Homer, Alaska. Estados Unidos.
Actualidad.
Olivia.
─ La cosa se está complicando más de lo que nos esperábamos ─ dice Enzo con preocupación mientras hacemos la videollamada que tanto tiempo llevo atrasando por miedo a lo que me fueran a decir. Llevan días buscando y buscando y no encuentran nada, ni con el programa que les dejó preparado Alexei antes de venirse hace unos días ─ No hay nada ni nadie que tenga algún tipo de relación ni con Igor ni con Dante. Todas las personas civiles y militares que trabajan o han trabajado en la central están fuera del caso, todas. Quien sea es un puto fantasma que ha sabido guardarse las espaldas demasiado bien porque no conseguimos dar con él.
Conozco todas las facetas de Enzo y por como está sentado e intentando no moverse sé que quiere aparentar cierta tranquilidad que no tiene, pero no es así ni por asomo, le conozco demasiado bien como para que se crea que no lo notaré. Justo a su derecha está Pablo con la misma expresión pintada en la cara y me temo que los demás deben de estar moviendo cielo y tierra para continuar con la búsqueda mientras tanto.
─ Esto es absurdo ─ se queja Dom enfadado ─ Tiene que haber algo por muy mínimo que sea que delate a alguien. Nadie es tan bueno para esconderse así de bien durante tanto tiempo, tiene que haber algún error que haya cometido... tiene que tener algo, nadie es tan perfecto.
─ No hay nada. Ni fallos, ni errores, nada. La persona ha sabido jugar bastante bien con nosotros durante todo este tiempo y ahora lo hará más todavía porque tiene que saber que lo estamos buscando ─ es el turno de Pablo de hablar y le noto demasiado tenso ─ Le hemos solicitado a Michael permiso para empezar a investigar a los peces gordos... ya, aparte de ellos, no nos queda nadie más que investigar.
─ Creo que la mejor opción para toda esta mierda es que vuelva a la central y que el mismo topo se auto destruya al querer dar la noticia a sus superiores ─ digo y parece que acaban de ver al mismísimo diablo, aunque para muchos, si que soy el mismísimo diablo ─ Antes de que digáis nada, que no se os olvide como están los rangos aquí porque no pienso aceptar lo contrario en estos momentos. Nunca os he tratado como tal porque os considero de mi familia pero no olvidemos los roles de mando y que cuando os mande una orden tenéis que obedecer y esto es justo lo que vais hacer, obedecer. En menos de una semana, volveremos si no habéis conseguido encontrar nada con los superiores porque no puedo seguir escondiéndome de esta manera, no soy ninguna cobarde y pienso plantarle cara a quien se me ponga por delante.
─ No debemos tomar decisiones tan precipitadas ─ empieza a explicar Enzo pero le corto porque no pienso escuchar un no por respuesta.
─ No hay nada más que decir respecto al tema ─ sentencio y veo como aprieta su mandíbula con fuerza aguantando lo que haya querido decirme ─ Si en una semana no obtenemos respuesta alguna, volveremos y las buscaremos de otra manera porque así estamos perdiendo el tiempo.
Alexei no ha abierto la boca en ningún momento y eso sólo puede significar que esa peculiar cabecita suya está pensando. Que piense, que nunca se equivoca y seguro que está planteando opciones de volver.
─ No hablo contigo como soldado, hablo contigo como amigo tuyo que soy ─ vuelve ha hablar Enzo con preocupación en la voz ─ Te están buscando criminales de todo el mundo para llevarte con Igor y a saber que putas intenciones tiene ese desgraciado contigo, Piccolina.
─ Ninguna buena ─ interviene Pablo enfadado. Hacia tiempo que no le veía así pero nos estamos quedando sin tiempo y sin opciones.
─ Si vuelves, no van a parar de buscarte hasta que den contigo porque han puesto una buena recompensa por ti ─ Enzo continúa hablando pero no conseguirá convencerme. Soy consciente de lo que pueda llegar a pasarme si hago todo esto pero no puedo seguir escondida y viendo como ellos no paran de luchar y como veo la vida pasar mientras tanto, no puedo porque no soy ese tipo de persona ─ Los italianos no creo que estén muy unidos a los rusos pero si que están igual de locos y, puedo asegurarte, que también irán a por ti para demostrarle a Igor que contra ellos no puede nadie. Olivia, por favor, piensa bien lo que quieres hacer y los peligros que conlleva porque una vez que todos se enteren que estás viva ya no habrá marcha atrás.
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COMANDO
ActionSoy Olivia González, Teniente Coronel de la Élite de las Fuerzas Especiales a nivel mundial e Ingeniera jefe en el ejército de Estados Unidos. A mis 27 años dirijo el comando más peligroso y letal del mundo y no puedo sentirme más orgullosa por ello...