Capítulo 15: Caza.

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Al siguiente día el chico de cabellos oscuros desapareció. Por lo que Ryan no pudo evitar preocuparse.

— ¿Has visto a Juxta? — El rubio preguntó, por cuarta vez aquella mañana, esta vez a Alicia.

El chico no había aparecido, ni siquiera para cumplir sus tareas diarias, eso solo hacía crecer su ansiedad al respecto ¿Le habría ocurrido algo?

— No, no vino a desayunar, pero eso es habitual en Jux— La chica de cabellos negros no le dio mucha importancia, mientras revolvía aquella salsa— De seguro salió de expedición o de casería.

— ¿Expedición? ¿Segura?

— Si ¿Por qué la pregunta? — Levantó la mirada por primera vez, notando que Ryan tenía una expresión preocupada— ¿Qué sucedió? — Preguntó seria.


En otra parte del campamento, Charlotte terminaba su clase, y enviaba a los niños a lavarse las manos para la hora de almorzar. No pudo evitar pensar en su hermano y en la mañana extraña que habían experimentado cuando borraba la pizarra. Sin contar la resaca horrible con la que despertó.

Pero ese no era el punto, apenas sus pestañas se abrieron, notó que el chico ya estaba vestido y sin decirle nada, se había marchado. Pensó que tendría alguna tarea extra que completar temprano y que se había quedado dormido o algo por estilo. Pero ni siquiera fue a desayunar junto a ella, lo que era extraño.

Sin embargo, no podía decir que no lo había visto del todo aquel día. Se lo había topado un par de veces, y su hermano parecía preguntarle algo a los chicos del campamento, algo de lo cual parecía no tener respuesta, porque seguía en la tarea de realizar sus interrogatorios. Quizás debería hablar con él y preguntarle el porqué de su comportamiento, pensó, saliendo del salón.

Se encontró a Leonardo en el pasillo, otro que actuaba extraño aquella mañana. No lo había visto ese día, ni a su usual saludo alegre de "buenos días", o su deseo de supervisar que todo fuera bien en el campamento.

— Leo ¿Cómo va tu día? — Saludó ella esta vez, amigable.

Más el chico no pareció oírla y siguió su camino.

Charlotte se sintió más que ignorada ¿Qué le pasaba a la gente hoy?

Dio la vuelta para ir a almorzar, molesta, pero no dio ni dos pasos cuando sintió un fuerte golpe a sus espaldas.

Volteó para encontrar la causa de tal estruendo.

— ¡Leo!

El chico se hallaba tirado en el suelo al final del pasillo.


En otra parte. Ryan no quiso hablar de más, y aun cuando Alicia insistió, no quiso contarle por qué buscaba al chico. Temía meterse en problemas con Juxta si abría la boca cuando no debía.

Revisó la armería, si lo que decía Alicia era verdad y Jux había salido a cazar, se habría llevado un arma. Por suerte, una de sus tareas de aquella semana había sido revisar el stock de aquel almacén, por lo que sabría si algún artículo faltaba.

Un rifle viejo había desaparecido, junto a una caja de municiones. Alicia tenía razón. Juxta había salido de cacería.

Suspiró algo más calmado, aunque eso no cambiaba el hecho de que el chico se encontraba solo en el bosque. Ese pensamiento lo carcomería todo el día...


En el pasillo. Charlotte pudo notar claramente que Leonardo estaba ardiendo en fiebre. La chica gritó en seguida por ayuda, mientras trataba de levantarlo, pero era muy pequeña para cargar el peso de un hombre prácticamente adulto. Por suerte Adam y Steve, quienes dormían en una habitación contigua tras terminar su turno nocturno, la oyeron y fueron a ayudarla.

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