Capítulo 13

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-Me enteré lo que sucedió -Naruto giró su mirada a la ventana, afiló sus azules -vaya, sigues con vida -Itachi volteó los ojos con fastidio -¿por qué no sería así? -el rubio lo ignoró, habían pasado años en los que el Uchiha pasaba esporádicamente por su departamento, continuó afilando sus kunais -sólo quiero pedirte tener piedad con mi otouto -el rubio suspiró con fastidio -hablé con él, le dije que no lo molestaré porque es tu hermano y su madre me agrada.

Itachi sonrió ligero -¿aún sigues visitando a madre? -el rubio asintió -me hace sentir bien recibido, aunque sólo lo hago en las mañanas mientras las clases transcurren para no molestar -Itachi asintió -tal vez ahora que son equipo puedas presentarte en casa como Naruto-

El rubio lo vio como si fuera idiota, el Uchiha apretó el ceño -olvídalo, no quiero perder lo poco que tengo -Itachi asintió, podía entender su miedo -bueno, sólo… -Naruto levantó el dedo medio -vete, sólo viniste a procurar a tu hermano, lo entiendo -Itachi negó con fastidio, salió de ahí, aunque sí era verdad. El rubio levantó el rostro con añoranza, tenía diecisiete años, obviamente nunca llamaría su atención, el Uchiha no es gay como él, vio su kunai con cuidado, últimamente despertaba deseos, se sentía sólo, a pesar de portarse bien con el anciano no le permitió al sensei de su papá regresar, no había podido interceptar al sapo mensajero, desaparecía con velocidad, hace años se había resignado.

….

Naruto se dejó caer, acababa de terminar de aprender un jutsu, respiraba con dificultad, sus pensamientos comenzaron a girar con velocidad, llevaba días sintiendo que la soledad lo ahogaba, analizaba seriamente, una idea rondaba en su cabeza con fuerza, no sabía si hacerlo, pero ¿qué podía perder?, tal vez sería una manera de tapar su soledad y divertirse, asintió, se levantó y fue a su habitación, había comprado un poco de ropa bonita, se cambió a un pantalón totalmente ajustado que remarcaba sus largas y torneadas piernas, así como su trasero, una blusa desenfadada color naranja, peinó su cabello en una coleta alta, con un henge cambió su color a un tono azabache, desapareció sus marcas, usó el sello para chakra para no ser descubierto, se puso perfume, se observó en el espejo, sonrió quedito, era más hermoso rubio, pero así se veía bien, el Uchiha era un idiota por no verlo, suspiró con fastidio, tomó las llaves de su departamento, salió del lugar.

Su departamento se encontraba en la zona roja, caminó unas calles a la zona de bares, mordió sus labios con algo de ansiedad, entró observando el lugar, tenía fama de bar gay, se sentó en la barra pidiendo un poco de sake, le entregaron una pequeña botella individual y un platillo, de inmediato alguien se sentó a su lado, giró sus enormes azules observando, levantó su ceja con una sonrisa, era alguien bastante guapo -¿quieres bailar hermoso? -Naruto sonrió de lado siendo coqueto -sí quiero -el sujeto tomó su mano, jaló de él, el mayor colocó las pequeñas manos en su cuello y él sostuvo al rubio ahora azabache de la cintura uniendo su cuerpo al suyo -no te había visto por aquí, pareces un poco joven -el rubio mordió sus labios -tal vez sólo tengo veintiún años, ¿te molesta? -el Castaño negó con una sonrisa de lado mordiendo su palillo -ya eres legal cariño-

Naruto rio con diversión dejándose llevar por la música -¿cómo te llamas? -el shinobi giró su palillo senbon en sus labios -Genma ¿y tu hermoso? -el menor sonrió coqueto -Naruko -las manos del mayor acariciaban su cintura con sus pulgares, comenzaron a tomar y ponerse más cariñosos, reían con diversión disfrutando la noche -robaré un beso -el rubio lo vio con sorpresa, sonrió coqueto -?qué estás esperando? -los labios del mayor dejaron el senbon de lado, besó con deseo al pequeño quién lo seguía a su paso, sus grandes manos bajaron apretando su trasero con descaro mientras se besan bastante prendidos -vámonos a mi departamento -Naruto simplemente se dejó guiar por Genma, quería ser deseado y desaparecer esa soledad que cada vez lo asfixiaba más.

El infantil y el bravucón (Itanaru)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora