One Last Dance- Ross Lynch

Capítulo 17

Allison me veía sin decir palabra alguna, es como si estuviera analizando todo lo que le conté.

-¿No me dirás nada?- pregunté mientras dejaba mi plato a un lado. Las dos ya habíamos terminado de cenar, por lo que cada una podía irse a su habitación, aunque a mí me tocaba lavar los trastes sucios, eso era ley; si a una le tocaba cocinar, la otra tenía que lavar los trastes utilizados.

-Con respecto a lo de Finn solo te puedo decir que deberías de ser más atenta- se encogió de hombros- y que no pierdas la oportunidad de sonreírle de vuelta cuando lo vuelvas a ver-

-Sí, es lo que tengo planeado hacer, con mi amiga Rose pensaremos el cómo hacerlo-

-Bien- soltó un suspiro- y con respecto a lo de Ross...-

-Dime...-

-Su amistad hasta el momento ha sido de un ir y venir, se hablan por un pequeño lapso de tiempo, pero luego se alejan- se levantó de la silla donde estaba sentada y recogió sus platos.

-¿Qué quieres decir?- fruncí el ceño e imité su acción.

-Que hay una verdad que los dos aún no quieren aceptar y es por ello que ambos se alejan- dejó sus trastes en el lavaplatos y volteó a verme.

-¿Una verdad?- la miré confundida- ¿Cuál verdad?-

-Tú sabes muy en el fondo a lo que me refiero- bostezó- pero creo que cuando llegue el momento y lugar indicado las cosas se pueden esclarecer para los dos. Cada uno está viviendo una etapa diferente y también es por ello que llegan a no saber del otro porque cada uno tiene su vida. Sé que últimamente has escuchado cosas de él y has sabido de él, pero no te carcomas la cabeza con ello y con el pasado.- se acercó a mí y me abrazó- Tú sigue con tu vida como lo has hecho hasta ahorita, si tienes la necesidad de hablarle o algo, hazlo, pero no te presiones-

Sabía a lo que se refería, ya llegará el momento en el que Ross y yo hablemos de lo qué pasó en secundaria y lo qué pasó después de que se fue a Littleton, pero creo que ahora no es el momento de hacerlo.

-¿Qué haría sin ti?- me separé de su abrazo y sonreí.

-Lo mismo digo, pequeña Kenny.- volvió a bostezar- Me iré a dormir, descansa-

-Tú también descansa- caminó lejos de mi, mientras yo me acercaba al lava trastes.

[...]

Habían pasado un par de horas y yo no podía dormir. Era una de esas noches de insomnio que me hacían dormir solo dos horas. La ventaja que tenía era que las clases de mañana eran en línea, y eso fue porque las profesoras de esas clases lo habían decidido, así que podía levantarme "tarde" y tratar de recuperar el sueño, aunque bueno, solo faltan un par de minutos para que sea medianoche.

Me había puesto mis audífonos para tratar de conciliar el sueño con un poco de música, pero hasta el momento nada había funcionado.

¿Por qué cuando me entero de cosas con respecto a Ross mi cabeza no me deja descansar?

Trataba de hacerle caso a Allison con lo que me dijo, pero no podía dejar de pensar en lo que Mae me había dicho respecto a él.

Maldición.

El sonido de mi celular a través de mis audífonos avisándome que me había llegado un mensaje me sacó de mis pensamientos... y tuve que contenerme mucho para no soltar el celular luego de ver quien me había mandado mensaje.

Pareciera como si estuviéramos conectados.

Kendall, ¿estás ahí?- Ross.

Yo sé que es media noche, pero no puedo dormir y realmente eres una de las personas con las que puedo platicar a esta hora... si es que no estás dormida- Ross.

Tomé un respiro antes de contestarle.

Estoy aquí, Ross- Kendall.

¿Todo en orden?- Kendall.

Esperé unos segundos a que me contestara.

No lo sé, realmente no puedo dormir, creo que tengo muchas cosas en la cabeza- Ross.

Ya somos dos jaja, pareciera que estuviéramos conectados, pero... ¿en serio no sabes por qué no puedes dormir?- Kendall.

Rápidamente respondió.

Bueno, mi día estuvo un poco atareado por la universidad y mi trabajo, salí con mi... novia y cuando empezó a anochecer hablé con mis hermanos y con mi amigo Elligton- Ross.

Abrí mis ojos como platos al momento de leer que había hablado con su amigo, con el mismo amigo que habló con Mae.

Me contó la novedad de que se acaba de mudar a un nuevo vecindario y que platicó con una chica... que es tú amiga- Ross.

Tomé un respiro antes de contestar.

Parece que sí estamos conectados- Kendall.

Ella me contó esta tarde que un chico se había mudado a su vecindario y resultó que era tu amigo- Kendall.

Envié esos dos mensajes y esperé su respuesta.

Claro que no le iba a decir todo lo que me dijo Mae en los mensajes, tenía que ser discreta, además de que no tenía las agallas de contarle lo que hablé con mi amiga.

Vaya, quien iba a decir que eso es lo que nos mantiene despiertos a los dos porque sé que eso también está haciendo que tú estés despierta- Ross.

Y ahora tenía cero dudas de que los dos estábamos conectados.

Probablemente...- Kendall.

Pero yo quiero saber por qué tú estás despierto, sé que es por esa razón, pero... ¿qué te dijo tu amigo como para que tuvieras tu cabeza con mil pensamientos que no te dejan dormir?- Kendall.

Rápidamente vi su respuesta.

Me ganaste con la pregunta- Ross.

Lo que me tiene así es que me echó de cabeza con tu amiga porque al menos ella mantuvo la compostura y no abrió la boca de más- Ross.

¿Qué dice?

¿A qué te refieres? Por lo que mi amiga me contó, tú amigo no te echó de cabeza- Kendall.

Al instante me contestó.

Claro que sí. Tal vez tu amiga no te lo contó a detalle, y tal vez si te lo digo yo mismo me echaré de cabeza contigo- Ross.

Sentí un poco ternura al leer sus mensajes, sabía que se sentía frustrado.

Si no quieres decírmelo, está bien. No te sientas presionado con hacerlo- Kendall.

Y para que estés más tranquilo, solo te diré que mi amiga me dijo que fui una persona importante para ti, solo eso- Kendall.

Pasaron algunos segundos hasta que contestó.

Aún lo eres- Ross.

Sonreí al leer su respuesta.

Y ten por seguro que tú lo eres para mí- Kendall.