COMANDO

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Rota - Jerez de la Frontera, Cádiz. España.

Actualidad.

Dominick.

─ ¡Es mi mujer la que está en esa puta habitación! ─ le vuelvo a gritar al gorila gilipollas que han puesto en la puerta de la planta donde están hospitalizados Oli y Alexei.

Al anterior lo tumbé de un puñetazo porque consiguió hacerme perder los papeles por completo y con este me está empezando a pasar exactamente lo mismo como no me deje hacer lo que llevo días intentando. En cada puerta de este puto hospital hay un gorila asignado, ya he conseguido dejar atrás a 3 pero con este lo tengo más complicado porque la puerta está cerrada desde dentro... aunque le pegue la paliza de su vida, esa puerta no se abrirá.

─ Voy a entrar quieras tú o no quieras, te estoy avisando, gilipollas. Así que, yo que tú iría llamando ya a quien sea para que me abra esa puta puerta ─ me vuelvo a quejar histérico.

El imbécil ni siquiera me mira cuando le hablo y me está poniendo de peor humor del que ya estoy. Llevo 5 días sin verla, 5 putos días en los que lo único que recibo son vagas noticias de que están bien pero que no van a dejar que nadie entre por su bienestar y protección. Estoy harto y hasta aquí ha llegado mi puta paciencia porque quien mejor que yo para darle ese bienestar y esa protección, joder.

─ Dominick, tranquilízate, que todos queremos verles tanto como tú ─ se queja mi hermana a mi espalda con Damien pegado a la suya ─ Tranquilízate, por favor, así no conseguirás nada. Este hombre está cumpliendo con su trabajo, no le eches la culpa.

─ ¿Pero cómo quieres que me tranquilice? Tengo a mi mujer al otro lado del pasillo, sabe Dios en que estado, después de que varios... enfermos la violaran y torturaran durante horas... ¡¿Cómo cojones quieres que esté!? ¡Me estoy volviendo loco y que él no me deje pasar no ayuda! ─ le grito a mi hermana.

─ No le grites a tu hermana ─ me gruñe Damien interponiéndose entre ambos. El muy imbécil se piensa que aunque esté a punto de perder el control le voy hacer algo a Emm... menudo gilipollas ─ No consigues absolutamente nada. Ya nos han dicho que ambos están despiertos y que están bien después de realizarles mil millones de pruebas médicas y de cerciorarse de que están correctas. No están solos puesto que están en la misma habitación y se tienen el uno al otro, relájate, pronto nos dejarán pasar.

─ ¿Cómo estarías tú si fuera ella la que estuviera en su situación? ─ le reto a Damien mirándole con ira a los ojos. Estaría tan histérico y enfadado como estoy ahora mismo yo, eso seguro.

─ Dom... Damien tiene razón ─ se queja mi hermana pero está vez con más calma y poniéndose entre ambos ─ Está bien.

Damien se me queda mirando pero no dice nada, creo que me acaba de entender con lo que le acabo de decir y por ello se queda callado. Chico listo.

─ Podrá estar bien físicamente pero mentalmente debe de estar destrozada, deben de estarlo ambos ─ me quejo por primera vez en alto y dejando de lado lo que sea que está pasando con Damien ─ Y me aterra dejarla sola en estos momentos cuando sé que me necesita. Ella no me hubiera dejado solo, hubiera entrado a puñetazos... y mírame a mí, en la puta puerta a pocos metros de distancia de ella y no he sido capaz ni de entrar.

Olivia es una mujer muy fuertes pero, incluso la más fuerte de todas, no puede evitar venirse abajo después de sufrir una múltiple violación aunque hubiera estado inconsciente y no llegue a recordarlo bien del todo... ninguna mujer sale completamente bien después de eso y mi mujer lo ha sufrido y está sola pasando por toda esta mierda en una puta habitación de hospital sin mi. Me rompe el alma pensar en como abusaron de su cuerpo... de como abusaron de ella sin que pudiera hacer nada... Como la tocaron y golpearon a su antojo. No sé que sucedió cuando llegó Alexei ni lo que les obligó hacer... todavía desconozco esa parte pero seguro que tampoco se los hicieron pasar nada bien y es algo que se le suma a toda esa mierda.