando una llamada entrante de Nadia me sobresaltó un poco.

Me senté en la cama, incorporándome y lo cogí.

- ¿Nadia? -pregunté.

Se escuchaba la música y un montón de ruido de fondo.

- ¿Val? creo que tienes que venir, Gavi.. -empezó a decir, casi gritando.

Se escuchó un montón de ruido de repente, a Nadia gritar algo.

Luego otra voz.

- Ángel, no estás aquí, te estoy buscando, Nadia dice que me quieres, yo te quiero, ¿dónde estás? -lo dijo todo de forma atropellada, iba totalmente borracho.

Otra vez un montón de ruido.

- Ya le has oído tu misma, lleva toda la noche buscándote y al no encontrarte se ha agobiado y lleva una hora pidiéndome tu número de teléfono. -explicó Nadia.

- Voy hacia ahí. -aseguré.

Colgué un segundo después y salí de la cama.

Maldito niño.

Me vestí con lo primero que encontré y bajé a recepción.

- ¿Dónde están los coches del equipo? -pregunté al chico que estaba en el mostrador.

- No hay ningún chófer disponible ahora, pero hay un coche enfrente si tienes el carnet. -puso la llave encima del mostrador.

- Perfecto, gracias. -cogí la llave y casi corrí hacia el coche.

Era uno de los coches negros que usaban ellos siempre, así que me metí y arranqué hacia la ubicación que Nadia me había mandado.

Yo no habría hecho esto por nadie.

Y sin embargo, lo estaba haciendo por él.

Sabía que estaría bien en la fiesta, que incluso podría encontrar alguna chica con la que pasar el rato.

Pero él se había pasado la noche buscándome, a pesar de estar cabreado conmigo por lo de antes.

Llegué un rato después y al aparcar, vi a Nadia con Gavi colgado de su brazo.

Le hice una seña y ella lo llevó hasta la puerta del copiloto.

- ¿Estaréis bien? -preguntó mirándome a mi.

- Me encargaré de él, no te preocupes. -aseguré.

Ella asintió y volvió dentro.

Gavi me miró cuando yo arranqué de nuevo.

- ¿Te he dicho alguna vez que eres preciosa? porque creo que tendría que decírtelo más. -murmuró liándose con las palabras.

- Estás borracho. -hablé mirando la carretera.

- Y tu muy guapa. -sonrió y me hizo sonreír a mi.

- Gavi.. -murmuré cuando colocó su mano en mi muslo de repente.

La dejó ahí, sin moverla, pero yo ya me estaba poniendo nerviosa con solo su contacto en mi piel desnuda por los pantalones cortos que llevaba.

- Yo sé que has vuelto con Eric, porque le quieres a él, pero Nadia ha dicho que también me quieres a mi, ¿sabes que yo te quiero? te vi en la grada y pensé, ella va a ser mía, pero tu no quieres. -hablaba lento y moviendo mucho la mano.

- No he vuelto con Eric. -aseguré.

Esas simples palabras parecieron despertarle un poco, como si el alcohol se hubiese esfumado durante unos segundos.

- ¿Entonces me quieres? tengo una oportunidad. -murmuró.

- No puedes preguntarme eso ahora.. -murmuré agobiada.

- ¿Puedo quedarme contigo esta noche? -preguntó.

- ¿Por qué haces tantas preguntas? -pregunté yo riéndome.

- ¿Y por qué no me las contestas? -volvió a preguntar y yo solté una carcajada.

- Puede que empiece a quererte, solo un poco, y sí, puedes quedarte conmigo esta noche, pero vas a dormir en el sofá y a darte una ducha antes. -lo miré unos segundos y él sonrió, triunfante.

- Estás preciosa cuando te enfadas conmigo. -murmuró y cerró los ojos.

Oh dios, esto iba a ser más difícil de lo que pensaba.

Conseguí subirlo hasta mi habitación y di gracias de que tuviese bañera en vez de ducha.

La llené y él se desvistió.

Me atraganté con mi propia saliva cuando también se quitó los calzoncillos y caminó hacia mi.

Pretendía ducharle con ropa interior y ahorrarme eso.

Joder.

Le ayudé a sentarse en la bañera y me arrodillé a su lado, dándole el bote de jabón.

Ninguno de los decía nada, y yo veía como sus ojos se iban aclarando y su mente iba procesando lo que estaba pasando.

- ¿Valeria? -llamó mi atención.

- Dime. -lo miré, apoyada con los codos en la bañera.

No contestó, tiró de mi con fuerza y terminé metida en el agua, mojada por completo, sentada entre sus piernas.

- Te voy a matar. -murmuré intentando no matarlo de verdad.

Giró un poco mi cabeza y nuestras bocas quedaron a pocos milímetros, nuestros alientos entremezclados.

Dios.

La temperatura del baño subió, me quemaba el cuerpo, todo.

- Admite que no sientes la tensión, admite que no quieres quedarte aquí conmigo y que mis manos recorran tu cuerpo, admite que no piensas en mi durante todo el día, admítelo Valeria, quiero escucharte. -habló y sus labios rozaron los míos, estremeciéndome por completo.

- No puedo admitir eso. -murmuré.

No podía.

No podía, porque quería que hiciera todo eso, pensaba en él durante todo el maldito día y me moría porque sus manos me tocasen en ese momento.

- ¿No? -preguntó, aun sobre mi boca.

Me estaba matando.

- No.

- Dime que necesitas, ángel, aunque sea solo ahora mismo y mañana deje de ser así, pero tengo la cabeza muy clara ahora mismo y necesito escucharte. -pidió.

¿Qué necesitaba?

¿En ese momento?

Estaba muy claro.

- A ti, te necesito a ti ahora mismo. -murmuré casi jadeando por lo nerviosa que estaba.

- Joder, ángel. -murmuró justo antes de que su lengua lamiese mi labio inferior y un segundo después nuestras bocas se unieran en un beso rápido, mojado y más que necesitado.

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el próximo capitulo es muuuy +18, estad listitas, JAJAJAJA

y no ha acabado aun el drama, avisadas estáaaais

PERDON POR SUBIRLO TAAARDEEE ESTOY DE GIESTAA, ME HAN LIADOOO CHIQUIS