Por la tarde el sensei salió de la mansión, Mikoto amablemente lo había invitado a comer y a platicar mientras el rubio descansaba y Sasuke salía a entrenar al jardín, ya era oscuro cuando el rubio sintió una mirada, abrió lentamente sus gemas, aún le dolía el maldito cuerpo de la golpiza, hizo un gesto de dolor, la luz se encontraba apagada, parpadeó tratando de adaptar su vista, giró sus azules hacia donde sentía esa intensa mirada, unos onix lo veía con cuidado, lo revisaban un poco descarados, el rubio levantó una ceja -¿te gusto? -Itachi sonrió divertido -¿te sientes mejor? -Naruto apretó el ceño con dolor -me duele todo el maldito cuerpo, supongo pasó el efecto del calmante -Itachi giró su mirada viendo la pastilla y un vaso de agua en una charola, se acercó, le llevó el medicamento, Naruto de inmediato lo tomó.
-Te dormiste sobre la manta, te ayudaré a entrar en la cama -el menor lo vio con sorpresa, el mayor lo cargó con delicadeza, lo metió en la cama con cuidado, acomodando la manta sobre él, el rubio sintió su aroma embriagante con intensidad, le encantaba su aroma a bosque, por un segundo cerró sus gemas tratando de ignorar esa sensación que le provocaba. Itachi había pasado por ese mismo efecto, su olor a vainilla desde ayer no podía sacarlo de su mente, respiró hondo tratando de calmarse, la tensión entre los dos era evidente, pero ninguno quería reconocerlo en voz alta.
-¿Puedo saber que hacías vagando en la noche?, no es normal en ti pasear con tu apariencia por la noche, generalmente tus peleas eran de día -Naruto mordió su mejilla con ansiedad -sólo quería dar una vuelta, me sentía un poco asfixiado en mi departamento -Itachi lo vio con curiosidad, sacó de su estuche un palito con dangos, Naruto sonrió divertido, los tomó, comenzó a comerlo con calma. El Uchiha se sentó a su lado en la cama comiendo el suyo -tu mamá se enojará porque no son sus dulces -Itachi sonrió -no dirás nada o no pasaré más contrabando -el rubio rio con diversión -¿ahora eres tú quien amenaza? -el mayor sonrió ligero -aprendí del mejor, eres un buen maestro de la manipulación y el engaño, tomé algo de ti-
Naruto sonrió, se puso serio por un momento, recordando su vida de mierda -fue la única manera que encontré en poder obtener algo para mí, en el orfanato el acoso de los niños era constante, la matrona los incitaba para acosarme, un día me cansé, comprendí que así funcionaba la vida, así que tomé el control de los niños del orfanato -Itachi lo vio con sorpresa -me temían, hacían lo que yo quería, la matrona me corrió porque vio que no podía ya acosarme, había intentado lastimarme, pero amenacé a los niños, sino me protegían la pasarían bastante mal, así fue como terminé en la calle, ahí fue diferente, en cuanto di un paso en la calle los golpes llegaron, era pequeño, no podía defenderme, así que huí al bosque, cuando el anciano me encontró comprendí que tenía el apoyo de alguien importante, sólo debía ganármelo y convencerlo de que era alguien inocente, cada que tenía oportunidad iba y me refugiaba en él, soy consciente que él pudo haberme dado una mejor vida, soy el hijo del cuarto Hokage, de la princesa del remolino -
Itachi asintió de acuerdo -el desgraciado hace como que me ayuda con mi propio dinero, no le debo nada, él me debe todo, por eso me ayuda, siente cargo de conciencia y yo me aprovecho de ello, al inicio creí que Kakashi iba por el mismo camino, con el tiempo me di cuenta que en verdad le importaba, por eso comencé a tener más confianza con él-
-En la academia fue lo mismo, quisieron sobajarme al inicio, tuve que crear una era de terror para esos estúpidos, los únicos libres eran las chicas que básicamente vivían en su mundo, Shikamaru que es el único amigo de mi edad, sabe que soy un maestro de la manipulación, así me acepta y por último Sasuke porque es tu hermano, en el lugar la mayoría me temía, tuve que golpear a varios y no me arrepiento, tal vez no ha sido la manera correcta, pero fue el único modo de sobrevivir que encontré.
Itachi sonrió ligero comiendo un nuevo dango, el rubio vio que terminó el suyo, levantó un leve puchero, giró su mirada pícara, el Uchiha comía con emoción su dulce, en un descuido por disfrutar su dulce, Naruto arrebató el último dango del mayor, lo metió en su boca con velocidad, Itachi abrió sus onix demasiado -sabes que eso puede causar un conflicto entre ambos, ya ha sucedido antes -
El rubio lamió sus labios mientras masticaba -atrévete, estoy lastimado y Mikoto-san está a dos habitaciones de aquí -el azabache afiló su mirada, infló su mejilla sintiéndose nuevamente infantil a su lado, además, sabía que era verdad -no te traeré más dulces -Naruto volteó los ojos -¿enserio otra vez?, sólo fue un dango, no seas infantil, sé que tienes más o una caja de pockys en tu estuche, puedo olerlos-
Itachi sonrió divertido, sacó sus pokis, comenzó a comerlos. Naruto apretó el ceño -¿en verdad no me darás?, ¿qué diría tu anikii si sabe que eres un infantil de primera? -el Uchiha disfrutaba su dulce -no te creería, soy el muro de hielo de la aldea -el menor soltó una carcajada -eres el muro infantil de la aldea, dame no seas envidioso -tomó la mano del mayor, comió el poki en su mano -¿sabes que estaba chupando ese dulce? -Naruto sonrió coqueto masticando el dulce -un beso indirecto del galán de la aldea, que sexy -Itachi sonrió divertido, sacó un segundo pocky, lo devoró de inmediato. Naruto soltó una carcajada, por fuera de la habitación pasaba la señora Uchiha escuchando la conversación de ambos, escuchaba con sorpresa como el rubio y su hijo reían, ¿coqueteaban? se desconcertó un poco, pero sonrió al escuchar de esa forma a su hijo, creyó que no tenía amigos, cuando se enteró de su amistad con el rubio no estaba tan segura, pero ahora veía que era verdad.
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El infantil y el bravucón (Itanaru)
Romance-porqué siempre debes comportarte de está manera, tan infantil?... no siempre lograrás salirte con la tuya... -Naruto apretó el ceño sintiéndose atacado, quién demonios se creía?, se puso rojo de coraje y explotó... -talvez porque soy un niño maldit...