Capítulo 9

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Un año después...

Seguiré diciendo que el tiempo se pasa demasiado rápido, parece que fue ayer cuando entré a la universidad y ahora puedo decir que estoy en tercer semestre y bueno, las cosas cambiaron de una manera en que jamás pensé que cambiarían.
Rose y yo seguimos siendo muy buenas amigas y eso es algo que agradezco totalmente, es una persona muy linda; las dos siempre tratamos de meter las clases juntas, solo una que otra las tomamos separadas, pero de ahí en fuera nos hemos vuelto como uña y mugre.
Con Allison, por fin pudimos mudarnos juntas hace unos meses a un departamento que está cerca de la facultad de ella y mía, y la verdad es las dos la llevamos muy bien. Ambas seguimos trabajando en nuestros tiempos libres; yo trabajo en una boutique que está en el centro comercial de la ciudad y Allison trabaja como ayudante general en una farmacia que está cerca de nuestro departamento. Solo tenemos los domingos libres para hacer limpieza y "descansar" si lo podemos llamar así, pero es algo que llevamos bien.
Con Mae también sigo en contacto, de vez en cuando nos reunimos en el departamento o vamos a una cafetería para ponernos al corriente de lo que ha pasado en la vida de la otra y eso conlleva a todo, más en el aspecto del amor, que eso es algo que me tiene bastante sorprendida.

El semestre pasado acepté que el chico de ojos verdes me gustaba y eso fue algo que realmente no tenía planeado. Su nombre es Finn Cantwell, no me pregunten cómo es que sé su nombre porque la manera en que lo descubrí me da bastante pena, y eso es porque unas compañeras se enteraron de que me gustaba y que no sabía su nombre y le preguntaron. Claro que él se los dio, pero me arrepiento mucho por la forma en que llegaron con él.

En fin, este último suceso me hizo dar cuenta de que había superado a Ross, digo, solo de forma romántica, aún me duele el hecho de que hayamos dejado de hablar y que nuestra amistad terminara de esta forma.
Lo único que he sabido de él es que sigue en Littleton, que aparentemente tiene otra novia y que está trabajando y estudiando al mismo tiempo, igual que yo.

¿Ya tienes los boletos?- Mae.

El mensaje de Mae me había sacado de mis pensamientos.

Hoy era domingo y era mi día libre, así que estaba aprovechando para lavar un poco de ropa para la semana y descansar un poco, ya que los profesores casi no nos habían dejado tarea.

Ya, se los compré a Jacky hace unos días- Kendall.

Hace unas semanas atrás una compañera de la secundaria había anunciado una fiesta de reencuentro con todos los compañeros, lo cual se me hacía raro por el hecho de que apenas había pasado un año desde que nos graduamos de la secundaria y ya estaban haciendo una fiesta de reencuentro.
Mae y yo habíamos decidido ir a la fiesta, creo que nos hacía falta distraernos un poco, en cambio Allison se quedaría, ya que, a ella no le gusta ese tipo de ambientes, por lo que aprovecharía para ir a visitar a sus padres en lo que nosotras nos vamos de fiesta.

Bien, entonces nos veremos en unos días- Mae.

Días después...

Hoy era el día, hoy era el día en que nos iríamos de fiesta. El lugar sería cerca de la secundaria en donde estudiábamos, por lo que no había problema para ubicarnos.

-Bien- apareció Allison por la sala de estar- ya me voy con mis padres- tomó su bolso y un abrigo- cualquier cosa que necesiten Mae y tú no duden en llamarme- se acercó a mí y me dio un abrazo.

-No te preocupes, todo estará bien. Pásala bien con tus padres y hermanos- sonreí y ella caminó hacia la puerta- y mándales mis saludos-

-Por supuesto- sonrió y tomó sus llaves- nos vemos- salió por la puerta y yo tomé un gran respiro.

Tenía un presentimiento, pero no sabía de qué, solo espero no encontrarme a Matt en esta fiesta porque si no, no sé qué haré.

[...]

-Ya no estoy tan convencida de entrar- susurró Mae una vez que llegamos al lugar.

Sabía que ninguna de las dos tampoco nos gustaba este tipo de ambiente y venir a fiestas, solo que lo tolerábamos un poco más que Allison.

-Vamos a quedarnos aquí unos minutos para tratar de pensar bien las cosas- paramos de caminar y nos quedamos cerca de la entrada del lugar.

Podía identificar a varios de mis ex compañeros de secundaria y hasta el momento no había aparecido alguien realmente importante.

-¿Tú sí quieres entrar?- preguntó Mae y yo suspiré.

La verdad es que tampoco estaba tan convencida.

-No lo sé- negué con la cabeza- hay muchos compañeros, pero no hay ninguno con los que nos juntábamos-

-Lo sé- se cruzó de brazos y comenzó a ver a su alrededor- además hay varios de aquí que no me dan mucha confianza-

Yo también comencé a mirar a mi alrededor hasta que mi vista se fijó en una persona en específico y pude sentir como me faltaba el aire.

Él está aquí.

-¡Rayos!- exclamé con emoción y nerviosismo, a lo que Mae me miró con el ceño fruncido.

Su cabellera rubia estaba más larga de lo que recordaba y su sonrisa seguía igual, aunque muy en el fondo también pude ver una pizca de tristeza.
Ross se encontraba caminando junto con un grupo de chicos, todos iban hablando incluido él, hasta que sus ojos se toparon con los míos y la sonrisa que antes adornaba su rostro desapareció, para cambiar su semblante a uno de sorpresa y quedarse viendo directamente.

-¿Qué pasó?- preguntó Mae con curiosidad- Parece que viste a un fantasma-

Un nudo creció en mi garganta al verlo pasar y meterse al lugar de la fiesta.

-Ross está aquí- susurré con una mezcla de emociones.

-¿Qué dices?- abrió los ojos como platos.

-Que Ross está aquí y que él también ya sabe de mi presencia-

One Last Dance- Ross LynchDonde viven las historias. Descúbrelo ahora