[ROSÉ]
—Mierda, Jisoo —murmuro mientras ella mueve su trasero sobre mi regazo—. Basta. Detente.
Tomé su cintura y ella se detuvo bastante agitada
—¿No quieres? —preguntó sonriente—. Toda la mañana lo pediste.
—Claro que sí —ataco—, pero no en la oficina. La campana va a sonar y me quedaré con las ganas como las últimas diez veces que hemos intentado tener sexo —me quejé—. Anda, vete.
—Lo siento, en mi defensa es complicado tener a dos niños en tu departamento buscando tu atención constantemente —se encoge de hombros.
Tomé su cintura y uní mi boca a la suya para besarla.
Cuatro meses se ha estado quedando en casa y aunque aún no somos novias ni yo me sienta enamorada o algo por el estilo, ya no podemos aguantarnos y bueno, no ha resultado tan bien intentar tener sexo, de día no se puede y de noche Jeongin está molestando para dormir con Jisoo.
Al separarnos suena la campana y suspiro.
—Te quiero —susurra ella contra mis labios—. Podríamos ir a mi departamento, ya sabes, estrenarlo.
—Me gusta eso, pero... ¿no tienes hoy lo del divorcio?
—Oh, es verdad —murmura—. Mañana entonces.
—Okay. Mañana no te escaparás —tomé su cintura y la abracé—. Te quiero —mi nariz rozó su cuello y ella comenzó a reír.
Al salir de allí, Jisoo se ha ido a su salón y yo he ido en busca de algunos papeles para trabajar. Seokjin y yo hemos tenido que dar charlas debido a que el programa de salud mental aquí está dando frutos y todos quieren implementarlo.
Ha sido increíble, verdaderamente sí, he disfrutado trabajar en ésto y coordinar ciertas cosas, aunque lo interesante de ello, es que la otra semana me tomaré un descanso ya que todos mis pacientes están de alta. ¡Incluso Lalisa! ¿No es genial? Al fin sirvo para algo.
—¡Rosé! —Harry vino corriendo hasta mí— ¿Me das un dolar? Quiero galletas.
Tomé mi billetera y le di diez dolares.
—¿No te di dinero temprano? —pregunté antes de dárselo.
—Oh, sí. Me lo han robado.
—¿Quién? —pregunté rápidamente.
—No sé quienes son, estaban en el estacionamiento —se encoge de hombros— ¿me lo das ya? —pregunta estirandose.
—Cuidalo, y si ves a esos sujetos, avísame y voy a golpearlos.
—No debes hacer eso, Kim va a regañarte —murmura el pequeño.
—Si bueno, tu madre soy yo, yo decido si quiero golpearlos.
—Ella también lo es... —susurra y vemos a Irene en el salón de Harry—. ¡Adiós, mamá Rosé! —grita y se va corriendo.
Al continuar con mi camino noté como fuera el día estaba bastante nublado, hoy recibiremos la visita del mes de la señorita Mina, va todo bien y en cuanto se cumplan seis meses las visitas serán cada tres meses hasta concretar los dos años de la adopción, todo va excelente. El último informe dijo que Harry es un niño muy feliz, está muy conforme con lo que tiene y ya nos siente como su familia, creo que es adorable ver cómo se relaciona día a día con Jeongin, con Félix y con Hyunjin, bueno también con Jimin.
Jimin es el tío que se encarga de consentirlo, es adorable y molesto.
Mis padres llegan el fin de semana, quieren conocer a Harry y lograron cuadrar sus agendas para poder quedarse toda una semana. El problema está en que no sabemos dónde se van a quedar, ya que el departamento tiene todas las habitaciones ocupadas. He estado pensando en mudarme pero me aterra el hecho de dejar a Jeongin solo, ya que si bien todo Félix, Hyunjin y Jimin son excelentes cuidadores, sé que soy su única figura materna.
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Kim | Chaesoo
Fanfiction𝗖𝗦» Rosé ya no tiene 18, no ama los viernes, pero sí la pizza y los cómics. Algunas cosas no cambian. Jisoo por su parte... sigue siendo una destacada maestra, todo lo destacada que puedes ser trabajando en una escuela secundaria de Los Ángeles...