Caso 97.

Trece.

Todos alguna vez tuvimos que sentir un gran dolor en el pecho, un nudo en la garganta y la conciencia que nos trataba de decir "tranquilo debe ser falso" pero había muchas evidencias que determinaban lo contrario.

Así me sentía yo...

El pecho me dolía demasiado, al ver ese puto video que me había mostrado Soo-hyang.

La decepción era tan grande... Ver a ji-a matar a Choi beom-su era asquerosamente terrorífico, ver cómo apuñalaba su cuerpo sin importarle nada, sin mostrar algún tipo de remordimiento..

— ¿D-de dónde sacaste eso?— pregunté a punto de soltarme a llorar.

Soo-hyang me miró con lástima y suspiró.

— ella misma me lo envió, ella me envió cada grabación de las cámaras de seguridad.— confesó y miré a Jimin quién estaba con los ojos llorosos.

— la linda, yang no haría eso..— susurró.

— ahí están las pruebas, deja de pensar que es una buena persona.— Tae-Hyung lo regañó mostrando seriedad y repulsión por ji-a.

Joder.

— yo.. Necesito volver a mi departamento.— necesitaba estar completamente solo.

— estás mal jungkook, no puedes manejar en ese estado.— Jimin estaba tan decepcionado como yo.. Pero él lo demostraba, yo me estaba controlando.

— estoy bien Park, háganse cargo de lo que tengan planeado, yoongi seguramente ya le aviso las autoridades..

— aún no, tú decides qué hacer… tú estás a cargo del caso.— comunicó Tae-Hyung y yo suspiré.— te daremos plazo hasta mañana para decidir que hacer, vigilaremos la casa de yang mientras tanto.

— bien.

— lo siento mucho, señor jeon.. Yo no quería arruinar su felicidad.— Soo-hyang hizo una reverencia, pero yo negué.

— no has arruinado nada, tranquila.— sonreí débilmente y salí lo más rápido posible de ese lugar.

Las lágrimas comenzaban a deslizarse por mis mejillas.

Solo quería que esto fuera una pesadilla.

††††††††

— jungkook, ¿Qué te sucede?.— llegué a la puerta de mi departamento destruido, joder, odiaba sentirme así.

Ahí estaba Jung seulgi parada con dos maletas en sus manos.

— Y-yo necesito estar solo.— con dificultad saqué del bolsillo derecho de mi chaqueta la llave y me acerqué a abrir la puerta.

— sé que me odias... Pero te ves mal.— mal momento para venir seulgi.

— vete.

— estás preocupándome, por favor jungkook.— la miré con seriedad y sus ojos negros se conectaron con los míos.

— yo.. No sé qué me sucede seulgi.

Era verdad, jamás me había sentido de esta manera, me sentía realmente mal, ni cuando vi a seulgi con otro me dolió tanto.

—¿E-es por.. Tu nueva pareja? — ella se mostraba preocupada.

— pasa.— la invité a pasar y lo hizo, ingresé detrás de ella y cerré la puerta.

— cuéntame, te escuchó.— volteó a verme y yo negué caminando hasta la cocina sacando de la nevera un par de cervezas y abrí la latita tomándola de golpe.— tú.. Jamás bebes jeon.— susurró y le di una pequeña sonrisa.

Le extendí una cerveza y saqué otra abriéndola y bebiendo.

Quería calmar esté dolor.. Quería librarme de esto.

— yo.. Fui muy estúpido..— confesé tranquilamente y las lágrimas de nuevo aparecieron.

“— te amo.. Mucho —"

— oye.. sé que te traté cómo una basura, pero vales mucho..— seulgi trató de consolarme y yo reí, pero pronto mis sollozos se escucharon por toda la cocina.

— ¿Por qué me hizo esto..? Joder, yo la amo.. La amo tanto.— sollocé y seulgi sonrió tristemente.

— tranquilo..— susurró y se acercó acariciando mi espalda tratando de consolarme.

Lloré y bebí hasta perder la conciencia, seulgi casi ni tomó, ella estaba más lúcida que yo.

††††††††††

— cuéntame..— insistió seulgi mientras me veía beber.

— me enamoré.. Ella era tan perfecta, ella era mi chica ideal.. seulgi, la amó pero ella.. Ella cometió algo imperdonable.

Estaba tan destruido.. Jamás me vi de esta manera.

— Y-yo vine a disculparme, deseaba verte y arreglar las cosas, han pasado tantos meses y me he dado cuenta de que no aproveché nuestro matrimonio, yo de verdad te amo Jungkook.— confesó con tristeza y yo reí sin gracia.

— y yo la amo a ella.— confesé.

— puedo demostrarte que he cambiado, yo puedo ser perfecta para ti, yo quiero ser la madre de tus hijos jeon Jungkook, yo quiero retomar lo que tuvimos.

No le prestaba atención a lo que me decía, estaba perdido en mis pensamientos...

Algo hizo clic en mi cabeza.

Ella tenía todo planeado.. Se acercó a mí dándome pistas falsas y enamorándome para no llegar realmente a la verdad, ella solo jugó conmigo.

Ella me mintió.. Todas sus acciones y palabras eran falsas...

Sentí unos brazos rodearme, abrazándome fuertemente.

— todo estará bien, Jungkook.— susurró.— eres fuerte y valiente... Ella simplemente no vale nada.

¿Por qué no sentía paz al tener a seulgi abrazándome?.. ¿Por qué no sentía esa paz que sentía cuando abrazaba a ji-a?

— ¿Quieres algo?.— vuelve a hablar y me niego.

— solo quiero dormir, puedes quedarte por hoy en la habitación sobrante.— me levanté del sofá listo para irme, pero seulgi me detiene.

— te juro, que te amo Jungkook..— susurró y pronto sentí sus labios contra los míos.

El alcohol comenzó a darme una mala jugada, cuando me separé de ella, no era seulgi.. Era mi linda, yang.

— te amo..— susurró nuevamente y la atraje a mí capturando sus labios, con tranquilidad hice un camino de besos desde sus labios hasta su cuello, sus manos se movieron con rapidez quitando mi chaqueta.

Mis manos desabrochaban los botones de su blusa con rapidez mientras la besaba desesperadamente, soltó un quejido cuándo me alejé de ella, quité con rapidez su sujetador y la observé a los ojos.

En estos momentos solo veía a la mujer qué amaba, esa linda chica de ojos miel, cabello castaño y un cuerpo que me volvía loco.

Mis labios repartieron besos por sus mejillas y labios cariñosamente, quité su falda con cuidado de lastimarla, ella desabrochó con tanta facilidad los botones de mi camisa y cuando la camisa dejo de cubrirme acarició mi pecho y abdomen.

— te haré sentir bien.— susurró para luego colocarse de rodillas frente a mi erección.

¿Qué estaba haciendo?.