HARRY POTTER: THE DURMSTRANG YEARS

Capítulo 3: A Visit With The Healer

Puede que el castillo estuviera en la cima de la montaña, pero la puerta era el punto más bajo y Harry vio que aún quedaba una empinada subida hasta el siguiente conjunto de almenas. El camino estaba empedrado pero era estrecho y Harry sólo podía imaginar que sería muy difícil llevar un ejército hasta la parte principal del castillo, si es que de algún modo lograban llegar tan lejos en primer lugar. También había puertas incrustadas en la pared rocosa a lo largo de todo el camino y Karkaroff explicó que albergaban una multitud de animales diferentes.

-No te dejes engañar por el tamaño de la puerta-, dijo Karkaroff. -Cada una de esas cámaras ha sido ampliada mágicamente con espacio de mago, así que es mucho más grande por dentro y ha sido encantada para crear el ambiente perfecto para que habite cada uno de los tipos de criaturas, aunque aprenderás más sobre eso si eliges estudiar Cuidado de Criaturas Mágicas en tu tercer año-.

-¿Qué otras lecciones hay?- preguntó Harry, pensando que Cuidado de Criaturas Mágicas sonaba mucho más interesante que Geografía del Inglés.

-Para primero hay Astronomía, Herbología, Encantamientos, Pociones, Transfiguraciones, Historia, Artes Oscuras, Defensa contra las Artes Oscuras, Pensamiento Crítico y Las Artes-, contestó Karkaroff.

-¡Las Artes! Eso parece sorprendente-, exclamó Harry.

-Es necesario para fomentar la imaginación de la gente-, explicó Karkaroff. -Verás que una de las mayores debilidades del mundo mágico es que la gente no tiene en cuenta las posibilidades-.

Harry asintió con lo que esperaba que pareciera un gesto de sensatez, aunque no estaba muy seguro de a qué se refería Karkaroff. Harry siempre había pensado que tenía una imaginación hiperactiva, o al menos eso era lo que la gente le había dicho cuando hablaba de las cosas extrañas que a veces ocurrían a su alrededor, aunque Harry no siempre lo había visto por sí mismo. Las extrañas estatuas que bordeaban el camino eran prueba de ello.

-¿Cuando hablas de arte te refieres a esas cosas?-. preguntó Harry, señalando las estatuas.

Karkaroff se rió. -Oh, eso no es arte, no, son gólems, o al menos eso dice la leyenda. Al parecer, fueron creados para cobrar vida y defender el castillo en caso de que fuera atacado, pero como el castillo nunca ha sido atacado, nadie los ha visto moverse, así que algunos creen que es sólo un rumor-.

Harry frunció el ceño, confundido. -¿Por qué alguien se molestaría en crear un rumor así?-.

-Es sencillo-, sonrió Karkaroff. -Aprenderás más en años posteriores, cuando cubras las tácticas de batalla, pero a veces basta con hacer que la gente crea algo para evitar un ataque-.

-¿Como hacer creer a la gente que algo es impenetrable?-.

-A veces, aunque eso puede ser contraproducente ya que algunas personas lo verán como un desafío. Sin embargo, hacer creer a alguien que algo es increíblemente difícil y que le reportará poca recompensa puede funcionar-, explicó Karkaroff. -Por eso nunca se guarda nada de valor en el castillo, sería demasiado arriesgado, sobre todo con niños sin entrenamiento alrededor. Sin embargo, como ya he dicho, aprenderás más sobre estas cosas a medida que avances en la escuela. Volviendo a las clases, además de los estudios académicos también habrá clases de educación física, dos a la semana y una larga sesión los sábados por la mañana. Las clases incluirán artes marciales, manejo de la espada, natación y tiro con arco, aunque a lo largo de los años se ofrecerán otros cursos, especialmente si tus profesores creen que tienes talento. Los sábados por la tarde están reservados para el entrenamiento de Quidditch y Ráða Kadlec siempre ofrece un curso de entrenamiento básico para los de primer año, aunque también se imparten cursos más especializados-.