Charlotte observó sus manos ensangrentadas, aun en shock, lizzy yacía en el suelo inmóvil, rodeada por aquel charco rojizo. Su pulso frío.
Esto había sido su culpa, no había sido capaz de protegerla...
¿Qué podía hacer ahora?
— ¡Luchar hasta morir!
Pudo oír a sus compañeros, mientras aún seguían combatiendo contra aquellas cosas. Es verdad, ellos aún no se rinden.
Divisó el depósito de gasolina, que Lizzy se había esforzado por apuntar antes de fallecer.
"Fuego" Recordó sus palabras.
Se levantó, no había podido salvarla, pero al menos cumpliría sus últimos deseos. Al menos sería útil.
Adam disparó su última bala, derribando a aquel Acechador. Steve aprovechó para decapitarlo, sus balas ya se habían agotado hace mucho, ahora ayudaba a los demás con un machete.
Leonardo fue derribado por dos criaturas, pero fue ayudado rápidamente por Ryan y Juxta. Ya era de noche y era difícil ver por donde atacarían esos monstruos.
Afortunadamente Juxta los escuchaba y olía antes de entrar a las instalaciones. Indicándole a sus compañeros por donde atacarían. La luz que emitía esa noche la luna llena también fue una bendición.
Aún quedaban Acechadores Diurnos, y ellos eran el mayor problema, dada sus propiedades curativas, solo los exterminaban decapitándolos, afortunadamente ahora podía percibir mucho menos de la mitad de la manada que los había atacado en un principio. Pero los constantes disparos y gritos habían atraído a los monstruos salvajes comunes, que trataban de escalar las murallas.
— ¡Ya no tengo balas! — Adam informó, sacando un cuchillo dentro de sus ropas. Sería una pelea cuerpo a cuerpo de ahora en adelante.
— ¡Solo mantengamos la formación! — Juxta ordenó, de tal forma que todos formaran un círculo y se cubrieran las espaldas.
Lo peor estaba por venir. Entonces la vio, a la chica de cabellos rubios pasar a su lado corriendo en dirección a la entrada, mientras luchaban.
— ¡¿Qué está?!
Charlotte llevaba dos bidones de gasolina, uno en cada mano, y trató de escalar la reja para subir a los muros.
— ¡Yo iré por ella! — Leonardo aseguró, corriendo en su dirección— ¡¿Se puede saber qué haces?!
— A esas cosas las lastima el fuego, ayúdame a rociar las murallas. Así no escalarán.
— No sé si estás loca, o eres demasiado inteligente— Leonardo se sorprendió.
— Solo ayúdame a subir ¡Ya!
Leo obedeció, subiendo a la chica delgada a la muralla, por suerte existía el suficiente ancho en esta, para poder moverse.
Charlotte comenzó a rociar el lado externo de la estructura. Cubriendo todo con el líquido inflamable.
Juxta que acaba de decapitar a uno de esos monstruos comprendió el ingenioso plan de la chica, le ordenó a Steve y Adam que reunieran a los que aún estaban vivos, para controlar el fuego, y evitar que se expandiera al campamento cuando este estuviera encendido. Los demás se quedarían cuidando la entrada.
Leonardo ayudó a Charlotte, subiendo al muro contrario, y comenzó a cubrirlo de gasolina con el bidón extra. Pateó a un Acechador salvaje que trataba de subir, haciéndolo caer, aturdido. Luego de unos segundos, la rubia y él se encontraron de frente, habían cubierto todo ya.
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Conectados [BL]
RomanceEl mundo ha sido destruido, monstruos voraces acechan en cada rincón, pero no todo está perdido, aún quedan personas dispuestas a luchar y sobrevivir. La vida de Ryan cambia drásticamente un día de tormenta, de frente a la muerte con apenas un par d...